ACNUR hace un llamamiento urgente de financiación para reforzar los servicios médicos en medio de la emergencia por mpox

GINEBRA – ACNUR, la Agencia de la ONU para los Refugiados, necesita 21,4 millones de dólares estadounidenses hasta finales de año para ampliar urgentemente la respuesta crítica y los esfuerzos de prevención para las personas refugiadas en los países afectados por la emergencia de mpox. El llamamiento, lanzado hoy, tiene como objetivo ayudar a 9,9 millones de personas desplazadas por la fuerza y a las comunidades de acogida en 35 países de África.

Se han notificado al menos 88 casos de mpox entre la población refugiada en África, 68 de ellos en la República Democrática del Congo (RDC), el país que ha registrado el mayor número de casos en todo el mundo. También se han notificado casos entre refugiados en la República del Congo y Ruanda.

Aunque la mpox ha sido endémica en algunas regiones de África durante décadas, el creciente número de casos de la nueva cepa de la enfermedad, clado 1b, particularmente en la RDC, llevó a la Organización Mundial de la Salud (OMS) a declarar una emergencia de salud pública de importancia internacional el 14 de agosto. Hasta la fecha, se han notificado más de 20.000 casos sospechosos en 2024 en África.

“Este nuevo brote de mpox pone en alto riesgo a las poblaciones más vulnerables, entre ellas muchas comunidades de refugiados y desplazados por la fuerza que viven en condiciones difíciles”, declaró Allen Maina, Jefe de Salud Pública de ACNUR. “A menudo viven hacinados en alojamientos que carecen de acceso a agua potable, jabón y alimentos nutritivos. Para las personas refugiadas y las comunidades desplazadas, que ya se enfrentan a enormes dificultades para acceder a la atención médica, estas condiciones las exponen a un mayor riesgo de enfermar y dificultan su autoprotección”.

África alberga a más de un tercio de la población desplazada por la fuerza de todo el mundo. Muchas de ellas residen en países que luchan contra la transmisión de mpox y se encuentran en situaciones extremadamente vulnerables, agravadas por los conflictos prolongados, la falta crónica de financiación humanitaria y las múltiples catástrofes.

La emergencia de mpox amenaza con presionar aún más los ya sobrecargados recursos humanitarios, interrumpiendo potencialmente servicios y ayudas críticas como la distribución de alimentos, la educación y las actividades de protección.

“Necesitamos apoyar a los gobiernos y socios en la respuesta a la mpox para garantizar que nadie se quede atrás”, afirmó Maina. “Necesitamos financiación sostenible para reforzar los sistemas de salud, las instalaciones de agua y saneamiento, y otros servicios, garantizando que sean resilientes ahora y en el futuro”.

Los equipos de ACNUR han estado respondiendo al brote de mpox desde que surgió por primera vez en 2022, trabajando con las autoridades nacionales y locales, las agencias de la ONU y otros socios. Para responder al nuevo y grave brote, los equipos de ACNUR han reforzado los puntos de lavado de manos en los campamentos de refugiados y centros de tránsito, han mejorado la distribución de jabón y el acceso a las pruebas de diagnóstico, han fortalecido la vigilancia de la enfermedad, los mecanismos de detección y notificación – incluso a través de las fronteras –, han ampliado la capacitación del personal de salud comunitario y han reforzado la comunicación con las comunidades para garantizar que haya información precisa y accesible para combatir la desinformación y reducir el estigma asociado con la mpox.

ACNUR hace un llamamiento a la comunidad internacional para que aumente el apoyo financiero para impulsar los esfuerzos de preparación y respuesta, y reducir la exposición a la enfermedad de las personas con mayor riesgo. Aunque ACNUR ya ha establecido nuevas prioridades en algunos recursos para responder rápidamente al brote, la magnitud y complejidad de la situación requieren financiación adicional para cubrir las necesidades urgentes.

Estos fondos también son esenciales para garantizar que la población refugiada y otras personas desplazadas por la fuerza se integren plenamente en los planes gubernamentales de preparación y respuesta, en consonancia con el Plan Continental Africano de Preparación y Respuesta a Mpox, codirigido por los Centros Africanos para el Control y la Prevención de Enfermedades (Africa CDC, por sus siglas en inglés) y la OMS.

El llamamiento de financiación de ACNUR puede consultarse aquí.

Para más información sobre este tema, favor de contactar:

• En Ginebra, Olga Sarrado, [email protected], +41 797 402 307