Solicitudes de Haití
Solicitudes de Haití
ACNUR reconoce, desde hace tiempo, que hay personas con necesidades de protección específicas, como aquellas que, entre otras razones, huyen de Haití por ser mujeres, niñas o niños; aquellas que se identifican como LGBTIQ+; o aquellas que son blanco de pandillas y otros grupos del crimen organizado.
Con ello en mente, la Agencia de la ONU para los Refugiados concluyó que, dependiendo de las circunstancias, puede considerarse que necesitan protección internacional quienes hayan sobrevivido o se enfrentan a estos tipos de violencia. Resulta crítico que el acceso de estas personas a los procedimientos de asilo sea justo y eficaz para definir oportunamente sus necesidades de protección.
En noviembre de 2022, en respuesta a la crisis humanitaria y de seguridad que persiste en Haití, ACNUR instó a los Estados a suspender los retornos forzados al país porque temía que las personas devueltas enfrentaran desplazamiento y daños irreparables.
En general, cuando se insta a los Estados a detener los retornos – como ocurre en las recomendaciones – se busca hacer patente la necesidad de respetar y honrar el principio de no devolución consagrado en el párrafo 1 del artículo 33 de la Convención sobre el Estatuto de los Refugiados de 1951. Según este principio, los Estados no deben expulsar ni devolver a las personas refugiadas o solicitantes de asilo a países donde su vida o su libertad corren grave peligro. Cuando ACNUR instó a suspender los retornos a Haití, hizo referencia a amenazantes y complejos peligros en el país para que los Estados suspendieran los retornos forzados y, así, reducir el riesgo de devolución.
