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ACNUR da la bienvenida al registro de refugiados sirios en zonas urbanas de Turquía

Historias

ACNUR da la bienvenida al registro de refugiados sirios en zonas urbanas de Turquía

Alrededor de 40.000 refugiados en áreas urbanas han sido registrados hasta la fecha bajo la nueva política con otros 30.000 esperando que se registren las citas.
11 March 2013
El Alto Comisionado, António Guterres, se reunió con una familia de refugiados sirios durante su visita al campo de Nizip, en Turqu

ANKARA, Turquía, 11 de marzo de 2013 (ACNUR) – El Alto Comisionado de ACNUR, António Guterres, elogió este lunes a Turquía por su política y asistencia a decenas de miles de refugiados sirios, que incluye el inicio de una operación de registro de refugiados en zonas urbanas.

Anteriormente, las cifras oficiales del gobierno turco sólo incluían a los 186.000 refugiados sirios que hay actualmente acogidos en los 17 campos que gestiona el gobierno. Pero dado que cada vez son más los sirios que buscan asistencia en pueblos y ciudades, el gobierno ha decidido recientemente incluir a los refugiados urbanos en sus estadísticas.

Unos 40.000 refugiados en zonas urbanas han sido registrados hasta la fecha bajo esta nueva política, y otros 30.000 están esperando cita para ser registrados. Guterres, que está en Turquía de visita durante tres días, dijo que este sistema de registro de refugiados urbanos es "innovador y un ejemplo de buenas prácticas".

El Alto Comisionado afirmó que ACNUR tiene previsto continuar con su esfuerzo a la hora de ofrecer su experiencia para ampliar sus capacidades e identificar a los refugiados más vulnerables y a aquellos con necesidades especiales. "Es imprescindible el registro para la protección de refugiados" subrayó.

Durante su visita, Guterres firmó un acuerdo de cooperación con el Primer Ministro de la Agencia para la Ayuda ante Desastres (AFAD por sus siglas en turco) con el objetivo de financiar 10 centros de registro adicionales. También firmó un acuerdo con la Media Luna Roja turca para cooperar en materia de logística y apoyo en emergencias y contingencias para las operaciones de ACNUR a nivel global. La Agencia de la ONU para los Refugiados está financiando la fabricación de otras 18.500 tiendas a través de la Media Luna Roja.

El registro de refugiados y la gestión de campos están siendo coordinados por AFAD, con el apoyo operacional de la Media Luna Roja turca y otras agencias. ACNUR ofrece asesoramiento técnico y asistencia.

En una rueda de prensa conjunta con el presidente de AFAD, Fuad Oktay, celebrada este lunes en Ankara, Guterres pidió a la comunidad internacional que establezca "una cooperación bilateral más fuerte con Turquía, apoyando su notable esfuerzo no sólo ayudando a refugiados, sino contribuyendo a la estabilidad en la región."

El Alto Comisionado destacó que las cifras de refugiados en países vecinos, que la semana pasada sobrepasaron el millón, podrían elevarse aún más si el conflicto en la vecina Siria continúa agravándose.

"Podríamos tener hasta 3 millones de refugiados para finales de año si la guerra no cesa. Nuestro principal objetivo es asegurar que, sea cual sea la dimensión de la tragedia, las fronteras y el espacio protección sigan abiertos" dijo.

El Ministro de Asuntos Exteriores turco, Ahmet Davutoglu, reiteró, en un encuentro con Guterres el pasado domingo que, en el caso de Turquía, todos los sirios eran bienvenidos, sin importar su origen étnico o religioso. Desde que estalló la crisis, se ha estado ofreciendo refugio y asistencia a los sirios que han estado llegando a Turquía y se ha garantizado que no sean devueltos a su país contra su voluntad. El Alto Comisionado dijo que los estándares de asistencia ofrecidos por Turquía a los sirios eran "un ejemplo extraordinario de protección de refugiados".

Mientras tanto, Guterres se reunió hoy por la mañana con sirios que viven en el campo de Nizip, hogar para casi 9.000 refugiados en la provincia de Gaziantep. Dentro de una tienda, Raeda Abdulrahman, una mujer viuda, le contó al Alto Comisionado que huyó de su ciudad, Idlib, porque tenía miedo de los constantes bombardeos.

Flanqueada por cuatro de sus hijos, esta refugiada dijo que estaba preocupada por su hija y su yerno, que se habían quedado allí. "No hay electricidad ni teléfono allí, así que he perdido el contacto" dijo, añadiendo: "Aquí, sin embargo, tenemos de todo. Podemos dormir tranquilos en Turquía. No hay bombardeos".

Por Melissa Fleming en Ankara, Turquía