“Esperanza lejos del hogar”, una nueva campaña global con la que ACNUR solicita acciones y muestras de solidaridad para las personas forzadas a huir

GINEBRA – ACNUR, la Agencia de la ONU para los Refugiados, lanzó una nueva campaña (titulada “Esperanza lejos del hogar”), con la que solicita a los Estados compromisos sólidos y muestras de solidaridad para defender los derechos de las personas que buscan protección a causa de guerras, violencia y persecuciones.

La campaña se lanzó en un contexto en el que las cifras de desplazamiento forzado en el mundo han llegado a niveles nunca antes vistos (110 millones de personas), el acceso al asilo corre peligro en muchas partes del mundo debido a políticas cada vez más restrictivas, y el reasentamiento y otras soluciones a largo plazo han ido disminuyendo.

El derecho a buscar protección está bajo amenaza en varias partes del mundo porque se han propagado la xenofobia y la discriminación (incluidas las ideas populistas antirrefugiados), y porque las políticas de admisión son cada vez más duras y restrictivas. Además, las vías regulares y seguras para solicitar asilo son insuficientes; en consecuencia, las personas forzadas a abandonar sus hogares enfrentan dificultades para ingresar a territorios seguros y acceder a otros derechos. En este contexto, muchas personas no tienen más opción que emprender peligrosas travesías por vías irregulares – por mar y por tierra – para ponerse a salvo.

Son muchos los países y las comunidades que reciben y protegen a las personas refugiadas; de esa forma, les ofrecen la oportunidad de reconstruir sus vidas y de hacer importantes contribuciones a las comunidades que les han dado acogida. Sin embargo, es necesario que más Estados incorporen esta práctica y muestren solidaridad con otros, sobre todo con los países de renta media y baja, pues son estos los que han acogido al mayor número de refugiados en el mundo.

“Las personas que huyen de guerras, violencia y persecuciones deberían ser recibidas con amabilidad y compasión, no con barreras, restricciones y discriminación, que no deberían tener cabida en el mundo actual. Estas personas necesitan protección y seguridad. La comunidad internacional tiene la responsabilidad de unir esfuerzos para encontrar soluciones que permitan a los refugiados vivir en condiciones dignas y seguras”, recalcó Elizabeth Tan, Directora de la División de Protección Internacional de ACNUR.

Con el lema “Esperanza lejos del hogar”, la campaña solicita que las muestras de solidaridad alrededor del mundo se conviertan en acciones y soluciones concretas mediante la cooperación internacional, reformas legales y cambios en política pública.

Con esta campaña, durante los próximos tres años, ACNUR colaborará con sus socios y otras partes interesadas para impulsar cambios en leyes y políticas públicas partiendo de cinco ejes centrales:

garantizar el acceso a territorios seguros y evitar que las personas se enfrenten a la violencia o mueran en su recorrido hacia la protección;

crear condiciones propicias y dar un trato adecuado a las personas refugiadas, en consonancia con los derechos humanos, la dignidad y la inclusión;

promover la adhesión a la Convención sobre el Estatuto de los Refugiados, lo que permitirá eliminar restricciones y establecer procedimientos de asilo justos y eficaces;

ampliar el acceso a soluciones duraderas, incluido el reasentamiento; y

mostrar solidaridad y brindar apoyo a los países y comunidades que acogen a grandes poblaciones de refugiados.

“Es encomiable la solidaridad mostrada por muchos Estados al recibir a las personas forzadas a huir, incluso cuando ellos mismos enfrentan dificultades económicas. Sin embargo, es necesario hacer mucho más para apoyar a las comunidades de acogida. Esta campaña ofrece la oportunidad de emprender más acciones como muestra de solidaridad hacia millones de personas desplazadas por la fuerza y hacia las comunidades que las acogen, centrándonos en nuestra humanidad común y trabajando de manera conjunta para encontrar soluciones”, aseveró Dominique Hyde, Directora de la División de Relaciones Externas de ACNUR.

Notas para la prensa:

Con esta campaña se marcan los cien días que faltan para la celebración del Foro Mundial sobre los Refugiados, un evento de gran trascendencia internacional en el que convergerán líderes mundiales y tomadores de decisiones, organizaciones de la sociedad civil, organismos internacionales y otras partes interesadas, con el propósito de encontrar soluciones en favor de las personas refugiadas y de las comunidades de acogida. El Foro Mundial sobre los Refugiados ofrece a los Estados la oportunidad de renovar los compromisos que asumieron con respecto a la protección de los derechos de las personas refugiadas; asimismo, es una ocasión para encontrar soluciones que permitan a los refugiados vivir en condiciones dignas y retribuir a las comunidades que les han dado acogida.

Los Estados tienen la responsabilidad de apoyar a las personas refugiadas y de garantizar que reciban protección; por tanto, ningún país debería llevar a cuestas esta responsabilidad en solitario. Dar acogida a grandes números de refugiados supone una presión enorme sobre los recursos, la infraestructura y los servicios sociales de los países de acogida. Además, el desplazamiento provocado por guerras, violencia y persecuciones constituye una cuestión humanitaria que atañe al mundo entero; por tanto, la comunidad internacional debe trabajar de manera conjunta para encontrar soluciones sostenibles y duraderas en beneficio de las personas que necesitan protección internacional.

Esta campaña se lanzó a la par de una petición global que insta al público, a las organizaciones y a los líderes del mundo a sumarse a los esfuerzos, añadiendo su nombre, para mostrar solidaridad hacia las personas refugiadas y defender el derecho a buscar protección de guerras, violencia y persecuciones. 

Esta petición se mostrará en el Foro Mundial sobre los Refugiados como un gesto de solidaridad de personas en distintas partes del mundo.

ACNUR tiene presencia en el terreno en 135 países, donde brinda asistencia vital y protección en situaciones de emergencia; aboga por mejores sistemas y leyes de asilo para que las personas desplazadas puedan acceder a sus derechos; y se implica en la búsqueda de soluciones duraderas que permitan a las personas desplazadas volver a casa en condiciones seguras, o bien a construir un futuro en otro país. En cumplimiento de su mandato, ACNUR protege a las personas refugiadas colaborando estrechamente con los Estados y otros socios – incluidos los propios refugiados y las comunidades de acogida – con el propósito de garantizar que las personas forzadas a huir puedan acceder a sus derechos y encontrar soluciones que les permitan vivir en condiciones dignas y seguras.

Visitar el sitio de la campaña