Angola: miles de angoleños expulsados necesitan asistencia
Angola: miles de angoleños expulsados necesitan asistencia
Decenas de miles de angoleños recientemente expulsados de la República Democrática de Congo (RDC) necesitan asistencia de manera urgente en varios emplazamientos situados en los alrededores de la ciudad de Mbanza Congo, en el norte de Angola. ACNUR ha visitado la ciudad de Mbanza Congo durante este fin de semana, en el marco de una misión de evaluación interagencial en la zona que bordea con la RDC, donde se encuentran las personas expulsadas.
De acuerdo con la evaluación inicial, cerca de 30.000 personas viven el interior y en los alrededores de los tres centros de recepción de Cuimba (11.000 personas) y Mama Rosa (unas 18.000 personas), situados respectivamente a 30 y 8 kilómetros de la frontera con la RDC. Las necesidades más urgentes se refieren al cobijo, comida, medicinas e instalaciones de saneamiento.
El suministro de agua potable también es insuficiente. Algunas de las personas expulsadas están bebiendo agua contaminada de ríos cercanos. Entre las personas entrevistadas durante el fin de semana en uno de estos campamentos improvisados en Lendi, cerca de Cuimba, que acoge a cerca de 5.800 angoleños, muchas familias denuncian la existencia de casos de diarrea y vómitos. En el mismo campo, la mayor parte de la población está durmiendo a la intemperie.
El hecho de que haya un significativo número de refugiados congoleños entre las personas expulsadas a la fuerza nos preocupa particularmente. Algunos de ellos dicen haber sido reunidos para posteriormente ser llevados a la frontera, a pesar de contar con documentos que les acreditan como refugiados. Otros han denunciado haber sido obligados a regresar sin tener la oportunidad de recoger sus documentos de identidad ni ninguna de sus pertenencias. La mayoría de ellos fueron expulsados desde la provincia de Bajo Congo en el sur de la RDC. Estos retornos forzados se han producido en respuesta a las oleadas de expulsiones desde Angola de un gran número de congoleños desde diciembre de 2008.
ACNUR acoge con agrado el acuerdo oficial entre la RDC y Angola para poner fin a las expulsiones transfronterizas. Sin embargo, las autoridades angoleñas han indicado a la misión interagencial que esperaban nuevas expulsiones a gran escala de angoleños que sentían que ya no podrían permanecer durante más tiempo en la RDC.
A petición del gobierno angoleño, que ha tratado de ayudar a las personas expulsadas a la fuerza, ACNUR prevé ofrecer asistencia a los grupos de personas expulsadas, muchos de los cuales se encuentran ahora desplazados y en espera de regresar a sus hogares.