Mujeres desplazadas por la fuerza en alto riesgo de violencia de género en América Latina, según estudio de ACNUR e HIAS
Mujeres desplazadas por la fuerza en alto riesgo de violencia de género en América Latina, según estudio de ACNUR e HIAS
CIUDAD DE PANAMÁ – En contextos de crisis humanitaria y desplazamiento forzado, el riesgo de sufrir violencia de género (VG) se eleva significativamente, y afecta de manera desproporcionada a mujeres y adolescentes, según un estudio realizado por ACNUR e HIAS en siete países de América Latina. El estudio muestra que el riesgo de VG está presente a lo largo de todo el ciclo del desplazamiento forzado, en los países de origen, tránsito y destino.
En sus países de origen, las mujeres refugiadas y desplazadas por la fuerza a menudo son objeto de violencia sexual, explotación y abuso, lo que las obliga a huir en busca de protección.
Durante su recorrido, la falta de documentación y recursos, y la restricción para cruzar regularmente las fronteras han obligado a las mujeres a utilizar rutas cada vez más peligrosas con presencia de grupos criminales y escasa respuesta institucional. El 76 por ciento de las mujeres desplazadas que llegaron al país de destino en la segunda mitad de 2021 se sintieron inseguras durante el viaje, una cifra significativamente más alta que las que cruzaron las fronteras hace cinco años (42 por ciento).
En un nuevo país, las mujeres desplazadas por la fuerza a menudo experimentan la pobreza extrema, la falta de redes de apoyo, la xenofobia, el impacto del desarraigo en la salud mental y las barreras para acceder al sistema de asilo u otros procedimientos de regularización. Estos factores, junto con la hipersexualización y cosificación de los cuerpos de las mujeres, aumentan su exposición a la VG. Una de cada tres mujeres encuestadas no se siente segura en su país de acogida, y tres de cada cinco sienten que la COVID-19 ha aumentado el riesgo de sufrir VBG.
Las sobrevivientes de violencia de género rara vez se acercan a los proveedores de servicios debido a la falta de confianza y el temor de ser revictimizadas, sufrir represalias por parte del perpetrador, ser detenidas o deportadas.
“Las sobrevivientes de violencia de género, en particular los grupos más vulnerables, como las mujeres indígenas, enfrentan una grave falta de acceso a los servicios de apoyo, incluidos espacios seguros para mujeres y niñas, vivienda segura y atención médica, así como barreras para acceder a la justicia y protección”, señaló Cristina García, Directora Regional de HIAS para América Latina y el Caribe. “Estas brechas en el acceso a mecanismos integrales de gestión de casos tienen un impacto negativo en la seguridad, atención y recuperación de las sobrevivientes”.
“Nuestro continente enfrenta una situación de desplazamiento sin precedentes, que afecta de manera desproporcionada a millones de mujeres y niñas víctimas de violencia, abuso y explotación”, comentó José Samaniego, Director Regional de ACNUR para las Américas. “Es fundamental prevenir y erradicar todas las formas de violencia de género fortaleciendo la respuesta institucional y empoderando a las comunidades”.
El estudio concluye con varias recomendaciones a las autoridades de los países de acogida, las agencias de las Naciones Unidas, las organizaciones no gubernamentales y los actores de la sociedad civil para fortalecer la prevención de la VG, la mitigación de riesgos y la respuesta para las mujeres desplazadas por la fuerza, incluido el apoyo para lograr la autonomía económica y el acceso al asilo y otras opciones de estancia regular.
Resumen ejecutivo e informe completo en https://segurasenmovilidad.org
Para solicitudes de medios, favor de contactar:
ACNUR:
- En Panamá, Analía Kim, [email protected]
- En Brasil, Luiz Godinho, [email protected]
HIAS:
- En Panamá, Juan Carlos Pacheco, [email protected]