ACNUR facilita refugio a iraquíes desarraigados por el conflicto en Anbar
ACNUR facilita refugio a iraquíes desarraigados por el conflicto en Anbar
BAGDAD, Irak, 20 de octubre de 2015 (ACNUR) – La agencia de la ONU para los refugiados ha abierto un nuevo campo para personas desplazadas internas (PDI) en Ameriyat Al Fallujah, en la provincia iraquí de Anbar.
El nuevo campo en Markazi está situado a unos tres kilómetros del puente de Bzeibiz, sobre el río Éufrates, que es el principal punto de acceso desde Anbar a la provincia de Bagdad, y puede ofrecer refugio a unos 3.000 iraquíes desplazados.
La mayoría de los residentes en el campo han huido de los enfrentamientos en Ramadi desde abril de este año y han estado viviendo en escuelas, edificios en construcción o en casas de familiares en la zona de Ameriyat Al Fallujah, que sirve de lugar de refugio para iraquíes desarraigados en la inestable provincia de Anbar.
Se estima en más de 250.000 el número de civiles que han huido de Ramadi desde abril, la mayoría de los cuales han permanecido en la provincia de Anbar, viviendo con familias anfitrionas, en asentamientos informales, en edificios en construcción, en escuelas o en apartamentos alquilados.
"El campo de Markazi está estratégicamente situado cerca del puente que conecta las provincias de Anbar y Bagdad, de tal manera que sus residentes pueden tener acceso a un lugar seguro si las líneas de batalla se acercan al campo", dijo el Representante de ACNUR en Irak, Bruno Geddo.
"Las personas desplazadas, que se han dispersado por toda la zona, y viven en unas condiciones precarias, podrán ahora asentarse adecuadamente y beneficiarse de servicios médicos y de otro tipo en la cercana Bagdad", añadió.
A muchas de las personas que huyen de Anbar se les sigue negando el acceso a la provincia de Bagdad debido a restricciones por razones de seguridad impuestas por las autoridades, que exigen que los residentes de Anbar tengan familiares u otro tipo de "valedor" en Bagdad para poder acceder.
En los últimos meses, miles de iraquíes se han visto retenidos del lado de Anbar del puente, a menudo en condiciones penosas, sin suficientes alimentos o careciendo de un alojamiento adecuado. Si bien la situación en el puente ha mejorado, se calcula que unas 50 familias desplazadas continúan del lado de Anbar, sin poder cruzar el río hacia Bagdad.
Entre los nuevos residentes del campo de Markazi está Rawa, de 23 años, su esposo y sus tres hijos.
"Huimos de Ramadi hace cuatro meses. Durante un tiempo, nos cobijamos bajo los árboles y tuvimos que cambiar de autobús seis o siete veces para llegar a Alrahalyia", explicó.
Alrahalyia está en el camino entre Ramadi y Ameriyat al-Fallujah.
Careciendo de valedor, la familia de Rawa ha visto denegado su acceso a Bagdad, aunque a su esposo Mohammed, que sufre graves problemas oculares, se le permite cruzar el puente para buscar tratamiento médico en la ciudad.
Markazi está cerca de otros dos campos de ACNUR, que ya dan cabida a otros 3.000 desplazados, lo que supone que la capacidad de los campos en Anbar es de 6.000 personas. El campo más nuevo se puede ampliar, en caso necesario, para albergar a 3.000 personas más. El mes pasado, ACNUR también puso en marcha el campo de Sadr Al-Yusufiya, dando cobijo a cerca de 2.000 personas al otro lado del puente, en la provincia de Bagdad.
El campo de Markazi cuenta con 50 cocinas comunitarias, 25 áreas sombreadas y 50 lavabos, así como una red interna de electricidad y un servicio diario de camiones que aportan agua. Unas 300 personas (o 50 familias) se trasladaron al campo el lunes (20 de octubre), y se espera que lleguen más en los próximos días.
Los recién llegados han recibido colchones, un hornillo de campaña, utensilios de cocina, una garrafa para almacenar agua y otros objetos de casa para ayudarles a instalarse.
Actualmente, hay unos 3,2 millones de iraquíes desplazados internos repartidos en 3.000 localizaciones diferentes por todo el país. La provincia de Anbar acoge al mayor número de PDI -unos 580.000, lo que supone un 18% de la población total de PDI en Irak.
ACNUR ha podido construir el campo de Markazi gracias a la financiación flexible de los donantes. Países como Estados Unidos, Suecia, Países Bajos, Noruega, Dinamarca, Australia, Francia, España, Suiza y Canadá están aportando fondos no vinculados a ACNUR para atender las necesidades urgentes de los iraquíes desplazados internos y permitir así una respuesta humanitaria oportuna.
Gracias a la Voluntaria en Línea Esperanza Escalona Reyes por el apoyo ofrecido con la traducción del inglés de este texto.
