“Mi derecho a existir”: el conmovedor llamado de Maha Mamo a erradicar la apatridia resonó en Uruguay

MONTEVIDEO – El Ministerio de Relaciones Exteriores de Uruguay fue el anfitrión del Taller sobre el Derecho a la Nacionalidad y Ciudadanía Legal, organizado con el apoyo de la Institución Nacional de Derechos Humanos y Defensoría del Pueblo (INDDHH) y ACNUR, la Agencia de la ONU para los Refugiados. El evento, que se realizó el martes 19 de noviembre, reunió a funcionarios públicos, académicos, activistas, organizaciones de la sociedad civil y organismos internacionales para reflexionar sobre las consecuencias de la apatridia, intercambiar experiencias y compartir buenas prácticas para garantizar el derecho a la nacionalidad. 
 
La participación de Maha Mamo marcó uno de los momentos más conmovedores de la jornada. Su historia, la de una mujer apátrida durante tres décadas, emocionó a un auditorio de un centenar de personas que desbordó la Sala Reinaldo Gargano de la Cancillería uruguaya. “Cuando no tienes documentos vives como una sombra, invisible. Cada aspecto de la vida diaria se convierte en un desafío: estudiar, acceder a un hospital o incluso ir a una fiesta. Yo quería existir”, afirmó. Su vida dio un giro en 2018, cuando fue reconocida como apátrida y luego naturalizada brasileña. “No se trata de números, se trata de personas. Cada vida que ayudemos a reconstruir es un paso hacia una sociedad más justa, inclusiva y humana”, agregó durante su exposición, que se tituló “Mi derecho a existir”. 

En el taller, Alejandra Costa, Directora Adjunta de Política del Ministerio de Relaciones Exteriores, destacó el papel de Uruguay en los esfuerzos por erradicar la apatridia. Y subrayó: “Nuestro país ha demostrado a lo largo de su historia el compromiso con la protección de los derechos humanos y las libertades, adaptando marcos jurídicos, fortaleciendo instituciones e impulsando políticas públicas”. Costa remarcó que “El Estado está dispuesto a generar los debates necesarios para adecuar su legislación a los estándares internacionales, que evolucionan y requieren adaptaciones con el tiempo”. 
 
Karmen Sakhr, Representante Regional de ACNUR para el Sur de América Latina, explicó: “Abordar y encontrar soluciones a la apatridia es crucial. La naturalización es una herramienta central para la integración y puede jugar un rol clave en resolver este problema”. Sakhr reiteró el compromiso de ACNUR para acompañar los esfuerzos del país en este ámbito. 

Por su parte, Juan Ignacio Mondelli, Jefe de Oficina de ACNUR en Uruguay, resaltó: “Para las personas refugiadas, la naturalización significa plena integración local. Para las personas apátridas, la erradicación de una condición que implica marginación. Es una solución duradera”. Sobre el testimonio de Maha, agregó: “Nos sensibiliza profundamente; ella nos enseña que este es un proceso de largo aliento, pero que tiene un impacto transformador en la vida de las personas”. 

Jimena Fernández, Directora de la Institución Nacional de Derechos Humanos y Defensoría del Pueblo de Uruguay, enfatizó la relevancia del derecho a la nacionalidad como un derecho humano fundamental: “Nos importa subrayar la muy fuerte alianza con ACNUR y el compromiso conjunto con Cancillería y el Ministerio del Interior. Este tema merece que lo abordemos en una mesa como esta, para que no haya más diferencias entre ciudadanos legales y nacionales, simplemente uruguayos”. 

El taller reafirmó el compromiso de Uruguay y la comunidad internacional en la lucha por erradicar la apatridia, subrayando que el derecho a la nacionalidad es fundamental para garantizar la dignidad y los derechos humanos de millones de personas. Como expresó Maha Mamo a su paso por Montevideo, “Las personas apátridas tienen un sueño: pertenecer, contribuir y ser reconocidas”.