La falta de fondos amenaza la respuesta para los refugiados en el Líbano
La falta de fondos amenaza la respuesta para los refugiados en el Líbano
BEIRUT, Líbano, 10 de abril (ACNUR) – La Agencia de la ONU para los Refugiados y sus socios de Naciones y Unidas y las ONGs han alertado de que los programas básicos y la asistencia humanitaria para los refugiados sirios en el Líbano se están interrumpiendo por la falta de fondos.
"Los planes están diseñados, el personal está listo, pero los fondos se están agotando" aseguraba Ninette Kelley, Representante de ACNUR en el Líbano, añadiendo que ACNUR y sus socios se estaban viendo obligados a tomar decisiones para escoger entre programas indispensables. "Con este nivel de financiación, programas vitales para asegurar el alimento, el agua potable, la escolarización de niños, la salud y el cobijo para los refugiados recién llegados son sencillamente imposibles de cubrir" subrayó.
Hay más de 400.000 refugiados sirios en el Líbano, un país con una población de 4 millones de personas. Y el flujo continua con unas 3.000 personas registradas cada día. En el último llamamiento de fondos interagencial se estimaba que se alcanzaría una población de refugiados de 300.000 personas para mediados de junio – ya superada en 100.000. Sólo se ha cubierto un tercio del llamamiento.
"En un mes, y con la financiación actual, más de 400.000 refugiados sirios en el Líbano no podrán recibir asistencia alimentaria", afirmó Etienne Labande, jefe de la operación en el Líbano del Programa Mundial de Alimentos (PMA), en una rueda de prensa conjunta de ACNUR, UNICEF y el PMA. "Estoy profundamente preocupado porque sin una financiación continua, veremos más tensiones y más desplazamiento en un clima que ya de por sí es tenso".
El número de refugiados sirios que no pueden pagar sus alquileres mensuales está aumentando y másfamilias se están viendo en riesgo de ser desahuciadas. Hasta ahora las agencias han impermeabilizado 700 viviendas y rehabilitado más de 100 refugios colectivos.
Miles de refugiados también se han beneficiado de los trabajos de rehabilitación de casas de la comunidad de acogida, y otros 44 edificios han sido identificados para ser reparados. Pero esto no se puede hacer dada la escasez de fondos.
El riesgo de masificación en los refugios existentes es muy real y esto también está causando tensiones con la comunidad de acogida. La falta de servicios y apoyo a los refugiados y a la comunidad de acogida es otra preocupación.
"La atención sanitaria abarca una parte significativa del presupuesto. Las intervenciones sanitarias secundarias tendrán que ser reducidas en un 85%" afirmaba el comunicado de prensa de esta semana.
"Actualmente más de 110.000 refugiados se benefician de apoyo sanitario mensualmente, y otros 3.000 reciben atención sanitaria secundaria".
El riesgo de contraer diarreas, hepatitis A y problemas dermatológicos también podrían aumentar si no se invierte en mejorar los programas de agua y saneamiento. "Con el verano acercándose, recibir los fondos para comenzar estos proyectos el mes que viene es vital" anunciaba el comunicado.
En el frente de la educación, unos 30.000 niños sirios han sido registrados en escuelas públicas libanesas y reciben asistencia con becas escolares. Muchos adolescentes necesitan más apoyo, como clases de refuerzo que les ayuden a adaptarse o ponerse al día y seguir acudiendo a la escuela.
"Los niños afectados por esta crisis, que constituyen más de la mitad de la población de refugiados, se están enfrentando a retos que corren el riesgo de marcar un tremendo impacto a la larga en sus vidas", alertó la oficial de UNICEF Annamaria Laurini. "Si no se reciben fondos adicionales significativos pronto, UNICEF no podrá responder a las necesidades crecientes de estas víctimas, las más vulnerables, de esta tragedia".