La primera Copa de los Refugiados de Porto Alegre estuvo marcada por la solidaridad, la integración y mucho entretenimiento
La primera Copa de los Refugiados de Porto Alegre estuvo marcada por la solidaridad, la integración y mucho entretenimiento
BRASILIA, 27 de marzo de 2017 – Cerca de 110 atletas refugiados y migrantes de distintas nacionalidades, divididos en ocho equipos, dieron el 26 de marzo un ejemplo de solidaridad, espíritu deportivo e integración cultural en el estadio Arena do Grêmio de Porto Alegre. Es la primera vez que la Copa de los Refugiados se celebra en Porto Alegre y se ha hecho como parte de las celebraciones del aniversario de la ciudad, integrando el calendario oficial de eventos conmemorativos.
Este torneo de fútbol tiene como objetivo principal la integración sociocultural de aquellos migrantes y refugiados que han escogido Brasil como su nuevo hogar, y reunió a jugadores residentes en Río Grande del Sur procedentes de Senegal, Angola, Haití, Venezuela, Colombia, Perú, la República Democrática del Congo, Siria, entre otros. El sentimiento predominante entre todos fue la felicidad por jugar en un estadio ya consagrado y, sobre todo, poder representar a sus países de origen.
Para Fernando, refugiado colombiano que lleva 14 años viviendo en Brasil, fue una experiencia única, no sólo por los partidos de fútbol, sino también por la oportunidad de integración con el resto de los jugadores. "Todo está yendo bien, nos estamos divirtiendo mucho. Pero una vez saltamos al césped, jugamos en serio", declara Fernando, que no podría haber descrito mejor el evento al decir que "¡Está siendo un espectáculo!".
Esta primera edición de la Copa de los Refugiados de Porto Alegre fue organizada por la asociación Antônio Vieira (ASAV) en colaboración con la agencia de innovación social Ponto, que contó con el apoyo de ACNUR, la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados, la Prefectura Municipal de Porto Alegre y de entidades y organizaciones de la sociedad civil. Además del torneo, se realizaron acciones de inclusión social, digital, ciudadana y laboral, así como una entrega de juguetes a niños refugiados.
Para Karin Wapechowski, coordinadora de ASAV, la celebración de la Copa de los Refugiados en Río Grande del Sur es importante por varios motivos, principalmente para fortalecer el vínculo entre migrantes y refugiados y la sociedad portoalegrense. "Este evento muestra a la sociedad que estas personas pueden contribuir a engrandecer las empresas y aportar valores a las comunidades en las que residen, puesto que traen un rico bagaje cultural", añadió.
El equipo Coletivo, del municipio Caxias do Sul, fue consagrado como el gran ganador de esta edición.. Integrado por inmigrantes senegaleses, este equipo se midió en la final con Colombia, a la que venció tras una emocionante ronda de penales. "Todos somos campeones", afirmó Papeassane Isarr, del equipo africano, al alzar el trofeo. La emoción de la multitud, totalmente entregada y que celebraba los tantos de todos los equipos, demostró que el espíritu de integración y solidaridad no se limitaba solo al terreno de juego.
La Copa de los Refugiados fue concebida en 2014 por Cáritas de la Arquidiócesis de San Pablo junto con el ACNUR y un grupo de refugiados. Actualmente, la Copa está dirigida por la ONG África do Coração (África del Corazón), liderada por el refugiado congoleño Jean Katumba, quien afirma que "el fútbol es una forma de conseguir que personas de culturas muy diferentes sean iguales". Jean considera que Brasil es un país acogedor, algo que reflejan las más de 70 nacionalidades diferentes de migrantes presentes. La Copa ya contaba con tres ediciones en San Pablo, y una cuarta tuvo lugar el 2 de abril.
El refugiado sirio y coordinador de la Copa Abdulbaset Jarour afirmó que, además de en San Pablo y Porto Alegre, ya están planeando la realización del torneo en el estado de Minas Gerais y en Río de Janeiro. Jean y Abdulbaset consideran un gran honor que la celebración del torneo haya tenido lugar el día del aniversario de Porto Alegre y, como reconocimiento, pidieron al alcalde, Nelson Marchezan, que entregara el trofeo al equipo vencedor.
El ACNUR reconoce con satisfacción la importancia de la Copa de los Refugiados como un ejemplo de protagonismo y afirmación de autonomía por parte de las personas refugiadas y espera que a partir de este evento surjan iniciativas similares que recalquen la importancia del deporte como método de integración.
Por Flávia Faria, de Porto Alegre