Últimas noticias sobre Lesbos y las islas griegas
Últimas noticias sobre Lesbos y las islas griegas
El personal de ACNUR en las islas griegas ha trabajado durante la semana para ayudar a los refugiados, inmigrantes y comunidades de acogida afectados por la huelga de transporte marítimo, la cual ha durado cuatro días, y ha acabado esta mañana.
Se estima que en estos momentos hay 20.000 refugiados e inmigrantes en las islas, lo que está generando una presión considerable sobre las limitadas instalaciones de acogida de varias islas. Esta situación hace aún más patente la urgencia de las repetidas peticiones de ACNUR para mejorar las condiciones de acogida e incrementar la capacidad de recepción en Grecia. El reciente acuerdo para aumentar el número de plazas de recepción en Grecia será un factor clave para estabilizar la situación y ayudará al programa de reubicación. ACNUR está trabajando con la UE y los Estados miembros para apoyar esta iniciativa.
Se han logrado avances esta semana con la primera reubicación planificada de solicitantes de asilo desde Grecia a países de la Unión Europea, en este caso a Luxemburgo. Un total de 30 sirios e iraquíes han sido reubicados en un primer vuelo.
A continuación se presenta un resumen de la situación actual en varias islas y el trabajo realizado por ACNUR durante esta semana para ayudar a mitigar la presión provocada por la huelga de transporte marítimo.
Ayer, en Lesbos, el número de llegadas disminuyó ligeramente, pero se calcula que el miércoles ya había en la isla entre 7.000 y 10.000 refugiados e inmigrantes, la mayoría en la ciudad de Mitilene y alrededores. Cientos de ellos permanecían acampados en la zona del puerto y otros miles se encontraban en las inmediaciones del campamento de Moria. ACNUR ayudó al gobierno a aumentar la capacidad de recepción proporcionando unidades de alojamiento y una carpa tipo almacén. No obstante, en estos momentos, la capacidad de acogida sigue siendo muy limitada, forzando a muchas personas a dormir a la intemperie, entre ellos mujeres y niños. Además de transporte, ACNUR ha tenido que distribuir mantas, esteras para dormir y barritas energéticas para ayudar a aquellos que duermen al raso a entrar en calor. Además, ACNUR ha utilizado altavoces para informar sobre la huelga de transporte marítimo y ofrecer otra información de interés.
En Leros se calcula que ayer había unos 4.000 refugiados e inmigrantes, isla que cuenta con una población total de cerca de 8.000 residentes. Como es lógico, esta situación está generando una sobrecarga en los servicios públicos, incluido el suministro de luz y agua. El personal de ACNUR en Leros está identificado a aquellas personas con necesidades específicas y les están dando prioridad para acceder al escaso espacio de acogida disponible. La Agencia de la ONU para los Refugiados también está construyendo más unidades de alojamiento para familias, pero, debido a la masificación, encontrar espacio es extremadamente difícil. Además, la Agencia está trabajando para mejorar el abastecimiento de agua y el saneamiento, por ejemplo, instalando bombas de agua. Asimismo, ACNUR está trabajando con la policía y la guardia costera para distribuir material de ayuda como mantas. El suministro de alimentos también escasea e incluso las tiendas locales se están quedando sin género ya que la huelga de transporte marítimo ha interrumpido las entregas a la isla. A pesar de esto, los voluntarios han distribuido algo de comida.
En Quíos, se registraron ayer al menos 1.000 nuevas llegadas, con lo que el número de personas que se encuentran en la isla a la espera de ser trasladados a la península griega ha alcanzado un total de al menos 2.400. En estos momentos se observa un aumento de llegadas que se prevé que siga creciendo mientras se mantenga el buen tiempo. No hay alojamiento suficiente y la gente está durmiendo en jardines municipales donde ACNUR ha levantado cerca de 80 tiendas de campaña para personas en situación de mayor riesgo. Una gran carpa de ACNUR que se encuentra en el puerto está ya abarrotada, así como los hoteles locales. Se espera que a lo largo de hoy esté listo un nuevo campamento de ACNUR en Suda, lo cual ayudará a mitigar la presión en materia de alojamiento.
En Samos, el buen tiempo y el mar en calma propiciaron nuevas llegadas durante la jornada de ayer (jueves), que ascendieron a cerca de 900, la mayoría sirios. Con estas llegadas, el total de refugiados e inmigrantes que están esperando en la isla suman ya unos 3.500. No hay alojamiento suficiente. Algunas personas están durmiendo en el centro de identificación, mientras cerca de 2.500 están en los alrededores del puerto, donde las personas más vulnerables están durmiendo en 16 unidades de alojamiento para familias proporcionadas por las autoridades locales. Muchos de los que han llegado recientemente han montado sus propias tiendas de campaña en el puerto, mientras otros duermen a la intemperie sobre el duro suelo o sobre las esterillas de ACNUR.
La masificación de personas dificulta la distribución de asistencia, pero ACNUR está trabajando para identificar a aquellos con necesidades específicas y facilitar su registro. El ayuntamiento, los militares, una ONG y los voluntarios están repartiendo comida. ACNUR está contribuyendo con el suministro de barritas energéticas.
En Kos, como resultado del buen tiempo y el mar en calma se están registrando nuevas llegadas. Ayer, se produjo una nueva tragedia en el mar en la que un niño de cuatro años falleció y otro de seis años permanece desaparecido. El personal de ACNUR ha informado de que están llegando más familias afganas e iraníes, aunque los sirios siguen conformando la mayoría. En la isla hay pocos recursos disponibles para refugiados e inmigrantes. Todos los hoteles están completos y el parque arqueológico, donde están pasando la noche la mayoría de personas, está saturado. ACNUR pidió al ayuntamiento que abriera un pabellón de baloncesto, un teatro o algún estadio local para poder dar una mayor acogida, pero este se negó. ACNUR, a través de Kos Solidarity, ha intensificado la prestación de asistencia, que incluye mantas y esteras para dormir.
En los alrededores de Kálimnos, la red de ayuda de la comunidad local ha ofrecido un buen apoyo a las personas llegadas e incluso ha acompañado a los supervivientes de un naufragio reciente hasta Kos para asistir a los funerales. En estos momentos, hay cerca de 250 refugiados en la isla. Las nuevas llegadas están quedándose en hoteles y en un edificio desocupado que el ayuntamiento ha puesto a su disposición. ACNUR está montando un campamento de emergencia en el puerto gestionado por el ayuntamiento, que incluirá 16 unidades de alojamiento para familias de refugiados.
Bajo estas circunstancias, miles de mujeres y niños refugiados se ven obligados a dormir a la intemperie o en instalaciones de acogida abarrotadas y poco apropiadas, donde se ven expuestos a todo tipo de riesgos que incluyen la violencia sexual. Es esencial darles un cobijo apropiado para poder protegerles y, con la llegada del invierno, muy pronto la cuestión del alojamiento será de vital importancia.
Los menores no acompañados y separados son un motivo de creciente preocupación y ACNUR está ayudando a reunificar familias dando la asistencia necesaria. ACNUR también está ofreciendo ayuda psicosocial y legal para las víctimas de los naufragios. Los voluntarios y contrapartes siguen siendo decisivos para cubrir algunas carencias más apremiantes.
ACNUR seguirá ofreciendo su apoyo a las autoridades griegas para la mejora de la acogida y el registro en las islas. La Agencia de la ONU para los Refugiados solicita 32 millones de dólares para los trabajos de preparación frente al invierno en Grecia. Esta cantidad forma parte del plan de preparación para el invierno en Grecia y los Balcanes anunciado ayer, y que asciende a 96 millones de dólares.