Italia da sepultura digna a refugiados víctimas de naufragio
Italia da sepultura digna a refugiados víctimas de naufragio
CATANIA, Italia, 10 de julio de 2015 (ACNUR) – Seis víctimas de un naufragio en el que se estima que 800 refugiados y migrantes se ahogaron en el Mediterráneo fueron enterradas el lunes 9 de julio en Italia casi tres meses después de su muerte. Los cuerpos fueron recuperados por la Marina italiana de los restos del naufragio, a casi 380 metros por debajo del nivel del mar.
Los seis ataúdes de madera fueron colocados en tumbas en el cementerio municipal de Catania, la segunda ciudad más grande de Sicilia. Cada uno fue marcado con un número para identificar a las víctimas del naufragio del 18 de julio, cuando un barco abarrotado de refugiados y migrantes se hundió en el Mediterráneo.
El cuerpo de una mujer, recuperado inmediatamente después del desastre, fue enterrado junto con los restos de cinco personas que fueron recuperados del mar por la Marina italiana entre el 29 de junio y el 1 de julio. A fecha de 10 de julio, el número total de cuerpos recuperados del fondo del mar ascendía a 13.
Los ataúdes fueron depositados por trabajadores de la municipalidad. La mayoría de ellos iba vestida con camisas azules y algunos llevaban una cadena de oro con una cruz. Mientras ellos trabajaban bajo el caluroso sol de mediodía, una excavadora preparaba el terreno para otros siete ataúdes que llegarán el viernes.
Un ramo de flores fue lanzado sobre cada uno de los ataúdes a medida que los iban bajando. No hubo ningún servicio funerario.
El primer ministro italiano, Matteo Renzi, ya había expresado previamente su deseo de que los cuerpos de las víctimas fuesen devueltos a sus familiares, aunque la profundidad del naufragio y las dificultades en la identificación de los restos lo hacen casi imposible.
A los que iban a ser enterrados en Catania se les ha dado sepultura entre mausoleos y tumbas bien cuidadas, cerca de las de un grupo de personas que se ahogó en 2013. Casi 600 personas murieron en dos incidentes distintos en octubre de 2013, lo cual provocó reacciones de alarma entre los líderes europeos.
Sin embargo, fue el naufragio de abril de 2015, el peor incidente ocurrido en décadas, lo que llevó a la Unión Europea a triplicar los fondos de las operaciones Tritón y Poseidón de Frontex. Los incrementos para las misiones de búsqueda y rescate han tenido como resultado una drástica reducción del número de muertes. Entre enero y abril de 2015, casi 1.800 refugiados y migrantes se ahogaron o desaparecieron en el Mediterráneo. Entre mayo y junio, la cifra cayó hasta 80.
No obstante, el número de refugiados y migrantes que se ha embarcado en el peligroso viaje a través del Mediterráneo hacia Europa ha incrementado. De hecho, 137.000 personas han llegado durante los primeros meses de 2015, en comparación con las 75.000 que llegaron durante el mismo periodo el año pasado.
La mayoría de los que toman la ruta del Mediterráneo para llegar a Europa son personas que huyen de la guerra, del conflicto y de la persecución. Un tercio de las personas que llegan en barco a Italia o a Grecia son sirios que escapan del conflicto actual, que ha tenido como consecuencia que más de cuatro millones de personas abandonen su país de origen. Los datos de ACNUR muestran que los otros dos grupos más numerosos provienen de Afganistán y de Eritrea.
Gracias a la Voluntaria en Línea Ana Ledesma Claros por el apoyo ofrecido con la traducción del inglés de este texto.