Cerrar sites icon close
Search form

Buscar el sitio de un país

Perfil de país

Sitio de país

Equipo de especialistas le devuelve la visión a desplazados en Azerbaiyán

Historias

Equipo de especialistas le devuelve la visión a desplazados en Azerbaiyán

Optometristas, liderados por el ganador del Premio Nansen, Akio Kanai, le devolvieron el regalo de la vista a miles de desplazados en Azerbaiyán.
26 Agosto 2016 Disponible también en:
Yalchin Aghayev, de 40 años, recibe un examen del optometrista, Akio Kanai, en el asentamiento para desplazados en Barda, Azerbaiyán.

Valida Aliyeva es amante de la lectura. A sus 64 años, ella explica: "He leído todos los libros de nuestra librería local".


Pero cuando perdió sus lentes hace cuatro años, el mundo de la abuela desplazada Azeri, quedó reducido a una borrosidad en la cual no podía ni leer ni ver rostros de cerca.

Después, en mayo, sucedió algo que le cambiaría la vida: un equipo de optometristas de Japón vino a la ciudad en el oeste de Azerbaiyán a realizar exámenes de vista y darles lentes a los residentes que lo necesitaban, Aliyeva estaba entre ellos.

"Planeo empezar a leer de nuevo tan pronto llegue a casa, pero primero, quiero ver a mis nietos de cerca"

Haciendo fila para la clínica para la vista en el complejo de apartamentos en el que vive con otras cientos de familias, recibe un par de lentes con marco morado que traen su vida de vuelva a enfoque.

"Estoy muy feliz", dice con alegría. "Planeo empezar a leer de nuevo tan pronto llegue a casa, pero primero, quiero ver a mis nietos de cerca".

Desde hace doce años, Akio Kanai, optometrista de Japón, ha estado viajando a Azerbaiyán con un equipo de especialistas para ayudar a desplazados azerís, más de un millón de personas que huyeron de sus hogares durante el conflicto sobre Nagorno Karabakh a finales de la década de 1980 y principios de los 90.

Valida Aliyeva, abuela azeri recibió un nuevo par de lentes en Barda, Azerbaijan.

Muchos viven en la pobreza y luchan con el acceso a salud y tratamientos apropiados. Muchas familias también viven en chozas y barrios en la zona rural de Azerbaiyán.

"Un par de lentes ayudará a las personas a tener calidad de vida, los puede ayudar a ser independientes, aprender más", dijo Kanai, ganador del prestigioso Premio Nansen. "De hecho, sin los lentes, no sé cómo puedes vivir tu vida".

Un equipo de ocho optometristas calificados de la compañía de Kanai, Fuji Optical Co.

Ltd, trabaja rápidamente durante el día, realizando cientos de exámenes de vista y distribuyendo lentes a los residentes del nuevo vecindario de la ciudad, que se completó el año pasado, que contrasta de gran manera con las zonas de granja de los alrededores.

Los japoneses del equipo se han convertido en pequeñas celebridades allí y son muy bien recibidos por la comunidad Azeri y las autoridades locales. Durante la visita de seis días, el equipo atendió a 2.882 personas y distribuyó 2.443 pares de lentes. Otros 141 pares se enviarán posteriormente desde Japón.

"Algunas personas te estrechan la mano, otros te besan. Veo todos los tipos de agradecimientos. Eso hace que todo lo valga"

"Durante el día, está muy ocupado", dijo Kanai con una risita, mientras que el personal del ACNUR trabaja para manejar a la multitud fuera de la clínica temporal. "Muchas personas nos dicen 'çox sa? ol', que significa gracias. Algunas personas te estrechan la mano. Veo todos los tipos de agradecimiento. Eso hace que todo lo valga".

Entre los beneficiados en la que fue una vez una clínica sobre el terreno está Yalchin Aghayev, un profesor que huyó de Nagorno Karabakh con su familia cuando tenía 17 años. Desde su niñez ha luchado con un problema no corregido en su vista.

"Soy profesor de historia y siempre veo mapas. Muchas veces apunto el lugar incorrecto y no puedo ver claramente a mis estudiantes", explica en la clínica, donde el equipo especialista examina su ojo y le prescribe lentes. "Pensé que la vida tenía que ser así. Que el mundo era borroso todo el tiempo y que esto era lo que era la vista".

Mientras ajusten sus lentes, cae un alivio en la cara de Aghayev. "Antes de usar lentes, la vida parecía oscura, como si fuera noche todo el día. Si no hubiera conocido al Dr. Kanai, hubiera permanecido en la oscuridad. Después de usar estos lentes, mi visión mejoró y toda mi vida se volvió clara".

Kanai fue honrado con el Premio Nansen para los Refugiados del 2006, premio que se da anualmente por al ACNUR a individuos, un grupo u organización en reconocimiento por el servicio destacable a la causa de los refugiados, desplazados o apátridas.

Kanai, quien también es desplazado interno de la Isla del Pacífico de Sakhalin durante la turbulenta confusión del final de la Segunda Guerra Mundial, Kanai se ha comprometido desde 1983 a trabajar con personas desplazadas por los conflictos. Se estima que más de 140.000refugiados y desplazados internos han mejorado su vista gracias a sus esfuerzos.

"Ganar el premio me inspiró y me impulsó a continuar con el servicio"

"Ganar el premio me inspiró y me impulsó a continuar con el servicio. Ahora tengo 74 años, pero siento que aún tengo energía y es bueno para mí trabajar con estas personas. Así que el premio me dio ese poder para continuar".

Y su legado continuará, ya que sus hijos han seguido sus pasos, convirtiéndose en optometristas calificados y uniéndose a la misión anual del doctor. Kanai refleja su espíritu se ganador de premio Nansen: coraje, determinación y compromiso con el mejoramiento de las vidas de los desplazados por la guerra y el conflicto.

El ganador del Premio Nansen se anunciará el 6 de setiembre, con una ceremonia el día 3 de octubre en el Bâtiment des Forces Motrices en Ginebra.

Por Kathryn Porteous en Barda, Azerbaijan