ACNUR emplea estrategias alternativas para la gestión de los campamentos de Dadaab

En su esfuerzo para mantener las operaciones a pesar de la creciente inseguridad y el reducido acceso humanitario a los campamentos de refugiados de Daddab, el ACNUR ha estado buscando soluciones para garantizar la continuidad de la prestación de asistencia y servicios en el mayor asentamiento de refugiados del mundo.

Las medidas adoptadas incluyen una involucración más fuerte y profunda de las comunidades de refugiados en la gestión cotidiana de los campamentos, con la participación de diferentes grupos de la población refugiada, como los adultos mayores, los empresarios, los jóvenes. Para completar estas medidas, el ACNUR está organizando actividades de capacitación, asesoría y fortalecimiento institucional para los trabajadores y voluntarios en los campamentos.

Los refugiados siempre han tenido un papel fundamental en la gestión de los campamentos. Pero en Daddab ese papel está siendo ampliado. Los hospitales, por ejemplo, no han dejado de funcionar en este período tan difícil, gracias a los trabajadores refugiados, nacionales y a algunos trabajadores internacionales. Además, en situaciones que dificultan el acceso a los campamentos para los trabajadores nacionales e internacionales, los puestos de salud son manejados por trabajadores refugiados quienes han recibido capacitación durante años para brindar servicios médicos básicos y remitir los casos más complicados a los hospitales de los campamentos. Los trabajadores refugiados también reciben cursos de capacitación para enfrentar de forma adecuada los casos de violencia sexual y de género.

Junto con nuestros socios, estamos trabajando para controlar los brotes de sarampión y cólera. Se realiza un control semanal de los casos, cuyo número está disminuyendo en todos los campamentos: de 150 casos sospechosos a finales de 2011, a cerca de 50 casos sospechosos en las primeras semanas de este año.

Además, los líderes refugiados o los refugiados que trabajan para organizaciones socias están recibiendo capacitación para identificar aquellos individuos o familias que necesitan protección inmediata o asistencia vital. Eso es de particular importancia para las personas con discapacidad, quienes no podrían tener acceso a los servicios de otra forma, así como para los menores no acompañados y las víctimas de violación u otras formas de violencia. Desde comienzos del año el ACNUR, las organizaciones socias y los refugiados han trabajado juntos para identificar a más de 150 personas y familias vulnerables, quienes han sido remitidas a las oficinas del ACNUR en Dadaab para entrevistas de protección y seguimiento legal, médico y psicosocial.

En materia de agua y saneamiento, los refugiados están construyendo nuevas letrinas en suelos arenosos y rocosos y recolectan los desechos sólidos transportándolos en carretas a los depósitos establecidos. Los comités de agua y saneamiento, una red de voluntarios que controlan el suministro de agua y los servicios sanitarios en todo el territorio, han recibido recursos y responsabilidades adicionales por el coordinamiento general y la supervisión de estas actividades, funcionando ahora como centro de servicios en los campamentos.

Al mismo tiempo, también estamos involucrando a los jóvenes refugiados en programas de medios de vida, para que desarrollen y cultiven sus habilidades y experiencias laborales. Algunos de ellos ya han hecho trabajo voluntario en la recolección de basura y en el control de los puestos de suministro de agua.

Más de 30 escuelas en los campamentos permanecen abiertas y funcionan gracias al trabajo de maestros refugiados. A pesar de la inseguridad, los exámenes nacionales de Kenia se realizaron regularmente en los campamentos a finales de año y los resultados en promedio fueron mejores de los del año anterior. Los exámenes se pudieron realizar gracias al apoyo de miembros de la comunidad que patrullaban las escuelas y controlaban las entradas.

Estamos identificando otros grupos específicos para ampliar una participación, por ejemplo los empresarios y líderes religiosos, y fortaleciendo la concienciación y la comunicación a través de la radio. Junto con la ONG Film Aid International, estamos a punto de lanzar un nuevo sistema de SMS que les permitirá a los refugiados recibir y contestar a los mensajes de texto gratuitamente.

El complejo de campamentos de Dadaab acoge actualmente a más de 460.000 refugiados. La tercera parte de esta población llegó tan solo en 2011, huyendo del conflicto, la sequía, la hambruna y las violaciones de los derechos humanos en Somalia. Los campamentos en Dadaab se abrieron hace dos décadas y en principio fueron diseñados para acoger a unos 90.000 refugiados.