Miles de desplazados por los combates necesitan ayuda urgente en la RCA

BANGUI, República Centroafricana, 26 de septiembre de 2013 (ACNUR) – Un equipo humanitario desplazado en la zona Bossangoa, en la República Centroafricana (RCA) ha encontrado devastación y miles de personas que necesitan asistencia urgente tras los últimos combates en la convulsa región.

"Hemos visto a gente que necesita ayuda desesperadamente, cosas básicas como alimentos, agua, cobijo y atención médica. No tienen comida y están durmiendo bajo los árboles en esta temporada de lluvias" afirma Jean-Claude Ndanga, un trabajador de campo de ACNUR en RCA que forma parte del equipo interagencial que ha regresado de la zona esta semana.

En Bossangoa, a 300 kilómetros al norte de Bangui, la capital, el equipo encontró a unos 5.000 desplazados que estaban refugiados en una iglesia católica, una escuela y en un edificio de la prefectura. Necesitan desesperadamente alimentos, cobijo y agua. En estos tres espacios están viviendo hacinados y en unas condiciones sanitarias que se deterioran por días.

Los enfrentamientos de las últimas dos semanas entre la antigua coalición Seleka y los grupos de autodefensa han obligado a más de 170.000 personas, muchas de ellas mujeres y niños, a huir de sus aldeas en la prefectura de Ouham Pende y a buscar refugio en la ciudad de Bossangoa. Éste ha sido el último combate de un conflicto interno en la RCA que ya ha desplazado a cerca de 400.000 personas este año, según cifras de Naciones Unidas.

"Uno de mis hijos fue asesinado por hombres armados delante de mí y el otro huyó. ¿Dónde? No lo sé" dice Kadjidja, una mujer de unos 50 años acogida en la escuela Liberte tras haber recorrido muchos kilómetros desde su aldea, Zere, hacia Bossangoa. Todavía llevaba puesta la ropa con la que huyó y estaba durmiendo en el suelo porque no tenía esteras ni mantas.

Durante la visita a Bossangoa, el personal de ACNUR y de otras organizaciones fue testigo del horror generalizado y la destrucción provocados por el conflicto. Se ha informado de que unas 400 personas han muerto durante los enfrentamientos.

Los combates han dejado una zona, que en su día tenía una economía activa, completamente desolada. A lo largo de un tramo de carretera de 165 kilómetros, la misión interagencial no vio pasar ni un solo vehículo o bicicleta.

"Las aldeas de Togbo, Ndow Kette y Gbakata por las que pasamos habían sido incendiadas, saqueadas y abandonadas. Sólo se podía ver a algunos animales domésticos extraviados" dice Ndanga.

Tras esta misión a la zona, ACNUR y otras agencias están coordinando sus planes para enviar ayuda urgente a los desplazados. La Agencia de la ONU para los Refugiados está entregando material no alimentario como lonas, mantas, esteras, mosquiteras, cubos, bidones y jabón.

La semana pasada ACNUR distribuyó ayuda humanitaria a unos 2.500 nuevos desplazados en Paoua, a 140 kilómetros de Bassangoa, y ahora ofrecerá ayuda a las 5.000 personas desplazadas internas que hay en esta ciudad.

Por Djerassem Mbaiorem en Bangui, República Centroafricana