Surge un nuevo campamento para los desplazados en el Kurdistán iraquí

GARMAWA, Irak, 26 de junio de 2014 (ACNUR) – Hace una semana, tan solo 50 familias iraquíes poblaban el campamento de Garmawa; hoy en día se ha convertido en el hogar de 173 familias, lo que corresponde a más de mil civiles desplazados. A medida que las condiciones de vida mejoran, cada día el campamento acoge a cada vez más personas.

Aunque resulta difícil obtener cifras exactas, algunas fuentes del Gobierno aseguran que al menos 300.000 personas se encuentran asentados de forma temporal en la región del Kurdistán iraquí. Dichos desplazados no solo provienen de Mosul, la segunda ciudad más grande de Irak, sino de otras comunidades.

Saleh, su esposa y sus ocho hijos huyeron de la ciudad de Tal Afar, a 50km de Mosul: "Huí inmediatamente después de que empezaran los combates", cuenta desde su hogar provisional, una carpa de ACNUR en el campamento de desplazados internos de Garmawa.

El Gobierno regional de Kurdistán abrió el campamento de Garmawa hace casi dos semanas, cuando quedó claro que muchos de aquellos que huían del conflicto se estaban dirigiendo hacia esta región relativamente pacífica, en el norte del país.

Durante esas dos semanas, el campamento ha experimentado grandes cambios. Lo que era una finca deshabitada a principios de mes ahora acoge 1.100 carpas de ACNUR entre las que la Agencia ha distribuido colchones y mantas. El asentamiento dispone de red eléctrica y agua corriente, letrinas y zonas de aseo. La mejora más reciente es la apertura de un pequeño centro de atención primaria financiado por el Gobierno y dotado de dos médicos, un farmacéutico y un enfermero.

La nueva oleada de desplazamiento interno en Irak se extiende por todo el país, pero la mayoría de los desplazados se concentra en la región de Kurdistán.

Con un campamento no es suficiente por lo que el Gobierno regional, junto con sus socios humanitarios, planea construir más. Un centro que alojará a 2.500 desplazados está empezando a tomar forma en donde antiguamente había un campo de trigo en Khazair, al sur de Erbil. Asimismo, otros tres se encuentran en fase de construcción o planificación.

"Estamos estrechamente involucrados en la coordinación de las actividades y en la respuesta operativa a esta crisis", declara Andrei Kazakov, Coordinador de las operaciones de ACNUR en el terreno. "ACNUR está actuando en tres sectores principales de ayuda humanitaria, ofreciendo protección, alojamiento y artículos de primera necesidad a los desplazados".

Los equipos de protección de ACNUR están recorriendo la región, reuniéndose con más de 6.600 familias, para recabar información sobre dónde se están asentando los desplazados y cuáles son sus necesidades más urgentes. De esta forma, la información obtenida también se comparte con otras organizaciones humanitarias para que la respuesta en su conjunto sea rápida, eficiente y de gran impacto.

Pero Saleh y muchos otros tendrán que quedarse por un tiempo: "No pienso regresar con mi familia a casa antes de que sea completamente seguro", explica en Garmawa, donde los desplazados cuentan al menos con un refugio, alimentos, agua y seguridad. Para los padres como Saleh, preocupados por sus seres queridos, estas son condiciones indispensables.

Por Husma Eldin Mustafa y Rasheed Hussein en Garmawa, Irak

Gracias a la Voluntaria en Línea Esperanza Pombo por el apoyo ofrecido con la traducción del inglés de este texto.