Discurso del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, Filippo Grandi, en la rueda de prensa conjunta con la Comisaria Europea de Asuntos de Interior, Ylva Johansson
Discurso del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, Filippo Grandi, en la rueda de prensa conjunta con la Comisaria Europea de Asuntos de Interior, Ylva Johansson
Muchas gracias, gracias Ylva. Solo quiero hacer eco de lo que acaba de decir la Comisaria Johansson [de Asuntos de Interior]. Estoy aquí en Bruselas por dos o tres días para varias reuniones. El hecho de que durante este fin de semana hayamos presenciado nuevas llegadas a través del Mediterráneo Central es una prueba más de que sí necesitamos el Pacto [Europeo sobre migración y asilo].
Europa necesita un mecanismo predecible para abordar estos asuntos. Sí, vinieron varias embarcaciones, pero estamos hablando de números manejables.
A través de un mecanismo racional y consensuado, esto sería muy manejable, en nuestra opinión.
Incluso si hay más llegadas, como siempre a principios del verano, lo que necesitamos es un mecanismo dirigido por los Estados cada vez más predecible y más eficiente para rescatar a las personas en el mar, porque también hemos visto en las últimas semanas muchas pérdidas de vidas.
Por supuesto, necesitamos un mecanismo predecible para el desembarco y la reubicación.
Necesitamos detener las devoluciones que están ocurriendo a lo largo de la frontera exterior de la Unión Europea. Y necesitamos un mecanismo para investigar esas devoluciones cuando sucedan.
Y estoy totalmente de acuerdo con la Comisaria: necesitamos un mecanismo que equilibre los procedimientos de llegada adecuados con la solidaridad a través de la reubicación.
Personalmente, pienso que esto es lo mínimo que Europa podría poner en marcha.
No olvidemos que cuando hablamos de compartir la responsabilidad de las personas refugiadas, solicitantes de asilo y otras personas de interés de mi organización [la Agencia de la ONU para los Refugiados], el 90 por ciento de esas personas en todo el mundo no se encuentra en países ricos. Están en África, están en el Medio Oriente, están en Asia.
Entonces, lo que le estamos pidiendo a Europa es algo que otros países ya están haciendo de manera bastante sustantiva, como hemos visto incluso a lo largo de la pandemia.
También necesitamos claramente, y eso es lo que también discutimos con la Comisaria Johansson: necesitamos un mecanismo eficaz y justo, basado en los derechos – pero sobre todo justo – para el retorno a sus países de quienes no son reconocidos como personas refugiadas. Y este mecanismo necesita el apoyo también de los países a los que serían retornados.
Finalmente, dos puntos más que también son aspectos muy importantes del Pacto propuesto.
Uno es intensificar el reasentamiento, es decir, los Estados europeos que reciben a refugiados de otros países donde ya estas personas se reconocieron como refugiados, como por ejemplo el Líbano, Turquía, Kenia, Pakistán, entre otros. Y estoy muy contento de que la Comisión esté aumentando sus iniciativas para alentar a los Estados a realizar más reasentamientos para proporcionar vías seguras para las personas refugiadas que podrían venir a Europa y evitar pasar por rutas peligrosas.
Luego, por supuesto, hay una dimensión externa del Pacto: ayudar a los países que acogen a un gran número de personas refugiadas, o los países de tránsito a través de los cuales llegan las personas refugiadas, como en los países de África, por ejemplo, a gestionar mejor esos flujos para que se pueda evitar que las personas se embarquen de nuevo en otros viajes peligrosos.
Quiero concluir diciendo que estoy perfectamente consciente de que las negociaciones en torno al Pacto son muy complejas y que hay diferentes intereses que necesitan conciliarse.
Pero me gustaría dejar constancia una vez más de que la Agencia de la ONU para los Refugiados respalda plenamente a la Comisión Europea al esperar y confiar en que estos acuerdos serán finalmente aprobados por la Unión Europea.