Un refugiado con dificultades de aprendizaje encuentra su nuevo camino en el patinaje
Un refugiado con dificultades de aprendizaje encuentra su nuevo camino en el patinaje
El atleta refugiado Mina Bahgat está probando nerviosamente un nuevo par de patines. Sentado en un banco al lado de la pista, juguetea con la correa de su casco y se ajusta las rodilleras, preocupado por una caída.
Su madre, Maria, se agacha para ajustar sus patines. “Tú puedes hacerlo”, le dice ella, dándole una palmadita en la rodilla. Afianzado, patina hasta el centro de la pista, donde comenzará la sesión de práctica.
Mina, de 26 años, y ganador de dos medallas de bronce en un evento de patinaje en los Juegos Olímpicos Especiales de Invierno de 2017 en Austria, tiene una dificultad de aprendizaje que resultó de una lesión en su nacimiento.
Todos los jueves en Almere, a 30 minutos de Ámsterdam, se reúne con jóvenes locales, algunos con discapacidades, para una tarde llena de deporte, amistad y actividades.
Antes de llegar a Países Bajos en 2009, la vida para Mina, su madre y su hermano, Michael, no era fácil en el Medio Oriente. La familia cristiana vivía en constante temor por la violencia religiosa, y en la escuela, Mina era objeto de acoso por ser diferente.
“En un punto, todo estaba muy mal”, dice Maria. “Los maestros se burlaban de él, lo golpeaban. Y alentaban a otros estudiantes a acosarlos”. La situación estaba tan mal que Mina se rehusó a salir de su casa por 19 años.
En Almere, Mina encontró una cálida acogida en la organización sin fines de lucro SuperCOOL!, la cual brinda una oportunidad a jóvenes con discapacidades intelectuales y de desarrollo para que lleven vidas tan plenas como les sea posible.
SuperCOOL! Promueve la inclusión social a través del deporte, donde los jugadores con y sin discapacidades intelectuales participan en equipos mixtos. A través de esta organización, Mina descubrió su amor por el patinaje.
Los jóvenes son apoyados por un grupo de 30 voluntarios, compuesto por miembros de la comunidad local, refugiados y solicitantes de asilo.
Amin, un solicitante de asilo de Irán, es voluntario con SuperCOOL!. Desde que llegó a Países Bajos en 2015, él ha estado esperando tener la resolución de su solicitud de asilo. Entretanto, no puede trabajar o asistir a la escuela. La organización le ha dado un camino hacia la inclusión social.
“Es hermoso ver a personas con y sin discapacidades entrenar juntas”.
“Ser voluntario con SuperCOOL! era para mí la única forma de conocer personas, aprender neerlandés e integrarme a la sociedad local. Es una forma de retribuirle a la comunidad que me ha acogido”, le dice en neerlandés a sus compañeros voluntarios, que traducen al inglés.
Otros refugiados voluntarios son de Siria y Afganistán.
“Es hermoso ver a personas con y sin discapacidades, refugiadas y locales entrenar juntas”, dice Anton Spaan, fundador de SuperCOOL!. “A través del deporte, ellos olvidan sus diferencias. Los hemos visto pasar de ser introvertidos y dependientes, a ahora, que tienen la confianza necesaria para vivir sus propias vidas, sin barreras, como un equipo”.
Maria concuerda. “Antes de venir acá, Mina dependía completamente de mí. Como estuvo tanto tiempo en casa, tenía sobrepeso y muy poco control de sus funciones motoras”.
Cuando se le preguntó acerca de la transformación de su hijo, María dice: “Comenzó a patinar alrededor de la mesa de la sala de estar en casa. Su voluntad y determinación es algo que no había visto antes. Su transformación también ha transformado a la familia”.
Mina agrega con una sonrisa: “¡Los jueves son lo mejor de mi semana! Me reúno con mis amigos y hago muchos deportes diferentes”.
“Cuando escuché los aplausos... pensé: 'pertenezco'”.
Esta semana, el grupo de 20 atletas está practicando patinaje de velocidad en línea, el deporte en el que Mina ganó sus medallas en 2017 cuando formó parte de un equipo de atletas de SuperCOOL! que calificaron para los juegos de invierno de Olimpiadas Especiales.
Las Olimpiadas Especiales son la organización deportiva más grande del mundo para niños y adultos con discapacidades intelectuales. La organización es reconocida por el Comité Olímpico Internacional. Sin embargo, a diferencia de los Juegos Paralímpicos, las Olimpiadas Especiales no se llevan a cabo conjuntamente con los Juegos Olímpicos.
“Las Olimpiadas Especiales me dieron un nuevo hogar”, dijo Mina. “Cuando escuché los aplausos en el estadio, pensé: 'La gente me quiere aquí. Pertenezco'”.
“¡Ahora, mi sueño es competir en los Juegos Olímpicos!”
Cada año, el 3 de diciembre de 2017, en el Día Internacional de las Personas con Discapacidad, ACNUR, la Agencia de la ONU para los Refugiados, conmemora los logros y las contribuciones de las personas con discapacidad en todo el mundo.
Entre los 68,5 millones de personas desplazadas en todo el mundo, 7,7 millones viven con una discapacidad, y cerca de medio millón viven con discapacidad intelectual.
“Las personas con discapacidad pueden ser poderosos agentes de cambio y pueden ayudar a fomentar sociedades más abiertas e inclusivas en las que se celebra y acoge la diversidad”, dijo Filippo Grandi, Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados, en un mensaje.
En la Cumbre Global de Discapacidad en Londres en julio de 2018, el Alto Comisionado Auxiliar de ACNUR para la protección, Volker Türk, comprometió al ACNUR a pasos específicos para combatir el estigma y la discriminación, así como para involucrar y consultar mejor a las personas con discapacidad cuando se planeen operaciones y actividades.
“Garantizar la protección y el bienestar de las personas con discapacidad de una manera inclusiva e integral es oportuna y de importancia crítica”, dijo Türk en la conferencia.