Desminadores de ACNUR a punto de llegar a Sri Lanka

Unos 90.000 desplazados internos han regresado a sus aldeas en el norte y este de Sri Lanka durante los últimos tres meses en el marco del actual plan de retorno del Gobierno de Sri Lanka.

La mayoría de estas personas ha regresado a los distritos de Jaffna, Vavuniya, Mannar, Mullaitivu, Trincomalee, Batticaloa y Ampara. Un pequeño número también ha regresado al distrito de Polonnaruwa. Tan sólo durante las últimas dos semanas, unas 39.000 personas han regresado en el marco de los esfuerzos del Gobierno para acelerar la operación.

Además, se ha permitido la salida de unas 16.500 personas de los campamentos y ahora se alojan en las casas de familias de acogida. Esta cifra incluye a varias personas con necesidades especiales, tales como personas ancianas, mujeres embarazadas y personas con discapacidad que han sido llevadas a instituciones de atención especializada.

En apoyo al proceso de retorno promovido por el Gobierno, ACNUR, junto con otros organismos de las Naciones Unidas, está distribuyendo artículos de primera necesidad tales como esteras para dormir, sábanas y quinqués a los repatriados. También supervisamos las condiciones de protección en las zonas de retorno, verificando las condiciones de retorno. Estamos proporcionando a las familias que regresan una ayuda económica para el alojamiento de 25.000 rupias (unos 250 dólares) al que se puede acceder a través de Bank of Ceylon. Esta suma es un primer paso para ayudarles a reconstruir sus hogares y así poder rehacer sus vidas.

ACNUR también está analizando con el Gobierno la situación en Kilinochchi y Mullaitivu, para garantizar la existencia de las condiciones mínimas para el retorno, como la completa eliminación de las minas antipersona y el acceso a los servicios básicos.

Además de su programa de asistencia general, ACNUR ha proporcionado cinco desminadores de cadenas para ayudar a acelerar las operaciones humanitarias de limpieza de minas en las antiguas zonas de conflicto. Está previsto que estas máquinas lleguen mañana (7 de noviembre) y que sean entregadas al Gobierno. Este equipo será enviado de inmediato a las zonas de retorno en el norte de Sri Lanka, donde las labores de desminado están siendo llevadas a cabo por el Gobierno de Sri Lanka en colaboración con el PNUD y otros actores internacionales y locales encargados del desminado. El desminado humanitario y la eliminación de municiones sin explotar (UXO, por sus siglas en inglés) son requisitos previos para la entrega de asistencia humanitaria, la rápida recuperación y el desarrollo de las zonas afectadas por el conflicto.

El desminado también permite el desarrollo de las infraestructuras y la reanudación de los servicios sociales y de los medios de subsistencia.

Cerca de 274.000 personas se han visto desplazadas en varias ocasiones durante los últimos meses del conflicto en Sri Lanka y han sido confinadas en campamentos cerrados de los distritos de Vavuniya, Jaffna, Mannar y Trincomalee. Tras los recientes retornos, unas 163.000 personas todavía permanecen en los campamentos donde las condiciones se están deteriorando. ACNUR y otras agencias de la ONU continúan pidiendo al Gobierno de Sri Lanka que facilite el regreso de todos los desplazados internos a sus lugares de origen en condiciones seguras y dignas y en consonancia con las normas internacionales. Asimismo, seguimos abogando por la plena libertad de movimiento para aquellas personas que no puedan regresar de inmediato a sus casas o quedarse con amigos y familiares una vez que la actual fase del retorno se haya completado.