Unos juguetes de Francia llevan la alegría a niños refugiados en Nepal
Unos juguetes de Francia llevan la alegría a niños refugiados en Nepal
CAMPO DE BELDANGI, Nepal, 22 de junio (ACNUR) – Puede que las condiciones de vida sean relativamente duras en el campo de refugiados de Beldangi, al este de Nepal, pero desde la semana pasada los niños del campo caminan con una enorme sonrisa en sus rostros.
El secreto de su felicidad está en 41 grandes cajas que llegaron al campo a principios de mes procedentes del museo Quai Branly, en Francia, especializado en arte indígena y primitivo y en las culturas y civilizaciones de África, Asia, Oceanía y América.
Las cajas de cartón estaban repletas de juguetes donados para niños refugiados durante una campaña anual organizada por este museo de París y la oficina de ACNUR en la capital francesa. El valioso cargamento fue transportado gratuitamente a Nepal por la organización Aviación sin Fronteras.
Salina Sherpa, de cinco años, estaba encantada con sus nuevos juguetes: una muñeca con un vestido azul y un oso de peluche rosa. "Esta muñeca se parece a mi amiga, ¡es tan bonita! Jugaré con ella todos los días", dijo la niña.
"Siempre quise tener un avión como este", dijo Laxman Timilsina, de 10 años, sosteniendo un avión de juguete de color azul. "Es genial, es como el que veía sobrevolar mi choza todos los días. Mi padre dice que algún día nos iremos a América en un avión como éste".
El personal de ACNUR distribuyó los juguetes a organizaciones comunitarias para la infancia en Beldangi y en otros campos del este de Nepal. Estos campos albergan a más de 66.000 refugiados originarios de Bután. Otros 46.000 más han sido reasentados en países como los Estados Unidos bajo un programa que comenzó en 2008. Algunos de los refugiados llevan viviendo desde hace dos décadas en los campamentos en Nepal.
La mayoría de las familias en el campo dependen de la distribución de ayuda humanitaria y no se pueden permitir el lujo de comprar juguetes para sus hijos. "Todos los niños necesitan juguetes. Los juguetes pueden ser una gran influencia en el sano crecimiento de los niños", dijo Tila Maya Chamlagain, que está a cargo del centro de juegos en Beldangi.
En el pasado, los juguetes donados por escolares de París han sido entregados a niños refugiados en lugares como Chad, Liberia y Kenia. Rianawati, jefe de la oficina de ACNUR en la ciudad de Damak, tuvo palabras de agradecimiento para los niños franceses, el museo Quai Branly y Aviación sin Fronteras.
Por Nini Gurung y Pratibedan Baidya en el campamento de Beldangi, Nepal