ACNUR y las organizaciones religiosas acuerdan ampliar la cooperación a desplazados en todo el mundo
ACNUR y las organizaciones religiosas acuerdan ampliar la cooperación a desplazados en todo el mundo
Una importante reunión llevada a cabo en Ginebra entre la Agencia de la ONU para los Refugiados y los representantes de las principales religiones, así como de ONGs religiosas, ha finalizado hoy con un acuerdo para incrementar la cooperación en la ayuda a los desplazados forzosos y apátridas de todo el mundo.
ACNUR, una organización humanitaria no política y secular, ha trabajado durante más de 60 años ayudando a millones de desplazados alrededor del mundo. Al igual que varias organizaciones religiosas, ACNUR proporciona protección y asistencia para la gente que se ve obligada a huir. En sus conclusiones, el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados, António Guterres, dijo que una cooperación más cercana entre actores humanitarios y religiosos sólo podría servir para ayudar a los desplazados.
"La religión y la espiritualidad motivan e impulsan a los individuos, comunidades y organizaciones a ayudar a aquellos que lo necesiten y a salvarles del peligro", dijo Guterres, destacando la cercana relación entre el trabajo humanitario y los valores y principios que son base de todas las fes. "Hubo un reconocimiento unánime (en la reunión) sobre las valiosas contribuciones que hacen las organizaciones religiosas y las comunidades para proteger a los refugiados y a los desplazados".
La reunión de esta semana con los individuos y organizaciones que representan a múltiples religiones fue la primera de este tipo para ACNUR, aunque ésta se produce tras una serie de debates que ha organizado ACNUR con ONGs de cooperación y organizaciones religiosas, así como a principios de año con la Organización Islámica de Cooperación. También en esta reunión de dos días estuvieron presentes representantes de gobiernos, organizaciones internacionales y ONGs.
Guterres dijo que si bien muchos participantes se habían dado cuenta de que la violencia y la persecución son perpetrados en ocasiones en nombre de la religión, los grupos religiosos podrían jugar también un papel importante en oposición a la intolerancia religiosa, al estar más integrados en los esfuerzos de prevención del conflicto y reconciliación. También habló de intereses comunes substanciales entre las organizaciones humanitarias y religiosas en otras áreas.
"Los actores religiosos tienen que jugar un papel desde el comienzo de una crisis, con vista a promover soluciones duraderas antes de que la situación de los refugiados se alargue", dijo. "Pueden prevenir el conflicto y centrarse en las raíces de las causas del desplazamiento, ayudar a los refugiados a tomar decisiones informadas en el exilio, y jugar un papel central en buscar soluciones duraderas ayudando a los refugiados a integrarse en sus nuevas comunidades".
Durante la reunión, una serie de grupos de trabajo expusieron sus ideas para ayudar a la integración de los desplazados en sus comunidades, incluyendo la formación de actitudes positivas hacia los que vienen de fuera y la lucha contra la xenofobia. También se ha progresado en la promoción de soluciones duraderas, y en la mejora del entendimiento entre las ONGs humanitarias y religiosas.
Guterres dijo que ACNUR pretendía trabajar en estas ideas explorando cómo se pueden poner en práctica.
ACNUR, dijo, "profundizaría en su conocimiento sobre tradiciones religiosas a través de todas las fes con vistas a mejorar su propio compromiso con actores religiosos, incluyendo comunidades religiosas locales". El diálogo que comenzó esta semana, dijo, se desarrollaría para ser institucionalizado y abrirlo hacia más participantes humanitarios, religiosos, gobiernos y ONGs.