Cerrar sites icon close
Search form

Buscar el sitio de un país

Perfil de país

Sitio de país

Más de la mitad de los indígenas venezolanos en Brasil han recibido el apoyo del ACNUR

Historias

Más de la mitad de los indígenas venezolanos en Brasil han recibido el apoyo del ACNUR

La vivienda y las donaciones de unidades de vivienda para aislar a los pacientes con COVID-19 ayudan a las poblaciones de refugiados y migrantes. ACNUR también apoya a FUNAI y a los indígenas brasileños.
21 Julio 2020
Indígenas Warao en Manaos participan en proyecto de radio comunitaria.

El monitoreo de la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) revela que, de los 5.000 indígenas venezolanos registrados en Brasil, alrededor de 2.300 personas se han beneficiado de kits de higiene, limpieza y cocina, entre otros artículos, en Roraima, Amazonas y Pará.

En las ciudades de Boa Vista y Pacaraima (RR), más de 1.400 indígenas se encuentran en albergues de la Operación de Acogida con el apoyo del ACNUR. En Belém y Manaos, en asociación con los gobiernos municipales, se alojan otros 776.

En total, más de la mitad de la población indígena venezolana en Brasil recibió alguna forma de ayuda del ACNUR. Los datos provienen del informe de junio sobre Actividades para las Poblaciones Indígenas, que incluye las diversas acciones que toma la agencia para garantizar los derechos y la atención de estas poblaciones.

En la capital de Pará, ACNUR brinda asistencia técnica a la ciudad en la planificación y adaptación del nuevo albergue indígena municipal para hasta 450 personas, asegurando que la población protegida tenga acceso a instalaciones adecuadas de agua, saneamiento y salud. En total, más de mil Warao están repartidos en los municipios de Pará.

Otra medida importante de la agencia fue la donación de tres Unidades de Vivienda para Refugiados al ayuntamiento de Santarém y ocho unidades más a la ciudad de Belém, en junio. En Santarém, las Unidades se están utilizando para expandir áreas de aislamiento y salas de salud durante la pandemia de COVID-19. En Belém, se utilizarán para ampliar los espacios de vida y enseñanza para la población indígena Warao.

Casos de COVID-19 entre pueblos indígenas: el informe sobre Actividades para poblaciones indígenas producido por ACNUR y llevado a cabo con la población indígena venezolana en el país indica que nueve personas murieron este año debido a complicaciones relacionadas con la nueva pandemia de coronavirus.

La encuesta revela que estas muertes, todas del grupo étnico Warao, se concentran en la región norte del país, donde vive la mayoría de los refugiados venezolanos e indígenas que buscaron protección y asistencia en Brasil. Seis muertes de indígenas venezolanos ocurrieron en el estado de Pará y otras tres en Amazonas, Pernambuco y Roraima.

ACNUR ha estado monitoreando la muerte de indígenas venezolanos en Brasil desde junio de 2017. De las 80 muertes registradas hasta ahora, más de un tercio están asociadas con enfermedades respiratorias, como la neumonía y la tuberculosis. Las causas desconocidas representan el 19% de los casos. Con respecto a las muertes registradas en 2020, la COVID-19 representa el 32% de los casos.

El informe también revela un aumento en el registro de indígenas venezolanos en Brasil por parte del ACNUR, lo que contribuyó a mejorar las acciones de protección de esta población. En junio, ACNUR registró a 5.020 indígenas venezolanos, un aumento del 10% respecto al mes anterior.

“La encuesta es el trabajo del ACNUR en colaboración con varios actores. La principal fuente de datos son los certificados de defunción emitidos por los departamentos de salud municipales”, explica Sebastián Roa, oficial de protección asociado del ACNUR. "Otras fuentes incluyen organizaciones que están en contacto directo con la población, como las Secretarías de Asistencia Social y la sociedad civil organizada".

Situación en Pará: con el fin de destacar las necesidades específicas de las poblaciones originarias de Venezuela sobre el desplazamiento forzado en Pará, ACNUR ha llevado a cabo desde finales de 2019 actividades de registro y monitoreo para refugiados Warao en espacios públicos y privados en los municipios de Belém, Ananindeua y Santarém. En un primer ejercicio realizado en diciembre del año pasado, más de 400 indígenas se registraron en ese momento.

Los resultados muestran que los pueblos indígenas del país vecino tienen el doble de necesidades de protección específicas que el promedio de refugiados y migrantes venezolanos registrados por el ACNUR. Entre estas necesidades identificadas, el 41% de ellas corresponden a niños en riesgo. El elevado número de niños sin escolarizar, el 39% de los registrados, contribuye a esta situación. Otras necesidades específicas identificadas incluyen el embarazo adolescente y el matrimonio infantil.

Otro desafío importante identificado por el estudio está relacionado con la protección legal y física, especialmente las dificultades para acceder a la documentación: son personas con documentación vencida, indocumentadas o con documentos con información incorrecta.

“Muchos indígenas venezolanos, mientras estaban en su país de origen, no tenían acceso a la documentación, cuando los Warao llegaron a Brasil, se dieron cuenta de la importancia de tener documentación para acceder a los servicios públicos y hemos estado trabajando para informarles cómo y dónde emitir sus documentos”, explicó Janaina Galvão, responsable de las actividades del ACNUR en el estado de Pará.

Si bien la falta de acceso a los ingresos es otro problema grave, el acceso efectivo a los beneficios de asistencia social sigue siendo limitado. Las razones para no recibir el beneficio entre esta población incluyen la falta de información, las barreras del idioma, la documentación caducada, el incumplimiento de uno de los criterios de elegibilidad (especialmente la permanencia de los niños en la escuela), las dificultades de los equipos técnicos para registrar a las personas refugiadas, traslado entre municipios, entre otros.

"En este contexto, ACNUR ha trabajado en asociación con la ciudad de Belém y otros socios de la red de protección local para garantizar que los servidores públicos estén familiarizados con la documentación de los solicitantes de asilo, así como con sus derechos y deberes para facilitar el acceso políticas públicas”, agrega Janaína. "También hemos apoyado la producción de material de información audiovisual compartido en el idioma Warao para facilitar el acceso de los pueblos indígenas a los programas de emergencia lanzados por el gobierno federal", explicó el jefe de la Unidad de Campo del ACNUR en Pará.

Donación a FUNAI: También se ha hecho mucho por los pueblos indígenas brasileños. En Boa Vista, treinta y cinco Unidades de Vivienda para Refugiados (RHU) fueron donadas a la Fundação Nacional do Índio (FUNAI).

Las unidades de vivienda se utilizarán para aislar a las personas indígenas yanomami confirmadas o sospechosas de COVID-19, tanto en ubicaciones estratégicas dentro de la tierra indígena yanomami como en ubicaciones urbanas donde viven estas poblaciones.

Otras 39 Unidades de Vivienda fueron donadas a FUNAI y se utilizarán en el municipio de Tabatinga, en Amazonas. El uso también estará dirigido al aislamiento de los indígenas brasileños.

"ACNUR trabaja en colaboración con las autoridades locales y socios en varios municipios de los estados de Pará, Amazonas y Roraima, sensibilizando, promocionando y fortaleciendo las capacidades relacionadas con la protección de los refugiados y migrantes", señaló José Egas, Representante del ACNUR en Brasil.

La agencia también brinda soporte técnico para la Operación de Acogida, la respuesta humanitaria del Gobierno Federal al flujo venezolano en la planificación, registro, vivienda e interiorización.

ACNUR agradece a todos sus donantes por las importantes contribuciones que nos permiten seguir trabajando para proporcionar dignidad, protección y seguridad a los refugiados y solicitantes de asilo en Brasil.

Estas acciones fueron realizadas por ACNUR en el marco de la Plataforma R4V - Respuesta a los venezolanos, una coordinación interinstitucional del sistema de las Naciones Unidas y la sociedad civil. La plataforma R4V está compuesta por un conjunto de socios y tiene como objetivo responder al flujo de venezolanos en América Latina y el Caribe. En Brasil, la Plataforma R4V está compuesta por 13 agencias de la ONU y 27 organizaciones de la sociedad civil.