Chile: En Calama se inauguró centro de acogida Casa de la Esperanza
Chile: En Calama se inauguró centro de acogida Casa de la Esperanza
La infraestructura se ha logrado levantar gracias a la cooperación de la Iglesia de Calama, ACNUR, la Agencia de la ONU para los Refugiados, la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), empresas privadas y el Servicio Jesuita Migrante junto al Gobierno Regional. “Esta casa acogerá a todos, sin mirar nacionalidad y se les ayudará a integrarse a la ciudad si así lo deciden”, señaló el Presidente de Cáritas Calama David Vargas.
El proyecto nació como una respuesta de apoyo a las personas refugiadas y migrantes que llegan en búsqueda de un mejor futuro – y que luego de cumplir la cuarentena en una residencia sanitaria – no cuentan con los medios suficientes para financiar un lugar para pernoctar. Estas familias, compuestas muchas veces por mujeres, niñas y niños, solo tenían la calle como opción para pasar la noche, lo que los exponían a peligros y al frío nocturno característico de la zona.
Para evitar esta situación, Cáritas puso a disposición este nuevo espacio que puede albergar un máximo de 70 personas por noche, pues cuenta con 22 habitaciones, 8 baños y 10 duchas, además de cocina, lavandería, comedor y bodega. Cabe destacar, que, durante su estadía transitoria, se les brindará la información necesaria sobre los pasos a seguir si deciden continuar en el país.
La idea de la Casa de la Esperanza nace desde Cáritas, pero ACNUR quiso formar parte y pudo apoyar el proyecto donando el equipamiento de la cocina (campana, mesones, refrigerador y otros utensilios). “Lo más simbólico de la inauguración de este recinto fue darnos cuenta de que instituciones y organizaciones de distintos sectores, tanto público como privadas, se unieron bajo un mismo foco, que fue pensar en las personas refugiadas y migrantes y su seguridad”, destacó la encargada de ACNUR en Arica, Karina Espejo.
El 10 de junio, durante su inauguración, el Presidente de Cáritas en Calama, David Vargas, recordó que hace algunos años recibió un terreno baldío y “gracias a entidades internacionales como ACNUR y a la empresa privada pudimos hacer realidad este sueño que responde a la emergencia humanitaria”, e hizo notar que se acogerá a familias no solo extranjeras, sino que también a nacionales que llegan a la ciudad desde otras regiones en busca de trabajo.
“A los que quieran ir a otras ciudades también se les apoyará, en especial a los que busquen reunificación familiar. Los que vienen, por ejemplo, del sur, se les orientará en la búsqueda de trabajo en empresas privadas”, informó Vargas. A su vez, aclaró que la entidad recibirá por orden de llegada, pero que contará con un equipo psicosocial para priorizar.
En esta línea, Karina Espejo también destacó que los vecinos de La Casa de la Esperanza hayan valorado y apoyado la idea. Ello se logró después de un trabajo de sensibilización realizado tanto por el padre David como también por el obispo de la ciudad. “El objetivo de ello fue que una vez que se abriera el refugio, no hubiese manifestaciones de rechazo y de xenofobia, sino que se convirtiera en un barrio que acogiera a las personas refugiadas y migrantes y que hasta se realizaran actividades en conjunto”.
Por último, David Vargas explicó que las personas que lo necesiten pueden acudir desde las 19 horas y que además de un lugar para pasar la noche también contarán con cena, desayuno, “y todo lo básico para que pasen la noche en un lugar seguro”, y recalcó que para este proyecto se requirieron cerca de 400 millones de pesos chilenos (418.000 dólares USD, aproximadamente), que en su totalidad corresponden a donaciones.