Pakistán: refugiados afganos retornan a su país
Pakistán: refugiados afganos retornan a su país
PESHAWAR, Pakistán, 23 de abril (ACNUR) – Tras haber pasado toda su vida en el exilio, Romal, de veintitrés años, apenas puede contener la emoción ante la posibilidad de poder empezar de nuevo en su verdadera patria, Afganistán.
Impaciente, sube al autobús que se dirige hacia la frontera de Pakistán y Afganistán, uniéndose los 22.000 afganos que han optado por volver a sus hogares en Afganistán desde que se reinició el programa de repatriación hace un mes, tras la suspensión del programa durante el invierno.
"Mi tío regresó hace dos años a Kabul y ahora me ha pedido que le ayude en su negocio", comenta aún en el centro de repatriación voluntaria de ACNUR. "Trabajaré en su pequeño restaurante de Kabul".
Los padres de Romal huyeron de Afganistán antes de que naciera y se asentaron en las cercanías de Peshawar, donde el joven ha estado trabajando recientemente en una tienda de alimentación para ayudar a mantener a su familia.
Ha estado de visita en Afganistán en varias ocasiones, pero "esta vez el sentimiento es diferente", dice con una amplia sonrisa mientras lucha por asegurarse un sitio para él, sus padres, dos hermanos y una hermana en el colorido autobús repleto de colchones, ollas, televisores y frigoríficos.
A pesar de estar deseoso de volver a casa, confiesa que siente una pizca de nostalgia al dejar atrás la vida que se ha construido en el exilio: "Ya extraño a mis amigos de Pakistán y los he invitado a visitarme en Kabul".
Mientras que Romal se siente atraído hacia su hogar por el sentimiento de oportunidad, otros refugiados que pasan por los centros de repatriación voluntaria de ACNUR en Pashawar, Baleli o Balochistán en las últimas semanas mencionan el elevado coste de vida, la escasez de empleo y la difícil situación de seguridad en Pakistán como razones clave para regresar.
Musa Khan, de cincuenta años, ha vivido durante casi treinta años en Pakistán. Durante los últimos meses ha vivido en la ciudad de Taxila, en Punjabi, donde a duras penas ha logrado ganarse la vida como jornalero. Ahora, dice, ya es hora de volver a casa.
"Las cosas son cada día más caras. Todos los días voy al mercado pero no encuentro trabajo. Ya no puedo pagar el alquiler", dice al tiempo que reúne a su esposa, sus dos hijos y tres hijas para seguir los procedimientos para darse de baja en el registro en el centro de repatriación voluntaria Chamkani de Peshawar.
Sus penurias económicas se han visto agravadas por la difícil situación de seguridad, dice. "A veces la policía de Pakistán nos detiene (a los afganos) cuando vamos a trabajar y nos hacen muchas preguntas. Una vez metieron a mi hermano en una celda aunque luego lo dejaron en libertad".
Musa se dirige a su antigua aldea en la provincia de Nangarhar, en el este de Afganistán, donde posee un pequeño terreno en su aldea. "Planeo vender una pequeña parcela y usar ese dinero para construir una casa de dos habitaciones", dice. "Mis dos hijos también me ayudarán a reconstruir la casa".
Cualesquiera que sean las razones que conducen a los afganos a volver, necesitarán toda la fuerza que han demostrado tener mientras vivieron como refugiados, para poder reconstruir sus vidas al regresar, dice Mengesha Kebede, representante de ACNUR en Pakistán.
"Afganistán ha absorbido una quinta parte de su población con el regreso de los refugiados durante los últimos nueve años y muchos se enfrentan a la escasez de casas, trabajo, escuelas, clínicas, así como a problemas de seguridad.", comentó.
"Para tratar de garantizar que su regreso sea sostenible, los refugiados necesitarán el apoyo de su gobierno y de los donantes internacionales, para así tener la oportunidad de reintegrarse", añade Kebede.
Cada afgano que regresa con la asistencia de ACNUR recibe una ayuda económica de aproximadamente 100 dólares, dependiendo de la distancia hasta su región de origen. La ayuda se distribuye a los refugiados que regresan en uno de los cuatro centros de cobro de ACNUR en Afganistán.
El programa de repatriación voluntaria a Afganistán de ACNUR, que ya alcanza su noveno año, es la mayor operación de retorno de la Agencia a nivel mundial. Desde que se inició en el año 2002, más de 3,5 millones de afganos han vuelto a sus hogares desde Pakistán y 865.000 desde Irán gracias a la ayuda de ACNUR.
Alrededor de 1,7 millones de afganos registrados aún permanecen en Pakistán. El mes pasado, el Gobierno de Pakistán accedió a ampliar la estancia temporal de los refugiados en el país hasta finales de 2012.
Por Rabia Ali, en Peshawar, Pakistan