Doy la cara por ellos: Kirén Miret
Doy la cara por ellos: Kirén Miret
Kirén Miret da la cara por Ricardo para que pueda contarnos su historia.
Tú también puedes dar la cara por ellos, y formar parte de #DoyLaCaraPorEllos, usando el filtro de Instagram.
Kiren Miret es una productora de televisión y empresaria mexicana que ha trabajado para MTV, Associated Press, Biography Channel, National Geographic, CNN, A&E, Canal de la Corte Suprema, Canal 22, Gobierno del Distrito Federal, Glitz entre otros.
Además, es autora de cuatro libros infantiles que se han convertido en un referente entre el público infantil y los docentes de primaria y secundaria.
Mi nombre es Ricardo, tengo 24 años y soy de Honduras.
En mi país, la discriminación y homofobia pueden ser cuestión de vida o muerte, lo cuál siempre nos mantuvo con miedo, ya que mi hermano y yo somos homosexuales. Ambos trabajábamos en un centro comercial y teníamos la fortuna de que tanto nuestros compañeros, como nuestra jefa, eran buenos con nosotros.
Este trabajo nos brindaba cierta estabilidad, ya que desde muy jóvenes habíamos tenido que valernos por nosotros mismos, sin embargo nuestra vida cambió cuando la administradora del centro comercial se quejó con nuestra jefa diciéndole “Es que sólo contrata a personas homosexuales aquí”. La despidieron a ella y nos despidieron a todos nosotros.
A pesar de todo seguimos con nuestras vidas e intenté poner un negocio de decoración de bodas que nunca pudo prosperar porque unos pandilleros nos intentaron cobrar el “impuesto de guerra”. En Honduras, si eliges no pagar este tipo de extorsión, te matan a ti y a tu familia en frente a todos.
Estábamos aterrorizados, ya que nuestro plazo para pagar era de únicamente dos días, por lo que tomamos la decisión de huir de nuestro país. Uno nunca se imagina tener que abandonarlo todo, pero no tuvimos otra opción. No teníamos seguridad para seguir viviendo ahí y si nos hubiéramos quedado, probablemente estaríamos muertos.
No es humano tener que huir de esa manera. Nos marchamos sin decirle a nadie, ni siquiera a nuestros mejores amigos. Fingimos ir al trabajo, pero simplemente no volvimos más. Es doloroso salir de tu país, abandonar tus sueños, tus metas y lo poco que habías logrado. Lo único que teníamos era la ropa que teníamos puesta, nada más.
Cuando ingresamos a territorio mexicano teníamos mucho miedo aún y no sabíamos a lo que nos enfrentaríamos estando en un país que no conocíamos. Recuerdo que un día pudimos caminar hasta las 9 de la noche sin descanso alguno, pero nos detuvo la migración.
Yo soy diabético y traía un termo con hielo con mi insulina, que me fue confiscado porque estaba prohibido tener las jeringas. Constantemente teníamos que luchar para que me dejaran inyectarme y mi salud se deterioraba día con día. Así pasamos 25 días en una estación migratoria y sólo logramos salir cuando solicitamos la condición de refugiados.
Hoy en día hemos logrado establecernos en México y comenzamos una nueva vida. Ver a mi hermano en un entorno en donde no vive en constante temor me llena, pero aún tenemos que enfrentarnos a las desventajas que crea la xenofobia por ser hondureños.
Los nombres mostrados en esta historia fueron cambiados para proteger la identidad de las personas desplazadas que forman parte de ella.
Ahora que ya conoces la historia de Ricardo, es momento de que la compartas.
Al usar el filtro de la iniciativa #DoyLaCaraPorEllos estás aceptando el uso de tu imagen como parte de nuestra campaña. Si quieres saber más da clic aquí.