ACNUR y la OMS advierten del deterioro de las condiciones de salud tras la muerte de 1.200 niños por sarampión y desnutrición en Sudán

GINEBRA – ACNUR, la Agencia de la ONU para los Refugiados, y la Organización Mundial de la Salud (OMS) alertan de nuevo sobre el empeoramiento de la situación sanitaria provocado por la crisis de Sudán.

De acuerdo con los equipos de ACNUR en el estado sudanés del Nilo Blanco, más de 1.200 niñas y niños refugiados menores de 5 años han muerto en nueve campamentos en el periodo comprendido entre el 15 de mayo y el 14 de septiembre, debido a una combinación mortal de un presunto brote de sarampión y una elevada desnutrición. También se notificaron más de 3.100 casos sospechosos en el mismo periodo y se han notificado más de 500 casos sospechosos de cólera en otras partes del país, junto con brotes de dengue y malaria, en un contexto de mayor riesgo epidémico y desafíos para el control de epidemias.

“El mundo tiene los medios y el dinero para evitar cada una de estas muertes por sarampión o desnutrición”, declaró hoy el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados, Filippo Grandi. “Y, sin embargo, decenas de niñas y niños mueren cada día, como consecuencia de este devastador conflicto y de la falta de atención a nivel mundial. Podemos evitar más muertes, pero necesitamos dinero para la respuesta, acceso a quienes están en necesidad y, sobre todo, el fin de los combates”.

Los centros de salud están sometidos a una inmensa presión debido a la escasez de personal, medicamentos vitales y equipos esenciales. Los repetidos ataques a las instalaciones de salud desde el comienzo del conflicto, tanto contra el personal como contra los pacientes y el transporte de suministros médicos, también están impidiendo que se brinden servicios de salud. La situación ha paralizado la asistencia médica en el país, a pesar de los enormes esfuerzos de las clínicas locales y las agencias de ayuda por seguir prestando unos servicios de salud muy necesarios.

“Los trabajadores de la salud locales, con la ayuda de la OMS y sus socios, están haciendo todo lo que pueden, en condiciones muy difíciles. Pero necesitan desesperadamente el apoyo de la comunidad internacional para evitar más muertes y la propagación de brotes”, señaló el Doctor Tedros Adhanom Ghebreyesus, Director General de la OMS. “Pedimos a los donantes que sean generosos y a las partes en conflicto que protejan al personal de la salud y el acceso a la atención médica para quienes lo necesiten”.

En Renk, Sudán del Sur, los socios humanitarios informan de un aumento de los casos de niñas y niños que llegan con sarampión y altas tasas de desnutrición procedentes de Sudán, principalmente del Nilo Blanco. La situación de desnutrición en el país se está profundizando a gran escala. En todo Sudán del Sur se han registrado más de 5.770 casos sospechosos de sarampión y 142 muertes. Las niñas y los niños menores de 5 años son los más afectados, con casi el 70 por ciento de todos los casos y el 76 por ciento de todas las muertes. La mitad de la niñez afectada no estaba vacunada contra el sarampión, lo que evidencia las brechas en la inmunización, especialmente entre las personas retornadas y refugiadas. Una media de 103 niños al mes fueron ingresados en centros de salud por desnutrición moderada o grave entre mayo y julio, frente al total de 14 ingresos antes del conflicto.

La situación es igual de preocupante en la región etíope de Amhara, donde un brote de cólera en Metema está evolucionando rápidamente en los lugares que acogen a más de 18.000 personas que han huido del conflicto en Sudán. Hasta el 12 de septiembre, ocho personas habían muerto de cólera entre los 435 casos sospechosos notificados. Las reservas de vacunas contra esta enfermedad para la inmunización sistemática también se están agotando, lo que pone a los refugiados en peligro de nuevas infecciones. La falta de ambulancias para transportar y canalizar a los pacientes, la insuficiencia de equipos médicos para el tratamiento y la escasez de personal de salud crítico están poniendo vidas en peligro y obstaculizando seriamente la respuesta humanitaria.

En un reciente ejercicio de detección en Chad, se descubrió que casi 13.000 niñas y niños menores de 5 años presentaban desnutrición aguda. El número de niños con desnutrición ingresados en hospitales ha aumentado un un 56 por ciento en toda la provincia de Ouaddai, que acoge a más del 80 por ciento de los refugiados, desde el comienzo del conflicto en Sudán. La alta prevalencia de desnutrición entre la población refugiada refleja la grave situación de los habitantes de Darfur que huyen a Chad. Además, entre las enfermedades más frecuentes en la niñez siguen figurando las infecciones respiratorias agudas, la diarrea y el paludismo. El acceso al agua potable es también un gran desafío, ya que las familias solo reciben cinco litros por persona, apenas un tercio de lo recomendado.

ACNUR, la OMS y sus socios están trabajando para suministrar asistencia urgente dentro de Sudán y a través de las fronteras, y evitar más muertes. Se están distribuyendo alimentos y se ha vacunado contra el sarampión a niñas y niños menores de 5 años en los campamentos de los estados del Nilo Azul y Blanco, vacunando a más de 53.000. En Chad, dos campañas de vacunación contra el sarampión han alcanzado ya a 1,2 millones de niñas y niños. La OMS y sus socios también lanzaron el fin de semana una campaña de vacunación oral contra el cólera en Amhara, Etiopía. La OMS también está prestando apoyo a los centros de estabilización mediante la provisión de suministros para el tratamiento de los casos de desnutrición aguda. La OMS ha proporcionado en todo Sudán del Sur, Etiopía y Chad suministros de salud que se necesitan con urgencia, entre ellos medicamentos esenciales, material médico para el tratamiento del cólera y la desnutrición, y tiendas de campaña para clínicas móviles. También se está dando prioridad a los botiquines de salud reproductiva, la atención de salud mental y el apoyo psicosocial. En Etiopía, se han enviado kits contra el cólera a Metema y se están instalando una tienda de aislamiento y una enfermería.

• Ver la última actualización de ACNUR sobre la situación de la salud en Sudán (disponible en inglés).
• Descargar el b-roll.

Para más información sobre este tema, favor de contactar:

En Sudán:

• Assadullah Nasrullah, ACNUR, [email protected], +249 912 178 991

En Nairobi:

• Faith Kasina, ACNUR, [email protected], +254 113 427 094

En Ginebra:

• William Spindler, ACNUR, [email protected]; +41 79 549 5998
• Tarik Jašarević, OMS, [email protected], +41 793 676 214