El flujo de refugiados sirios continúa y lleva al límite la capacidad de acogida
El flujo de refugiados sirios continúa y lleva al límite la capacidad de acogida
GINEBRA, Suiza, 31 de agosto (ACNUR) – ACNUR está siendo testigo de un aumento en el número de refugiados sirios que llegan al valle de Bekaa, en el este del Líbano. Las organizaciones humanitarias y las autoridades locales calculan que unas 2.200 personas se han asentado en el este del país durante la semana pasada, cifra que prácticamente duplica el promedio de las últimas semanas.
En el norte del Líbano el ritmo de llegadas se mantiene en unas 400 personas por semana. ACNUR está ampliando el número de líneas telefónicas directas para ayudar al creciente número de refugiados que trata de registrarse. La tensa situación de seguridad en Trípoli la semana pasada hizo que muchos refugiados no pudieran acudir a su cita para el registro. El centro está ahora abierto y las operaciones han vuelto a la normalidad.
ACNUR también está siguiendo de cerca la situación de los refugiados en la zona fronteriza norteña de Akkar, que todavía se está viendo afectada por bombardeos desde el lado sirio de la frontera. Los bombardeos se han acercado a las aldeas de Al-Nura y Debbabiyeh, que acogen a más de 80 refugiados.
En todo el país, la necesidad de alojamiento sigue siendo una de nuestras principales preocupaciones, ya que muchos refugiados siguen viviendo en escuelas que deben abrirse en un par de semanas con el inicio del nuevo curso escolar. A principios de semana se desalojó a 20 familias de una escuela en Al-Marj, al oeste de Bekaa, aunque se les permitió ampliar su estancia tras la intervención de ACNUR, nuestras ONG socias y el Ministerio de Asuntos Sociales.
Seguimos buscando una alternativa de alojamiento para los refugiados que permanecen en las escuelas y tenemos abierta una línea telefónica para aquellos que están sufriendo presiones para abandonar los lugares donde están alojados. Hasta ahora, hemos recibido 20 informes de refugiados que han vivido esta situación de presión. Estamos siguiendo de cerca estos casos y pidiendo la comprensión de las autoridades escolares locales para evitar que desahucien a los sirios de los colegios.
La semana pasada presentamos a las autoridades una lista de 11 edificios abandonados que hemos propuesto reformar para poder alojar a los refugiados. Hasta ahora hemos recibido el permiso para usar tres de ellos y estamos esperando las aprobaciones necesarias para iniciar las reformas. Esperamos que el gobierno pueda dar curso a las autorizaciones pendientes.
En el norte, ya se han puesto en marcha los preparativos para reubicar a refugiados en una escuela privada abandonada en Tekrit. Nuestra estrategia de alojamiento en el Líbano comprende tanto la rehabilitación de edificios para acoger a sirios como la entrega de ayuda económica para los refugiados más vulnerables.