Declaración conjunta ACNUR-OIM sobre movimientos de inmigrantes y refugiados en Mediterráneo central
Declaración conjunta ACNUR-OIM sobre movimientos de inmigrantes y refugiados en Mediterráneo central
GINEBRA, Suiza, 02 de febrero de 2017 (ACNUR) -- De cara a la reunión informal del Consejo Europeo mañana en La Valeta, ACNUR llama a los líderes europeos a tomar acciones decididas en relación a la trágica pérdida de vidas en la ruta del Mediterráneo Central, así como sobre las deplorables condiciones para inmigrantes y refugiados en Libia.
Para proteger mejor a estos colectivos, es necesaria una Unión Europea fuerte y comprometida más allá de sus fronteras con la protección, la asistencia y la ayuda en la búsqueda de soluciones para personas que las necesitan. Esto incluye el fomento de capacidades para salvar vidas tanto en mar como en tierra, el fortalecimiento del estado de derecho y la lucha contra las redes criminales.
Se llama a coordinar esfuerzos para garantizar que se establezcan sistemas de migración y asilo sostenibles en Libia, cuando las condiciones de seguridad y la situación política lo permitan, así como en los países vecinos.
Se insta a distanciarse de la gestión de flujos migratorios basada en la detención automática de refugiados y migrantes en Libia en condiciones inhumanas, y a crear en su lugar servicios de recepción adecuados. Los centros de acogida abiertos deberían ofrecer condiciones seguras y dignas -- inclusive a niños y víctimas de trata -- y respetar los estándares clave de protección.
Se espera que la cumbre de mañana también ayude a avanzar hacia la adopción de un enfoque común sobre la migración por parte de la Unión Europea.
Se necesita establecer medidas concretas para apoyar al Gobierno de Libia de cara a aumentar la capacidad de registro de nuevas llegadas, apoyar el retorno voluntario de inmigrantes, tramitar solicitudes de asilo y ofrecer soluciones a los refugiados. Debe incluirse una ampliación significativa de las oportunidades de acceso a través de canales seguros, como el reasentamiento y la admisión humanitaria entre otros, para evitar el peligro que entrañan los viajes.
Junto con organizaciones aliadas, se han realizado enormes esfuerzos en Libia para brindar protección básica a los refugiados, los inmigrantes y a las poblaciones locales afectadas, que en algunos lugares también necesitan asistencia urgente.
Las limitaciones de seguridad continúan obstaculizando la capacidad de brindar asistencia para salvar vidas, proporcionar servicios básicos a los más vulnerables y buscar soluciones mediante el reasentamiento, el retorno voluntario asistido o la autosuficiencia. El acceso humanitario sin trabas sigue siendo una prioridad.
Se estima que, dado el contexto actual, no es apropiado considerar a Libia como un tercer país seguro ni establecer procesamiento extraterritorial para los solicitantes de asilo en el norte de África.
Se espera que puedan hallarse soluciones humanitarias para poner fin al sufrimiento de miles de inmigrantes y refugiados, en Libia y en toda la región, y está preparada para ofrecer asistencia y escalar su implicación, siempre que las condiciones lo permitan.