Reunificación familiar
Reunificación familiar
Junto con sus socios, ACNUR ayuda a salvaguardar el derecho fundamental de los refugiados a la unidad familiar; además, se esfuerza por apoyar a las familias refugiadas que han sido separadas y por mejorar el acceso a procedimientos de reunificación familiar.
“La familia es el elemento natural y fundamental de la sociedad y tiene derecho a la protección de la sociedad y del Estado”.
¿Eres una persona refugiada que busca cómo reencontrarse con su familia?
La unidad familiar constituye un derecho universal. Muchas familias se separan cuando son forzadas a abandonar sus países de origen. La experiencia es muy dolorosa, pues pueden pasar años sin verse, o bien quizás nunca vuelvan a encontrarse.
Los Estados tienen la responsabilidad de proteger y de restaurar la vida familiar de las personas refugiadas mediante procedimientos de reunificación familiar. ACNUR ayuda a salvaguardar el derecho fundamental de los refugiados a la unidad familiar; además, apoya a las familias refugiadas que han sido separadas y trabaja para mejorar el acceso a procedimientos de reunificación familiar.
Las familias deben estar juntas
Los procedimientos de reunificación familiar se basan en el derecho a la unidad familiar. En muchas sociedades, la familia es la unidad fundacional; además, su integridad está protegida por el derecho internacional y por instrumentos jurídicos de carácter vinculante a nivel regional.
En contraste con las soluciones en terceros países (como el reasentamiento, la educación o el empleo), los Estados tienen una responsabilidad legal consistente en crear marcos jurídicos que faciliten la reunificación familiar. Con base en estas obligaciones internacionales, muchos países cuentan con procedimientos de reunificación familiar para apoyar a las personas refugiadas.
Cuando están bien diseñados, estos procedimientos pueden ayudar a crear vías regulares y seguras que impiden que, para lograr reencontrarse con sus seres queridos, las personas refugiadas tengan que emprender travesías peligrosas e irregulares que ponen en riesgo sus vidas. La eficacia de los procedimientos de reunificación familiar puede desalentar a las redes de tráfico que se aprovechan de la necesidad de las personas de reencontrarse con sus familiares.
Reunificar a las familias separadas genera más posibilidades de integración, dado que, por lo regular, las familias unidas se adaptan mejor a entornos nuevos. Quienes hacen parte de una familia no solo inspiran seguridad (sobre todo a las personas en situación de vulnerabilidad, como mujeres, niñas, niños y personas mayores), sino que también abonan a la autosuficiencia. La reunificación familiar es un bálsamo que ayuda a las personas refugiadas a sanar el trauma provocado por la guerra.
¿Qué hace ACNUR para impulsar la reunificación de las familias refugiadas?
La reunificación familiar es un procedimiento que gestiona el Estado en consonancia con su marco jurídico. Por tanto, la responsabilidad de reunificar familias refugiadas recae, primordialmente, en los Estados.
Por su parte, ACNUR:
- monitorea en qué medida cumplen los Estados con las obligaciones de reunificación familiar;
- aboga constantemente por la adopción de procedimientos flexibles que, además de centrarse en la protección, consideren las limitaciones que impone la condición de refugiado; y
- no solo apoya a las familias para que tengan acceso a la información y a la asistencia jurídica y administrativa que brindan los socios pertinentes, sino que también coordina a socios clave para crear sistemas que apoyen a las personas refugiadas.
Para que proceda la reunificación familiar, la persona que haya iniciado el procedimiento debe haber sido reconocida como refugiada, o bien debe haber recibido protección complementaria de algún Estado. Además, los familiares de la persona cuya condición de refugiado haya sido reconocida también deben necesitar protección internacional.
Circunstancias que pueden obstaculizar la reunificación familiar
Es innegable que sigue habiendo barreras prácticas, jurídicas y financieras que obstaculizan la reunificación de las familias refugiadas; entre ellas:
- Procedimientos complejos. Los procedimientos de reunificación familiar suelen ser complicados; además, las familias no siempre tienen acceso a información confiable en su lengua.
- Impedimentos financieros. Algunos países requieren que se pague una cuota al presentar una solicitud de reunificación familiar; otros exigen que las personas refugiadas demuestren que cuentan con solvencia económica para poder sostener a su familia.
- Intransigencia en los trámites y largos períodos de espera. En algunos países, el plazo para presentar una solicitud no es suficiente; además, si bien hay quienes cumplen con los criterios, no les es posible cumplir con los plazos. Asimismo, es probable que las personas que han recibido protección complementaria tengan que esperar antes de poder presentar una nueva solicitud. Por otra parte, una vez que se presentó una solicitud, los tiempos de espera suelen ser prolongados (en ocasiones, toman años); por tanto, las familias se mantienen separadas.
- Variedad de definiciones del concepto de 'familia'. Hay tantas definiciones de familia como hay países y culturas. En ese sentido, los procedimientos de reunificación familiar con frecuencia determinan un número limitado de tipos de parentesco posibles, lo cual excluye a personas cuya dependencia es social, emocional o económica.
- Desafíos con respecto a la documentación. Para las personas refugiadas no es fácil acreditar su identidad ni su parentesco mediante pasaportes, certificados de nacimiento o de matrimonio, etc.
- Presencia consular. Cuando las embajadas tienen poca presencia en el país de acogida, quizás se solicite a los integrantes de una familia que viajen a países o regiones vecinas en distintas etapas del procedimiento de reunificación familiar. Más allá de ser costoso y peligroso, para las personas refugiadas resulta imposible cumplir con este requisito.
- Desafíos para la protección. Casi siempre, los integrantes de una familia son también refugiados. En consecuencia, cuando se les solicita acercarse a las autoridades de su país de origen para obtener documentación, se les expone a más peligros.
La Red Mundial de Reunificación Familiar
Creada en 2020, la Red Mundial de Reunificación Familiar (FRUN, en inglés) se convirtió en la primera plataforma global dedicada a la reunificación familiar en beneficio de personas refugiadas y otras que requieren protección internacional. En esta red convergen voces expertas, integrantes de la comunidad académica y partes interesadas clave que tienen un propósito común; este consiste en promover y facilitar el acceso a los procedimientos de reunificación familiar.
Esta red no está abierta a cualquiera, sino que sus posibles miembros deben contar con aprobación tras consultar al Grupo Asesor de la Red Mundial de Reunificación Familiar.
En el Foro Mundial sobre los Refugiados de 2023, la Red Mundial de Reunificación Familiar movilizó a diversos agentes para impulsar un compromiso de múltiples partes interesadas que busca la reunificación de un millón de familias para 2030.
Para conocer más detalles, puedes ponerte en contacto con [email protected], o bien visitar la página de Internet.