Nuevos funcionarios de la Comisión Nacional para los Refugiados capacitados para atender a refugiados
Nuevos funcionarios de la Comisión Nacional para los Refugiados capacitados para atender a refugiados
CARACAS, Venezuela, 23 de abril (ACNUR) – Nuevos miembros y personal regular de la Comisión Nacional para los Refugiados en Caracas, Zulia y Apure participaron en talleres de formación impartidos por el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, orientados a fortalecer sus conocimientos sobre los procedimientos y el marco legislativo que ampara a las personas en necesidad de protección internacional en Venezuela.
Durante la serie de talleres, los participantes adquirieron y reforzaron conocimientos sobre Derecho Internacional Humanitario y Derecho Internacional de Refugiados, así como sobre el mandato del ACNUR, procedimiento para la determinación de la condición de refugiado en el país, técnicas de entrevista y análisis de casos.
Estas capacitaciones, realizadas con el apoyo de HIAS y Cáritas de Venezuela, son de vital importancia para que las nuevas autoridades venezolanas que desempeñan funciones en pro de la defensa y protección de los derechos de los refugiados puedan agilizar las solicitudes de refugio que han sido recibidas y mejorar el tiempo de respuesta de los casos.
En los últimos dos años, el ACNUR ha capacitado cerca de 10 mil personas en Venezuela, muchas de ellas en funciones vinculadas con la protección a los refugiados. La mayoría de estas capacitaciones tiene lugar en los estados fronterizos de Zulia, Apure y Táchira, donde la agencia humanitaria ejerce la mayor parte de su labor, y por ser allí donde se encuentra la mayoria de las familias colombianas que han llegado huyendo de amenazas y persecución del otro lado de la frontera.
Venezuela: un país receptor
Se estima que cerca de 200 mil personas, han llegado a Venezuela en la última década buscando protección internacional. El 98 por ciento de ellas, mujeres y hombres colombianos que se han visto forzados a cruzar la frontera de su país para evitar la muerte o el reclutamiento forzado de sus hijos, a consecuencia del conflicto armado.
El ACNUR abrió una oficina en Venezuela a comienzos de los noventa para asistir a estas personas, muchas de las cuales permanecen en la franja fronteriza con Colombia.
Además de Colombia, el ACNUR ha registrado en sus oficinas refugiados procedentes de Liberia, Nigeria, Haiti, China, Mauritania, Iraq y Palestina.