Equipo del ACNUR encuentra condiciones de vida extremas en Homs

GINEBRA, 30 de noviembre (ACNUR) – Un equipo de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, que ha visitado Homs esta semana, informa de que miles de personas desplazadas viven en condiciones extremas en esta ciudad golpeada por el conflicto sirio.

Según informó el equipo del ACNUR que tomó parte en una misión de dos días que finalizó a última hora del jueves, numerosas personas viven en refugios comunales sin calefacción. Además, la mitad de los hospitales de la ciudad no están en condiciones de funcionamiento y hay una gran escasez de artículos básicos, como medicamentos, mantas, ropa de invierno y zapatos de niño.

El equipo, encabezado por Tarik Kurdi, representante del ACNUR en Siria, informó también de que la Media Luna Roja Árabe Siria, organización asociada, había registrado a 250.000 personas desplazadas en la ciudad y sus alrededores.

Melissa Fleming, portavoz del ACNUR, explicó el viernes a los periodistas en Ginebra que, durante su misión, el equipo había hablado con sus homólogos de la Media Luna Roja Árabe y había informado a los funcionarios locales de las operaciones del ACNUR en esta zona, incluido el suministro de ayuda no alimentaria. Formaba parte del equipo el coordinador del ACNUR para los refugios en Siria, quien examinó la posibilidad de emprender una campaña de rehabilitación de los refugios.

El ACNUR, que tiene más de 350 personas destacadas en cinco localidades de Siria, ha estado presente en Homs desde mediados de noviembre, aunque presta asistencia en esta ciudad desde el mes de junio a través de la Media Luna Roja Árabe. El equipo visitó dos edificios comunales, uno que acoge a 70 familias (400 personas) y otro que acoge a más de 400 familias, el mayor refugio de Homs.

"Se han creado redes locales de solidaridad muy bien organizadas y están prestando asistencia a los residentes locales, pero las necesidades son acuciantes," dijo Melissa Fleming. "Muchos niños no han asistido a la escuela en los últimos 18 meses. Algunos hospitales de la ciudad se han convertido en refugios comunales y el 60% de los médicos de Homs han abandonado la ciudad con otros profesionales sanitarios. Hay una grave escasez de medicamentos y equipos médicos," añadió.

Ante la llegada del invierno, el ACNUR ha suministrado revestimientos de plástico para suplir la falta de puertas y ventanas en los centros colectivos y para dividir las salas. Ninguno de los edificios tiene calefacción y escasean las mantas, la ropa de invierno y los zapatos de niño.

Durante la misión llegaron a Homs nueve camiones del ACNUR que transportaban ayuda de emergencia para el invierno consistente en 6.000 edredones, 12.000 sacos de dormir, 13.000 mantas, 1.000 colchones y 6.000 cajas de compresas. Está prevista para los próximos días la llegada de un nuevo cargamento de socorro, con lo que la asistencia cubrirá aproximadamente a un total de 15.000 personas.

"Para responder a las necesidades de cara al invierno distribuiremos más mantas de abrigo, edredones y colchones. También estamos buscando nuevos asociados humanitarios para ampliar nuestra red local de distribución," dijo Melissa Fleming.

La portavoz añadió que el ACNUR sigue haciendo todo cuanto está en su mano para ayudar a los sirios que han huido a los países vecinos. "En el Líbano estamos trabajando con un comité interministerial constituido recientemente para coordinar mejor las medidas adoptadas para ayudar a los refugiados sirios y a las comunidades libanesas afectadas," explicó.

La pasada semana, el ACNUR registró a unos 7.000 refugiados en Beirut, en el norte del Líbano, en el valle de Bekaa y al sur del Líbano, con lo que el total de personas que reciben asistencia del ACNUR y de las organizaciones asociadas en el país se eleva a 133.349.

"Los preparativos para el invierno siguen siendo prioritarios," dijo Melissa Fleming. Hasta el mes de noviembre, el ACNUR, el Programa Mundial de Alimentos y otros asociados han distribuido vales de alimentos, mantas, colchones, alfombras, estufas y, más recientemente, vales de combustible a unos 50.000 refugiados.

También continúan los trabajos de renovación de edificios y refugios colectivos para alojar a los refugiados, y se ha entregado dinero a estos para pagar el alquiler. Prosigue asimismo el suministro de colchones, mantas y utensilios domésticos. Todos ellos viven en pueblos y ciudades del Líbano, no en campamentos de refugiados.

Sigue habiendo refugiados sirios que llegan a Jordania y cuentan a los representantes del ACNUR que han sido atacados cuando se dirigían a la frontera. "El ACNUR insta a todas las partes que dejen libre el paso a los civiles" subrayó Meilissa Fleming. Entre los motivos por los que los refugiados han huido de su país cabe mencionar la violencia generalizada, amenazas contra personas concretas y sus familias y la carencia de servicios básicos. Los hospitales jordanos acogen a refugiados heridos todos los días.

Este peligroso viaje es especialmente duro para las mujeres y los niños, los cuales, según informa el personal del ACNUR, a menudo se encuentran visiblemente traumatizados. Hay mujeres que realizan el viaje cuando aún se están recuperando del parto. El pasado jueves, una mujer siria pasó a Jordania con un bebé de 12 días. "Muchas familias cuentan que sedan a sus hijos durante el viaje para que estén tranquilos," señaló la portavoz del ACNUR.

También en Jordania, el ACNUR ha tenido conocimiento a través de los medios de comunicación de casos de niñas sirias refugiadas menores de edad que han contraído matrimonio. La Oficina del Alto Comisario para los Refugiados colabora con sus asociados para sensibilizar a las familias de refugiados, los líderes religiosos y otros grupos acerca de este problema. La legislación jordana prohíbe contraer matrimonio a los menores de 18 años. Varios organismos están realizando un estudio para determinar el alcance del problema y buscar soluciones de cara al futuro.

El número de refugiados sirios registrados o pendientes de registro en toda la región asciende a más de 465.000. Las autoridades estiman que hay varios miles de sirios más en la región que no han acudido todavía a registrarse para solicitar asistencia.

Gracias a la voluntaria de UNV Online Luisa Merchán por el apoyo ofrecido con la traducción del inglés de este texto.