OIM y ACNUR piden una acción regional a los países de la Unión Europea sobre las tragedias en el Mediterráneo

Con preocupación por la continua tragedia humana, por la cual casi 1.000 personas refugiadas e inmigrantes han perdido la vida en el Mediterráneo víctimas de los traficantes, ACNUR, la Agencia de la ONU para los Refugiados, y OIM, la Agencia de la ONU para las Migraciones, hacen hoy un llamamiento a los Estados de la Unión Europea para que tomen acciones regionales concertadas para reducir significativamente la innecesaria pérdida de vidas humanas en el mar.

ACNUR y OIM consideran que hace falta un nuevo enfoque colaborativo para que el desembarco de las personas recatadas en el mar sea más predecible y gestionable. Este enfoque debe construirse sobre la base de una colaboración continua entre la Unión Europea, la ONU y la Unión Africana. Las personas rescatadas en aguas internacionales deberían ser trasladadas rápidamente a la costa en ubicaciones seguras en la Unión Europea y, eventualmente, en otros lugares.

Este enfoque necesita complementarse con más cuotas de reasentamiento, más reunificación familiar y otras soluciones dentro de la Unión Europea, así como un mayor apoyo a los países donde desembarcan las personas.

“En los últimos 10 días hemos tenido buques en el mar Mediterráneo que transportaban refugiados y migrantes rescatados, y que no pudieron atracar debido al estancamiento político en Europa. Defender el derecho al asilo en los Estados miembros de la UE es absolutamente crucial”, dijo el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, Filippo Grandi. “Negar el rescate o pasar la responsabilidad del asilo a otro lugar es completamente inaceptable. Necesitamos que los países se unan y tracen un nuevo camino a seguir”.

“Nuestra prioridad es salvar las vidas de todos aquellos que han sido víctimas de traficantes que sin piedad ponen a hombres, mujeres y niños por igual, en balsas inseguras en alta mar”, dijo William Lacy Swing, Director General de la OIM. “En lo que va del año, casi 1.000 personas han perdido la vida debido a este cálculo cruel en el que el traficante siempre gana”.

Las llegadas de refugiados y migrantes alcanzaron su punto máximo en 2015, cuando más de un millón de personas desesperadas cruzaron el Mediterráneo hacia Europa y casi 5.000 murieron en el intento. Tres años después, las llegadas han vuelto a los niveles anteriores a 2014 y están cayendo hacia la media histórica a largo plazo. En lo que va del año, unas 42.000 personas han cruzado el Mediterráneo hacia Europa, en comparación con 85.000 que lo hicieron en el mismo período del año pasado.

OIM y ACNUR instan a los Estados europeos a aprovechar la oportunidad brindada por la Cumbre de la UE para encontrar un nuevo enfoque y de unidad a la situación de las llegadas por el Mediterráneo que responda a las necesidades compartidas de todos los países para gestionar sus fronteras, políticas migratorias y estándares internacionales de asilo desarrollados durante décadas. El apoyo, la solidaridad y la colaboración de los países europeos con los países de acogida de refugiados en las regiones en desarrollo, así como en los países de tránsito, son más necesarios que nunca.

OIM y ACNUR están a disposición para apoyar a los Estados en este esfuerzo.