Ecuador: Refugiados y migrantes enfrentan barreras entrelazadas para su integración en Guayaquil, a pesar de oportunidades
Ecuador: Refugiados y migrantes enfrentan barreras entrelazadas para su integración en Guayaquil, a pesar de oportunidades
Más de la mitad de las personas refugiadas y migrantes que viven en Guayaquil, Ecuador tienen una buena relación con sus comunidades de acogida, reveló un informe que ACNUR, la Agencia de la ONU para los Refugiados, lanzó hoy sobre la situación de las personas en movilidad humana en la ciudad. Sin embargo, aproximadamente un tercio de la población se siente insegura en su comunidad de acogida.
Entre los incidentes que más promueven la percepción de inseguridad en la ciudad se encuentra la extorsión por parte de grupos criminales y las amenazas derivadas de negarse a efectuar los pagos. Algunas personas encuestadas mencionaron al ACNUR que tuvieron que cambiarse de sus casas o cerrar sus negocios para evitar incidentes de violencia. Esto, sumado a altos niveles de pobreza, la poca capacidad de generar recursos regularmente y la discriminación, ha impactado fuertemente las oportunidades de integración de muchas personas.
“El deterioro de las condiciones socioeconómicas después de la pandemia y otros factores han incrementado los riesgos y necesidades que enfrentan las personas en movilidad humana en ciudades como Guayaquil”, señaló Giovanni Bassu, Representante de ACNUR en Ecuador. “No poderse o sentirse en la capacidad de integrarse en comunidades de acogida tiene consecuencias inmensas en las posibilidades futuras de hacer una vida independiente y de contribuir al Ecuador”.
Según el informe, desarrollado a partir de entrevistas y encuestas con 464 familias refugiadas y migrantes residentes en Guayaquil, otro de los factores entrelazados es la discriminación, que tiene un impacto directo en el acceso que pueden tener las personas en movilidad humana a vivienda, empleos, educación, salud y a sistema judicial. Esto afecta en mayor medida a personas LGBTIQ+.
En este contexto, las personas refugiadas y migrantes enfrentan mucha más dificultad para cubrir sus necesidades básicas, con más del 50 por ciento de ellas habiendo tenido que adoptar algún mecanismo para cubrir necesidades básicas: reducir las porciones de comida (23,6 por ciento), limitar el consumo de alimentos de los adultos para priorizar a las niñas y los niños (19,9 por ciento), pedir dinero prestado (17,1 por ciento) o exponerse a largas jornadas de trabajo con poco descanso (13,6 por ciento).
Ecuador es hogar de más de medio millón de personas forzadas a huir, incluyendo personas refugiadas y migrantes de Colombia y Venezuela. Según cifras del ACNUR, casi 108.000 viven la Provincia de Guayas, 60 por ciento de las cuales residen en Guayaquil. Aquí, la Agencia de la ONU para los Refugiados y sus socios han velado por asistir técnicamente a las instituciones gubernamentales; facilitar
el acceso al asilo, fortalecer los sistemas de protección con enfoque integral de atención a grupos prioritarios; mitigar la discriminación y xenofobia; fomentar integración local promoviendo la inclusión socioeconómica de personas en movilidad humana y sus comunidades de acogida; e intensificar esfuerzos para facilitar el acceso a la primera etapa del proceso de regularización migratoria iniciado por
el gobierno nacional.
El informe puede consultarse aquí.
Para más información sobre este tema, favor de contactar:
- Diana Díaz Rodríguez, [email protected]