El éxodo continúa: miles de pakistaníes siguen huyendo de las zonas de conflicto en el noroeste de Pakistán
El éxodo continúa: miles de pakistaníes siguen huyendo de las zonas de conflicto en el noroeste de Pakistán
En los distritos de Mardan, Charsadda, Swabi y Nowshera, situados en la Provincia de la Frontera Noroeste (NWFP, por sus siglas en inglés) de Pakistán, la población civil sigue huyendo de las zonas afectadas por el conflicto entre las fuerzas gubernamentales y las milicias. Unas 18.000 familias, aproximadamente 126.000 personas, se registran de promedio cada día en estos distritos.
Según las autoridades provinciales, el número de personas desplazadas desde los distritos de Swat, Bajo Dir y Buner que se han registrado a través del procedimiento urgente instituido desde el 2 de mayo ha superado ya 2,38 millones. Ya empezó la segunda fase del proceso de registro y estas cifras están siendo verificadas con controles cruzados, por lo que podrían experimentar variaciones.
El gobierno federal y las autoridades provinciales están analizando las posibles formas de registro y ayuda que se podrían ofrecer a las personas desplazadas que se encuentran fuera de la NWFP.
Hemos sido informados de que muchas personas aún se encuentran atrapadas en las zonas de conflicto. El levantamiento del toque de queda tan sólo dura unas horas y las carreteras se ven colapsadas por personas que se apresuran a huir. Además, los que escapan de la inestable región reportan que el autobús que cubre la ruta entre Mingora, situada en el distrito de Swat, y Mardan ha triplicado el precio de su billete, que ha pasado de 2.000 a 6.000 rupias (de 24 a 74 dólares).
En los campamentos de Jalala, Sheikh Yaseen, Sheikh Shahzad y Yar Hussein el ACNUR está trabajando con las autoridades gubernamentales para construir espacios sombreados separados, para hombres y mujeres, así que los que ya encontraron la seguridad de los campamentos puedan tener acceso a áreas comunitarias frescas. En Sheik Shazad, por ejemplo, se han establecido 14 zonas comunales con sombra, la mitad para hombres y la otra mitad para mujeres. En los sectores que ya disponen de electricidad, los espacios comunitarios cuentan con neveras y otros tres puntos de conexión eléctrica para ventiladores, lámparas y recarga de aparatos electrónicos como teléfonos móviles. Las autoridades locales continúan instalando la red eléctrica en los campamentos.
Junto a nuestra contraparte, el Programa de Desarrollo Comunitario (CDP, por sus siglas en inglés), ACNUR ha comenzado a distribuir ladrillos a las familias para que puedan construir hornos en los campamentos de Yar Hussain, Jalala, Sheikh Yaseen, Sheikh Shazad y Jalozai. Los hornos permitirán a los desplazados cocinar sus propios alimentos con las raciones que les distribuye el Programa Mundial de Alimentos. Hasta ahora, el gobierno ha distribuido entre los desplazados comidas preparadas a través de contratos con empresas privadas.
Al mismo tiempo, el ACNUR sigue siendo testigo de múltiples muestras de generosidad por parte de la comunidad pakistaní hacia sus conciudadanos. Por ejemplo, en el campamento de Jalozai, que en este momento acoge a otros 50.200 nuevos desplazados que han ido llegando desde el 2 de mayo, un donante privado ha ofrecido paquetes de comida con harina de trigo, azúcar, especias, té, legumbres y siropes de sabores para unas 2.400 personas.
Otras personas están llevando comida, ropa y colchones para las miles de familias que se alojan en escuelas. Una mujer que ahora reside en Islamabad, pero que procede de Mardan, viaja cada fin de semana a su ciudad de origen para llevar el dinero que recoge entre sus amigos en la capital, y entregárselo a los desplazados que viven en escuelas. Esta mujer también les ofrece ropa y té.
El ACNUR también ha ampliado su ayuda a las personas que residen en escuelas de los distritos de Mardan y Swabi. En la región de Mardan, nuestros equipos han finalizado prácticamente la evaluación de 448 escuelas, y ya está en marcha la distribución de material de ayuda humanitaria, que incluye bidones, cubos, utensilios de cocina, colchones y sábanas, para 4.500 familias (aproximadamente 37.000 personas).
Muchas personas desplazadas también han buscado cobijo en casas de familiares y amigos, o en casas alquiladas y ACNUR está planificando también la distribución de ayuda a estas personas a corto.
El pasado sábado, ACNUR reforzó el aprovisionamiento de materiales de ayuda humanitaria para la operación en el noroeste de Pakistán con un envío por avión del gobierno italiano a Islamabad de 36 toneladas que incluía tiendas de campaña, rollos de lona impermeable, utensilios de cocina, bidones, jabón, generadores, tanques de agua y equipamiento para depurar agua, que han sido donado a ACNUR.
El Banco de Ayuda creado por ACNUR en Nowshera ha recibido donaciones en especie de donantes privados, que van desde sacos de dormir hasta neveras portátiles. Nuestro socio local el "programa de Apoyo al Sarhad Rural" está distribuyendo estos artículos entre las persona desplazadas.
Continuamos comprando suministros en Pakistán y realizando envíos desde nuestros almacenes distribuidos por todo el mundo. Sin embargo, ACNUR necesita de manera urgente fondos para acelerar la compra de material humanitario para su operación de ayuda a los desplazados en el noroeste de Pakistán hasta finales de 2009, para lo cual, ha solicitado 84 millones de dólares como parte del llamamiento conjunto que realizó la ONU el pasado viernes. © ACNUR