Costa Rica: Video joven transmite mensaje sobre refugiados

SAN JOSÉ, Costa Rica, 12 de abril (ACNUR) – En la pantalla se muestra una casa vacía. Algunas de sus habitaciones aun son testimonio de lo que fue la persecución. Un graffiti en una pared, a la par de una foto de un niño traspasada por un cuchillo, narra el horror: "Los perros a la calle".

Estas imágenes son parte del audiovisual que resultó de "La Olla de Presión", una actividad del festival de video joven La 240 que se realiza en Costa Rica esta semana y que es auspiciada por ACNUR.

"El año pasado y este nos hemos concentrado en conocer qué opinión tenían los costarricenses sobre las personas refugiadas y cuáles eran los posibles catalizadores de la xenofobia", explicó Jozef Merkx, representante de la Agencia de la ONU para los Refugiados en Costa Rica.

El estudio hecho con la empresa Ipsos reveló que un 57% de la gente que sabía la definición correcta de refugiado, tenía una opinión desfavorable de las personas con ese estatuto. Otro de los hallazgos de esa investigación fue que la mayoría de las personas que pensaban así eran jóvenes entre los 18 y 35 años de edad.

"Fue en ese momento cuando decidimos centrar muchos de nuestros esfuerzos en combatir la xenofobia entre los jóvenes. Sabemos que esta población, además de que puede ser más abierta al cambio, es un agente multiplicador de ideas y, que es capaz, incluso, de cambiar el contexto en el vive", explicó Merkx.

Una ventana para los jóvenes. Desde el 2004, cada dos años un colectivo de jóvenes desarrolla un festival llamado La 240, que muestra algunas de las creaciones audiovisuales hechas por jóvenes centroamericanos. Este año el festival se lleva a cabo del 11 al 17 de abril.

El ACNUR, en busca de espacios para sensibilizar a jóvenes, se asoció con ese colectivo de muchachos organizadores, quienes para esta edición esperan a 5.000 asistentes.

"Me parece que es una gran idea sensibilizar a quienes asisten a La 240 porque muchos de ellos son productores audiovisuales, que se integrarán a los medios de comunicación y, por lo tanto, podrán dar un mensaje más integrador en los productos que realicen", apuntó Camilo Saldarriaga, refugiado colombiano de 18 años.

Entre las actividades del festival se encuentra 'La Olla de Presión'. En ella se reúne a siete jóvenes productores audiovisuales de Centroamérica para que en una sola semana escriban, produzcan y editen un documental. Este año el tema del producto fue la realidad de las personas refugiadas.

"Quisimos tocar el tema de la protección internacional desde un ángulo poco abordado, mucho más sutil. Fue cuando nos decidimos a hablar sobre el vacío --físico y emocional- – que deja una persona refugiada en su país de origen", explicó Alejandra Amaya, directora de la "Olla de Presión".

Para Sergio Pucci, director de fotografía de la producción, su primera tarea sería informarse a fondo: 'Yo sabía que los refugiados eran personas que no están en su hogar, pero confundía su definición con otros conceptos. Creo que eso debe ocurrirles a muchos jóvenes".

El corto de siete minutos, llamado 'Primera Plana', cuenta la ausencia que deja en su hogar una familia de un periodista perseguido, quien debe dejar su casa para salvar su vida y la de su familia.

El audiovisual se proyectó el pasado 11 de abril, día de la inauguración del festival. Este fue bien recibido por la nutrida audiencia que tuvo La 240 en el primero de siete días de actividades.

"Nadie escoge ser refugiado: es una realidad adversa. Como sociedad y como grupo humano, debemos entender esa experiencia para poder apoyar a las personas que la viven. Creo que ese es el gran aporte de 'La Olla de Presión', que muestra a los jóvenes esa realidad para muchos desconocida", concluyó Sergio Pacheco, coproductor del festival audiovisual.

El Acnur, además, creó una serie de tres 'spots' publicitarios dirigidos a jóvenes, que se difunden durante la proyección del festival. También tiene una exhibición de mensajes de personas refugiadas sobre sus experiencias de desarraigo y un 'stand' informativo.

En Costa Rica viven más de 12.000 personas refugiadas, la mayoría provenientes de Colombia. La mayor parte de esta población se ha asentado en zonas urbanas de las provincias metropolitanas del país.

La agencia de la ONU para los refugiados en ese país organiza una serie de actividades culturales y recreativas para combatir la xenofobia entre jóvenes para los próximos meses.

Por Andrea Vásquez, en San José, Costa Rica