El conflicto frena los planes de boda de una pareja siria
El conflicto frena los planes de boda de una pareja siria
VALLE DE LA BEKAA, Líbano, 19 de septiembre (ACNUR) – Hay un largo camino desde los lujosos hoteles del Golfo Pérsico hasta las ciudades montañosas y polvorientas del Valle de la Bekaa en Líbano. Sin embargo, Abu Omar, de 28 años, jefe de ventas de un hotel de cinco estrellas, ha hecho ese camino y le han disparado dos veces en Siria durante su viaje.
Abu Omar, que no quiere utilizar su verdadero nombre, habló con ACNUR a principios de este mes en una escuela vacía en Líbano, donde había buscado refugio en las dos semanas anteriores, y contó que su decisión de abandonar Siria se reducía a una sola cosa: salvar a su futura mujer.
Abu Omar había estado trabajando en el golfo, pero a principios de año regresó a su hogar en Damasco para casarse. Una tarde iba en coche con su prometida y su futura familia política a comprar un vestido cerca del hogar familiar. Cuando el coche se acercaba a un puesto de control, un francotirador abrió fuego desde lo alto de un tejado cercano.
El conductor pisó el freno y giró el volante bruscamente, pero 24 balas destrozaron la ventanilla de atrás y perforaron las puertas. La prometida de Abu Omar recibió un disparo en el estómago, mientras que el conductor murió debido al impacto de una bala en la columna vertebral.
Los supervivientes se dirigieron a un hospital cercano donde un médico cosió con puntos el abdomen de la prometida de Abu Omar. Sin embargo, el director del hospital les advirtió que no se quedaran, ya que estaba esperando la visita de los oficiales de seguridad para controlar a los nuevos pacientes, por si pudiesen ser posibles simpatizantes de la oposición; pero tampoco era seguro volver a casa.
Abu Omar tomó a su prometida y a su familia y los llevó a esconderse en una panadería del vecindario. "No era un lugar nada saludable", recordaba él. El estado de salud de su futura mujer empeoró; no le bajaba la fiebre.
Para conseguir ayuda, Abu Omar llamó al cirujano que había cosido a su novia y después, aunque la casa del médico estaba también en línea de fuego, se arriesgó a hacer el viaje para recogerle y llevarle a la panadería. "¡Además de todo", cuenta Abu Omar, "se le olvidó llevar su botiquín!". Abu Omar tuvo que comprar instrumentos nuevos para que el médico retirara los puntos, quien después le recetó unos antibióticos a su prometida. Cuando ella se estabilizó, Abu Omar decidió abandonar su país.
El mismo día que tenían programado huir, volvió a entrar en línea de fuego, dice él. Esta vez recibió un disparo en el hombro derecho, pero la bala salió limpiamente. "No regresaré hasta que sea seguro" cuenta desde su nueva residencia temporal en el Valle de la Bekaa en Líbano, mirando hacia las colinas marrones de Siria.
Él y su prometida huyeron a través de la frontera hacia Líbano, donde ella está siendo tratada en un hospital local. Abu Omar es uno de los 60.000 sirios refugiados en Líbano. ACNUR y sus asociados están ayudando a refugiados con Abu Omar y su prometida a adquirir cuidados médicos y otros servicios en Líbano, así como alojamiento.
"Regresé a Siria para casarme y me fue fatal", cuenta él. Ahora su vida ha tomado un rumbo completamente inesperado. Al menos están a salvo, admite él, y con suerte pronto estarán casados.
Por Andrew Purvis en el Valle de la Bekaa, Líbano
Gracias a la voluntaria de UNV Online Laura Gil Mendoza por el apoyo ofrecido con la traducción del inglés de este texto.