La Fundación LEGO dona 3 millones de dólares para construir un futuro para niños refugiados

LONDRES, Reino Unido, 24 de enero de 2014 (ACNUR/UNHCR) – La Agencia de la ONU para los Refugiados recibió el viernes una donación de 3 millones de dólares de la Fundación LEGO que ayudará a mejorar el acceso a una educación primaria de calidad para más de 200.000 niños refugiados bajo la iniciativa Educa a un Niño.

La donación financiará los programas de educación de ACNUR en Chad, Etiopía, Irán, Kenia, Malasia, Pakistán, Ruanda, Sudán, Sudán del Sur, Siria, Uganda y Yemen. Estos 12 países tienen unas de las más grandes poblaciones de refugiados en el mundo y una población en edad de educación primaria de más de 1,25 millones de niños, con al menos el 50 por ciento fuera de la escuela.

"El apoyo de la Fundación LEGO, que comparte un compromiso con el aprendizaje y desarrollo de la niñez, es de gran valor para el programa de educación de ACNUR. La generosa donación de fondos, materiales y experiencia nos ayudará en nuestra labor de facilitar a los niños refugiados la mejor educación posible en unas de las situaciones más desafiantes", dijo Amanda Seller, directora de la unidad de recaudación de fondos del sector privado de ACNUR.

La Fundación LEGO también intervendrá en otras áreas de su actividad para apoyar a ACNUR, por ejemplo, dando formación al personal que se encarga de diseñar su programa de investigación sobre la educación, con el fin de promover ambientes enriquecedores y motivadores para los niños.

ACNUR implementará estos programas educativos para niños refugiados en lugares caracterizados por profundas crisis humanitarias. La Fundación también donará productos de LEGO a niños refugiados para estimular sus actividades lúdicas y de aprendizaje. A lo largo de estos años, LEGO ha donado miles de cajas de juegos a ACNUR para niños desplazados en África, Asia, Europa del Este y Medio Oriente.

Michael Renvillard, director de programas y convenios de la Fundación LEGO, dijo que él veía a los niños como modelos a seguir. "Ellos son aprendices naturales, curiosos, creativos e imaginativos. Sabemos que el juego tiene un papel transformador en el aprendizaje a lo largo de nuestras vidas y que debería de ser adoptado, educado y estimulado. Al apoyar al programa Educa a Un Niño con ACNUR, esperamos contribuir a una mejor calidad de la educación".

Asegurar el acceso a una educación de calidad para niños refugiados, manteniéndolos en la escuela y mejorando su rendimiento académico es una prioridad para ACNUR. Las investigaciones muestran que el 40 por ciento de los niños refugiados (más de un millón de pequeños), no pueden acceder a escuelas de ningún tipo. El desplazamiento implica también que estos niños pueden faltar durante meses o años a la escuela y verse privados de las oportunidades de obtener habilidades esenciales para su desarrollo cognitivo, social y emocional.