El ACNUR exhorta a dialogar para poner fin a los enfrentamientos entre pastores y agricultores en Nigeria
El ACNUR exhorta a dialogar para poner fin a los enfrentamientos entre pastores y agricultores en Nigeria
GINEBRA, 6 de mayo de 2016 (ACNUR) – El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) insta a adoptar medidas urgentes para poner fin a la escalada de tensiones y enfrentamientos entre pastores nómadas y agricultores que este año han dejado tras de sí varios centenares de muertes y varios miles de desplazamientos en las regiones más fértiles de Nigeria.
Los últimos enfrentamientos tuvieron lugar la semana pasada, cuando nómadas Fulani atacaron varias aldeas en el distrito de Ukpabi Nimbo del estado de Enugu, en la región sudoriental de Nigeria, destruyendo numerosos hogares, causando la muerte a más de 40 personas y obligando a huir a varios centenares.
Estos sucesos se produjeron unos dos meses después de los ataques perpetrados contra el estado de Benue, que, según las estimaciones, provocaron la muerte de 300 personas y el desplazamiento de más de 100.000 dentro del territorio del estado, de las cuales unas 7.000 se encuentran en campamentos y el resto han sido acogidas por familiares, según informan miembros del personal del ACNUR que visitaron la zona.
Anteriormente ya se habían registrado enfrentamientos entre los nómadas y la población local de Benue pero el brote de violencia que estalló el pasado mes de febrero en 10 distritos fue especialmente alarmante y el ACNUR teme que el problema pueda recrudecerse de nuevo y volverse incontrolable a menos que se adopten medidas de inmediato, incluida una mayor presencia de las fuerzas de seguridad.
El ACNUR insta al gobierno de Nigeria, con el apoyo de la comunidad internacional, a que contribuya a reforzar el diálogo entre las comunidades en estados como Benue, Taraba y Enugu y que colabore con la sociedad civil y también con los estamentos tradicionales y religiosos, para abordar las causas de un conflicto que se ha enconado durante 20 años. El ACNUR también aboga por que se aumente la asistencia a los desplazados, en particular las mujeres y los niños.
El avance de la desertificación, la utilización excesiva de las tierras para el pastoreo y la reducción de las precipitaciones en los últimos años han exacerbado la situación y han obligado a los nómadas de las regiones septentrionales a desplazarse hacia las tierras agrícolas más ricas del sur. Los últimos enfrentamientos fueron provocados por el desacuerdo con respecto a las rutas de pastoreo y la invasión de las tierras de labranza.
A finales de marzo, el ACNUR encabezó una misión destinada a evaluar la situación en el estado de Benue tras los ataques ocurridos en febrero, así como las necesidades de las personas afectadas. El equipo visitó varias aldeas del distrito de Agatu que habían sido incendiadas y totalmente arrasadas. La mayoría de las aldeas estaban desiertas y las escuelas, las iglesias y los centros de salud habían quedado destruidos.
Los habitantes de las aldeas estaban alojados en refugios provisionales y necesitaban alimentos, alojamiento, artículos de ayuda de emergencia, medicamentos y asistencia sanitaria, asistencia psicosocial y de otro tipo. El ACNUR y sus socios han proporcionado alojamiento, material de asistencia básico y ayuda para la subsistencia a los desplazados, incluidos los afectados por los últimos enfrentamientos.
Desde 2011, cuando los enfrentamientos entre pastores y agricultores empezaron a intensificarse, unas 400.000 personas se vieron obligadas a desplazarse debido a estallidos esporádicos de violencia. Aproximadamente un 80% de ellas han regresado pero siguen enfrentándose a muchos problemas.
El conflicto entre pastores y agricultores es independiente de la lucha que ha mantenido el Gobierno en los últimos años con el grupo insurgente Boko Haram en la región nororiental de Nigeria, que ha provocado el desplazamiento de unos tres millones de personas dentro del territorio nigeriano y hacia los países vecinos.
Los grupos nómadas se desplazan con su ganado desde el Senegal y Malí en África occidental hasta el Chad y la República Centroafricana. En algunos de estos países han tenido enfrentamientos en relación con el pastoreo y el tránsito por las tierras.
Gracias a la Voluntaria en Línea Luisa Merchán por el apoyo ofrecido con la traducción del inglés de este texto.