Abbas Karimi
Abbas Karimi
Sobre Abbas
En mayo de 2021 se anunció la designación de Mohammad Abbas Karimi como Colaborador de Alto Perfil de ACNUR, la Agencia de la ONU para los Refugiados.
Abbas Karimi creció en Afganistán, donde sufrió discriminación y acoso psicológico (bullying) no solo por su discapacidad, sino también por su identidad. Abbas comenzó a practicar kickboxing cuando era pequeño para protegerse, mantenerse activo y canalizar sus emociones. Sin embargo, no fue sino hasta que saltó a una piscina por primera vez que se dio cuenta de que la natación era su verdadera vocación. Fue campeón en la primera competencia nacional de natación en la que participó en Afganistán.
En 2013, Abbas tuvo que huir del país debido a las persecuciones que atentaban contra su grupo étnico. Después de recorrer un camino largo y agotador, llegó a Turquía, donde pasó cuatro años como refugiado antes de que ACNUR lo reasentara a Portland, EE. UU., en 2016. Desde entonces, Abbas ha ganado ocho medallas, con inclusión de la medalla de plata que obtuvo en el Campeonato Mundial de Natación Adaptada de 2017 en la Ciudad de México.
Hoy en día, Abbas vive y entrena en Fort Lauderdale, Florida, donde se esfuerza por conseguir un sitio en el Equipo Paralímpico de Refugiados del Comité Paralímpico Internacional (CPI). Sin embargo, además de formar parte del equipo, la intención de Abbas es conseguir un lugar en el podio, pues considera que hacerlo llevará esperanza e inspirará a millones de personas desplazadas en el mundo, a quienes busca representar.
Abbas dijo: “Me estoy preparando para ser un atleta paralímpico refugiado. Espero ser parte del equipo que viajará a Tokio. Creo en mí mismo, pero nada de lo que hago es para mí. He llegado muy lejos y, como colaborador de ACNUR, me esforzaré por dar lo mejor de mí para representar a todas las personas refugiadas y desplazadas en el mundo.
He ganado ocho medallas en competencias de natación como atleta paralímpico refugiado. Creo tener el potencial para llegar al podio en los paralímpicos; además, considero que es importante, tanto para las personas refugiadas como para nuestro legado, que lleguemos al podio en lo individual, como atletas refugiados, porque puede generar cambios, inspirar y traer esperanza para las poblaciones refugiadas.
El mundo está prestando atención y tengo la fortuna de representar a las poblaciones refugiadas y a 80 millones de personas desplazadas en el mundo.
Agradezco el apoyo que he recibido de mi familia, de mi entrenador, de la población afgana, del CPI y de ACNUR. Sé que cuento con su respaldo, así que no me siento solo. Agradezco el apoyo que me han dado”.
En 2017, Abbas viajó a Ginebra como parte del Consejo Asesor Mundial de la Juventud para hablar en el Diálogo con el Alto Comisionado sobre Retos para la Protección. Abbas desea seguir aprovechando su destreza deportiva como plataforma para abogar por el impacto positivo que el deporte ha tenido en su vida como persona con discapacidad que ha sido desplazada.