África
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Obtén información y descubre qué servicios se prestan a las personas refugiadas, solicitantes de asilo y apátridas; conoce tus derechos y obligaciones; y consulta las respuestas a las preguntas más frecuentes en el sitio de ayuda.
En la plataforma de becas para refugiados podrás ver los programas académicos y las becas para asistir a instituciones de educación superior que ACNUR ha verificado.
Emergencias actuales
Alrededor de 30 millones de personas refugiadas, desplazadas internas y apátridas – es decir, casi un tercio del total mundial – viven en África.
Recientemente se han registrado millones de desplazamientos en Etiopía, Nigeria, la República Centroafricana, la República Democrática del Congo y Sudán del Sur; todos ellos provocados por la creciente inseguridad y las violaciones a los derechos humanos.
ACNUR trabaja en todo el continente africano para garantizar que las personas desplazadas tengan acceso a servicios (entre ellos, educación y atención médica). Asimismo, defiende el acceso a la protección y el asilo, brinda asistencia vital, y se esfuerza por reducir y prevenir la apatridia.
Para ACNUR sigue siendo prioritaria la búsqueda de soluciones duraderas en favor de las personas refugiadas y desplazadas internas, pues muchas de ellas deben superar desafíos adicionales debido a la COVID-19 y los efectos del cambio climático.
La labor de ACNUR en la región
Millones de personas en África Oriental, el Cuerno de África y los Grandes Lagos han abandonado sus hogares por conflictos, fenómenos meteorológicos y violencia política. A finales de 2021, en la región había 4,9 millones de personas refugiadas y solicitantes de asilo y 12 millones de personas desplazadas internas.
ACNUR trabaja estrechamente con sus socios para promover los derechos de las personas desplazadas por la fuerza, así como el acceso a servicios y documentación. En concreto, se sostienen estructuras comunitarias para ofrecer protección de la infancia y atender casos de violencia de género; asimismo, se fomenta la inclusión de las personas refugiadas y retornadas en los planes nacionales de educación.
En 2021, ACNUR brindó ayuda en efectivo a más de un millón de personas, lo que les permitió sufragar gastos relacionados con la electricidad, el alojamiento, la higiene, los medios de vida y la repatriación.
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Emergencia en Sudán
Cientos de miles de personas han sido desplazadas por la fuerza debido a los mortíferos enfrentamientos en Sudán.
ACNUR ha estado brindando asistencia humanitaria en Sudán y en los países vecinos; entre ellos, Chad, Egipto, Etiopía, República Centroafricana y Sudán del Sur.
La inestabilidad económica, los conflictos y la inseguridad alimentaria han aquejado al sur de África por mucho tiempo. Los fenómenos meteorológicos y la presión económica de la COVID-19 complejizan aún más el desplazamiento forzado en la región; del mismo modo, la creciente desigualdad social socava la democracia y la estabilidad.
ACNUR ha mejorado su preparación y respuesta en situaciones de emergencia; además, ha estado implementando innovadores proyectos para reducir el impacto del cambio climático. La organización aboga por el fortalecimiento de los sistemas de asilo y de los marcos jurídicos de protección – incluidos los sistemas de protección de la infancia – para asistir a los 464.000 niños refugiados y solicitantes de asilo en la región.
Por otra parte, continúa fomentando los medios de vida, la inclusión financiera y las estrategias de autosuficiencia para reforzar la integración local y el retorno voluntario.
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Emergencia en República Democrática del Congo
La situación humanitaria en la República Democrática del Congo es una de las crisis de protección más complejas en el mundo. Tras décadas de conflictos en los que son comunes el desplazamiento forzado y las violaciones a los derechos humanos, la mayoría de la población congoleña vive en situación de pobreza; además, son precarios los servicios sociales, la seguridad y la impartición de justicia.
ACNUR apoya al Gobierno y a otros socios para reforzar la inclusión de las personas de interés en los planes nacionales de desarrollo; así, se garantiza que el acceso a los recursos y oportunidades sea equitativo y se amplía el acceso a las soluciones duraderas.
En África Occidental y Central, las necesidades de las personas desplazadas por los conflictos y la inestabilidad política se multiplican con tal rapidez, que la respuesta humanitaria no logra darse abasto. A finales de 2021, había 10,7 millones de personas de interés en la región (en un año, el incremento superó los 1,1 millones).
ACNUR les proporciona albergue, ayuda en efectivo y artículos básicos de ayuda. Además, la organización les ayuda a matricularse en la escuela para que empiecen o retomen sus estudios; para ello, amplía el apoyo técnico, financiero y material.
En 2023, los esfuerzos de ACNUR se enfocarán en mejorar el monitoreo de la protección, en responder a las emergencias y en buscar soluciones a largo plazo en conjunto con los actores para el desarrollo.
Unión Africana
La Unión Africana encabeza los esfuerzos mundiales para acabar con el desplazamiento forzado, que supone un enorme desafío para la región; por tanto, se trata de uno de los socios más importantes de ACNUR.
Constituida en 2001, la Unión Africana está integrada por 55 estados miembros que trabajan en conjunto para hacer frente a las principales cuestiones políticas, económicas y sociales; entre ellas, prevenir o acabar con los conflictos, así como impulsar el desarrollo y la integración panafricana siguiendo la Agenda 2063, que es muy ambiciosa.
Recursos adicionales
El Informe Global detalla la labor de ACNUR en 2022; en concreto, pone de relieve los desafíos y los logros que hubo al responder a múltiples y amenazadoras crisis, y para satisfacer las crecientes necesidades humanitarias.
El Llamamiento Mundial ofrece información sobre los planes que ACNUR tiene para el año entrante y sobre los fondos que requiere para proteger, asistir y empoderar a las personas desplazadas por la fuerza y apátridas; también para ayudarlas a encontrar soluciones.