El Alto Comisionado Filippo Grandi elogia los avances en los retornos de los refugiados burundeses, pero pide más apoyo

BUJUMBURA, Burundi, y DODOMA, Tanzania – Dada la mejora de las condiciones en Burundi, el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, Filippo Grandi, ha reiterado en el compromiso de ACNUR en apoyar los retornos seguros de las personas refugiadas desde sus respectivos países de asilo y su posterior reintegración.

Desde 2017, más de 200.000 refugiados burundeses han recibido ayuda de ACNUR, la Agencia de la ONU para los Refugiados, para retornar voluntariamente desde los países vecinos.

Finalizando una visita de dos días al país, Grandi también expresó su agradecimiento al presidente Evariste Ndayishime por los esfuerzos de Burundi hacia la estabilización.

“Vivimos en un mundo donde existen pocas oportunidades para buscar soluciones a los desplazamientos. Con demasiada frecuencia, los conflictos duran muchos años, pero me anima ver que los refugiados burundeses están tomando la decisión de retornar tras años en el exilio. Todos debemos trabajar para garantizar que su repatriación sea sostenible”, declaró Grandi. “Los esfuerzos del Gobierno de Burundi y de sus socios para ayudar a los refugiados burundeses a retornar a sus hogares son alentadores”.

Grandi visitó la zona de Rugombo, donde se reunió con algunas de las personas recién retornadas y vio de primera mano el apoyo que ACNUR y sus socios brindan a los retornados que están reconstruyendo sus vidas. La asistencia ofrecida a quienes retornan a Burundi incluye transporte, alimentos, ayuda en efectivo y artículos para el hogar. Dada la magnitud de las necesidades, ACNUR ha decidido reforzar su apoyo a las personas retornadas.

“Sin embargo, necesitamos que los actores de desarrollo ayuden a mejorar el acceso a los servicios y los medios de vida en las comunidades de retorno, que también necesitan apoyo. Todos son ciudadanos de Burundi y deben integrarse en los planes e iniciativas nacionales de desarrollo”, añadió Grandi.

Burundi también acoge generosamente a 80.000 refugiados congoleños. Grandi visitó el centro de tránsito de Cishemere, en el noroeste del país, en la frontera con la República Democrática del Congo (RDC), donde se reunió con personas refugiadas que huyeron de la violencia y los ataques brutales en el este de la RDC.

Desde Burundi, Grandi voló a Dodoma, en Tanzania, para reunirse con la Presidenta Samia Suluhu Hassan. Entre otros temas, abordaron los avances en la creación de condiciones más propicias para el retorno de las personas refugiadas en Burundi. Grandi también elogió la larga tradición de Tanzania en la acogida de personas refugiadas e instó a continuar en los esfuerzos para atender las necesidades de quienes huyen de los conflictos.

Cerca de 248.000 personas refugiadas y solicitantes de asilo, principalmente de Burundi y la RDC, viven en Tanzania. El país acoge al mayor número de refugiados burundeses de todo el mundo.

“Nuestros equipos seguirán trabajando de cerca con los dos gobiernos, los socios, y los donantes –incluidos los actores del desarrollo – para proteger y encontrar soluciones para las personas desplazadas”, afirmó Grandi.

En este contexto, ACNUR acoge con satisfacción el reciente anuncio de la Unión Europea de proporcionar generosamente 40 millones de euros en los próximos años a varios socios que apoyan las soluciones en Burundi. La financiación garantizará que los refugiados burundeses en la región, así como los que han retornado al país, reciban el apoyo que necesitan para vivir con seguridad y dignidad. La ayuda incluirá apoyo a la protección y la resiliencia, asistencia jurídica, prevención y respuesta a la violencia de género, alfabetización y actividades agrícolas.

Para más información, de favor contactar:

• En Nairobi (regional), Faith Kasina, [email protected], +254 113 427 094
• En Burundi, Bernard Ntwari, [email protected], +257 79 918 902
• En Tanzania, Chadi Oanes, [email protected],  +255 755 314 549
• En Ginebra, Olga Sarrado, [email protected], +41797402307