"Niños de Paz": Inician Guatemala y México programa para niñez no acompañada
"Niños de Paz": Inician Guatemala y México programa para niñez no acompañada
CIUDAD DE GUATEMALA Y CIUDAD DE MÉXICO, 2 de febrero de 2015 (ACNUR) – La oficina regional del ACNUR para América Central, Cuba y México y la oficina en México de la Agencia de la ONU para Refugiados (ACNUR) presentaron en las capitales de Guatemala y México, el Proyecto "Niños de Paz", iniciativa de la Dirección de Ayuda Humanitaria y protección Civil – ECHO, que promoverá la protección de la niñez no acompañada centroamericana a través de actividades educativas, recreativas y lúdicas.
Actualmente, la violencia y persecución, ejercida principalmente por actores criminales no tradicionales y no estatales (maras y pandillas) afectan de manera desproporcionada a niños, niñas y adolescentes en los países de la región denominada Triángulo Norte de Centroamérica (Honduras, El Salvador y Guatemala), forzándolos a abandonar sus países, solos o en compañía de familiares hacia México y Estados Unidos.
Según el estudio Arrancados de Raíz, realizado por ACNUR en la frontera sur de México, con financiamiento de ECHO, un 48.6% de los niños, niñas y adolescentes no acompañados entrevistados habrían salido de sus países a causa de la violencia y la persecución, pudiendo requerir protección como refugiados. Además, algunas de las niñas y niños habrían sobrevivido abusos y violencia al interior de sus hogares. La cifra de niños y niñas centroamericanos con una potencial necesidad de protección internacional se triplicó desde 2006, cuando el ACNUR llevó a cabo un estudio similar con niños y niñas no acompañados o separados en la frontera sur de México, donde entonces sólo un 13% podría haber requerido protección internacional.
Sumado a las terribles situaciones vividas por los niños, niñas y adolescentes en sus países de origen, las traumáticas experiencias durante la huida y la ansiedad generada por la detención migratoria por su ingreso irregular afectan significativamente la estabilidad de los niños y niñas. Las actividades educativas, lúdicas y recreativas contribuyen a recuperar un sentido de normalidad y mejorar su bienestar.
"Los niños, niñas y adolescentes son expuestos de una manera sistemática a los efectos de la violencia que provoca el accionar de las maras. Lo sufren tanto en su país como a lo largo de la ruta migratoria" dijo el Representante Regional del ACNUR para América Central, Cuba y México, Fernando Protti Alvarado durante el evento de presentación en Guatemala.
Los menores no acompañados o separados que huyen de sus países ven truncado su proceso educativo ante la necesidad de proteger sus vidas. Durante su huida, tienen acceso limitado o nulo a programas educativos, de salud y servicios psicosociales que son primordiales para su desarrollo; servicios que también son limitados en los albergues y centros de detención migratoria a lo largo de la ruta.
"Una forma de ayudarlos es de tratar de fortalecer a las instituciones gubernamentales de los países de tránsito como Guatemala y México para que puedan darle mejor atención a esos niños incluyendo mejores condiciones, capacitación al personal de los centros, actividades recreativas y establecer mecanismos que permitan identificar a los niños con necesidades de protección" comentó el Sr. Protti Alvarado.
La educación es un derecho fundamental de todos los niños, niñas y adolescentes. Una de las contribuciones del proyecto, a decir de Hamdi Bukhari, Representante del ACNUR en México, es que permite "situar la situación de las niñas y niños no acompañados como un tema humanitario y de derechos humanos, más allá de que sea visto como un aspecto meramente migratorio y de control fronterizo".
Niños de Paz se enfoca en la protección de los menores que se encuentran en albergues y/o centros de detención migratoria en ambos países a través de actividades educativas y recreacionales, el fortalecimiento de las capacidades de autoridades e instituciones claves y de la sociedad civil, en mejorar la infraestructura de los centros y albergues y establecer mecanismos de identificación de los menores con necesidades educativas y de protección. El proyecto se ejecutará en los departamentos de Guatemala, San Marcos y Petén en Guatemala, y en Ixtepec, Tenosique y Tapachula, al sur de México.
Por Angela Flórez desde Ciudad de Guatemala y Mariana Echandi desde Ciudad de México.