Familias celebraron las fiestas de fin de año junto a organizaciones sociales y a ACNUR en Chile

CHILE – ACNUR, la Agencia de la ONU para los Refugiados, apoyó diversas iniciativas desarrolladas por organizaciones comunitarias locales con motivo de las fiestas de fin de año 2024. Estas actividades reunieron a más de 800 personas, incluidas niñas, niños y adolescentes, en eventos multiculturales enfocados para promover la coexistencia pacífica y fortalecer el tejido social en comunidades donde conviven personas de múltiples nacionalidades, como chilenas, colombianas, venezolanas, haitianas y bolivianas. 

En el norte de Chile, 300 vecinas y vecinos de los campamentos Alto Molle, La Pampa, el Paso de la Mula y el Boro, en Alto Hospicio, disfrutaron de actividades recreativas como juegos inflables, camas elásticas, además de colaciones y regalos. La actividad, organizada por el centro social Mink´A, contó con el apoyo de ACNUR y de alumnos voluntarios de las universidades de Tarapacá y Arturo Prat.  

“Estos días son especiales, están cargados de sentimientos y a nosotros nos duele ver las necesidades que están pasando estas familias que viven en este campamento. Ellos han sufrido momentos dolorosos desde que dejaron sus países y muchos de ellos se han enfrentado al hambre, frío y carencias”, destacó Enrique Solís, presidente del Centro Social Mink´A. “Este tipo de actividades, que entregan alegría a todos y todas, sin importar las diferencias, no deben vivirse solo una vez en el año. Por eso, el llamado es a ser más humanos todos los días, a ser más solidarios, porque ver la sonrisa de niñas y niños es una alegría inmensa”, agregó Solís.  

Carlos, vecino del sector, agradeció la realización de la actividad: “En estas fechas, uno que está lejos de su tierra, de su país, extraña mucho a su familia y este encuentro permite que uno se reúna con varios compatriotas y con personas chilenas para pasar un rato ameno. El corazón se llena de alegría, tanto los niños como las personas adultas”. Camila, de 12 años, aseguró que la actividad “fue muy bonita. Me gustaría que se hicieran más encuentros como este. Hubo muchas cosas divertidas y los regalos fueron muy lindos”. 

En la capital del país ACNUR apoyó otras instancias de celebración que llegaron a cerca de 500 personas. Una de las actividades fue “Un Universo en Colores”, que tuvo lugar en el santuario del Padre Hurtado en Santiago y fue organizada por la Organización Transformando Vidas (OTV), la Red de Apoyo Solidario, Emprendedoras con Amor Especial y Espacio Migrante. El encuentro convocó a niños, niñas y adolescentes con necesidad de protección internacional y con discapacidad. 

“La idea surgió al unir nuestra pasión y nuestro trabajo para crear un espacio alternativo de inspiración navideña. En este espacio, se dispusieron varias áreas donde niñas y niños pudieron integrarse a través de actividades lúdicas, como baile terapia, baile artístico y pinta caritas. Nos esforzamos para que todas las actividades se desarrollaran de manera inclusiva e integral, sin distinción de bandera ni condición”, comentó Kisbel Sánchez, Fundadora de OTV. 

Además, se realizó la “Fiesta de Navidad”, liderada por Compromiso Migrante, cuyo objetivo fue brindar un espacio de alegría, inclusión y protección a las niñas, niños y adolescentes, quienes disfrutaron de actividades recreativas y musicales para promover su bienestar emocional y físico. 

“Para muchas personas que han tenido que dejar sus países y sus hogares, esta época del año es un momento difícil, lleno de nostalgia donde los seres queridos se extrañan más que nunca. Por eso quisimos apoyar iniciativas, ideadas genuinamente por las organizaciones comunitarias, cuyo objetivo fue brindar un momento para que las familias más vulnerables puedan compartir, encontrarse y conocer al resto de la comunidad donde conviven personas de distintos países. De esta manera se va creando vida de barrio, redes de cariño y solidaridad”, valoró Carolina Díaz, Asistente Sénior de Terreno de ACNUR en Chile.