El ACNUR y sus socios aceleran entrega de ayuda a los refugiados sirios por la tormenta invernal

BEIRUT, Líbano, 12 de Diciembre (ACNUR) – La Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados está acelerando la implementación de medidas para proteger a cientos de miles de refugiados sirios en el Líbano, incluyendo a 120.000 personas que viven en delgadas tiendas de campaña, mientras ya se sienten en la región los primeros efectos de una dura tormenta de nieve invernal.

Con el apoyo de las fuerzas armadas libanesas, el ACNUR y las ONG socias pudieron a principios de esta semana acelerar la distribución de paquetes de emergencia de ayuda para alojamiento – que incluyen láminas de plástico, madera y herramientas – a miles de refugiados viviendo en tiendas de campaña en el Valle de Bekaa, al este del Líbano, hasta el momento la región más afectada por la enorme tormenta invernal llamada "Alexa".

Los equipos de emergencia continuaron trabajando el viernes, a pesar de los caminos bloqueados y las condiciones climáticas. Además se están preparando albergues alternativos para los refugiados cuyas tiendas de campaña se vean afectadas por la nieve, la lluvia y las inundaciones.

Cerca de 125.000 refugiados viviendo en la región de Bekaa han recibido paquetes de emergencia invernales y se espera distribuir ayuda a otros 55.000 refugiados más en los próximos días. Las Agencias Humanitarias trabajando en el Líbano han distribuido 255.000 frazadas y más de 6.000 cocinas en los últimos meses. Se han distribuido además cerca de 45.000 tarjetas para cajeros automáticos (cada una por un monto equivalente a U$ 150 dólares) a las familias más vulnerables para que puedan comprar cocinas y combustible.

La tormenta Alexa golpeó al Líbano el martes en la noche, provocando nevadas en las zonas más altas y lluvias en todo el país, acompañadas de fuertes ventiscas. De acuerdo a los pronósticos se espera que las condiciones climáticas permanezcan muy severas en los próximos días y se esperan más nevadas. Los informes de Siria y partes de Turquía indican condiciones climáticas similares en ambas regiones.

El ACNUR está especialmente preocupado por los miles de refugiados en el Líbano que viven en condiciones precarias, pues sus albergues son frágiles y por debajo de los estándares mínimos. El número de refugiados en el Líbano se ha multiplicado por cinco en el último año.

"Para los miles de refugiados en el Líbano, y para los que se encuentran en los países vecinos, además de las personas desplazadas en Siria, una tormenta como crea enormes dificultades y sufrimientos adicionales", dijo Amin Awad, director de la Oficina del ACNUR para el Medio Oriente y Norte de África. "Con la ayuda del Líbano, estamos haciendo todo lo posible para entregar rápidamente ayuda adicional a las personas que más lo necesitan. Esto, de manera adicional a los preparativos de invierno ya realizados en los últimos meses".

Una gran cantidad Agencias Humanitarias están trabajando en la respuesta de invierno en el Líbano, incluyendo al Programa Mundial de Alimentos, el Consejo Noruego para los Refugiados, la Organización Internacional para las Migraciones, Oxfam, Medair, Save the Children, World Vision, Humedica, Mercy Corps, Caritas, Handicap International, Concern, Acted, el Consejo Danés para los Refugiados (DRC) y UNICEF.

El ACNUR comenzó a distribuir frazadas termales y otros artículos a inicios de noviembre. En todo el Oriente Medio el ACNUR ha distribuido unas 70.000 lonas de plástico para ayudar a los refugiados a preparar mejor para el invierno sus tiendas de campaña y albergues, mientras que algunos han recibido calentadores eléctricos o de kerosén.

El PMA y sus socios están cubriendo las necesidades alimentarias de los refugiados sirios recién llegados a las zonas afectadas por la tormenta en el Líbano, con reservas de alimentos suficientes para alimentar a 150.000 personas. En otras partes del país, la agencia alimentaria de la ONU está proporcionando asistencia alimentaria a más de 600.000 refugiados sirios registrados en el ACNUR mediante vales electrónicos de comida.

El Líbano es en la actualidad el país que acoge a la mayor cantidad de refugiados de Siria en la región, con casi 840.000 sirios registrados como refugiados o que esperan ser reconocidos como refugiados. A diferencia de otros países vecinos de Siria, en el Líbano no hay campamentos de refugiados establecidos. Las personas viven en las comunidades locales en casi 1.600 áreas diferentes.

El Líbano ha respondido generosamente ante esta afluencia masiva, y a inicios de esta semana autorizó a las fuerzas armadas libanesas para ayudar al ACNUR a acelerar la distribución de la ayuda invernal. Hasta el viernes, los esfuerzos se enfocaron en llevar ayuda a los lugares más afectados en Bekaa por la tormenta. En Turquía, los equipos del ACNUR en el terreno no pudieron visitar los campamentos de refugiados cerca de Kilis porque la nieve ha bloqueado los caminos en esa región.

Con cerca de 2.3 millones de refugiados sirios en toda la región y millones de personas más desplazadas dentro de Siria, las condiciones climáticas invernales son una de las preocupaciones de la comunidad humanitaria. Los trabajos de preparación para el invierno, que involucran mejoramiento de albergues, calentadores, mantas y ropa han estado en marcha desde hace meses. Se espera que a fines de esta semana se pueda realizar el primer puente aéreo transfronterizo desde Irak al noreste de Siria con materiales adicionales de ayuda humanitaria para el invierno para las poblaciones desplazadas – si el tiempo lo permite.