Últimos datos sobre la situación en el noroeste de Pakistán

En el noroeste de Pakistán, ACNUR sigue buscando nuevos terrenos en los que construir más emplazamientos y así poder acoger al cada vez mayor número de personas desplazadas que buscan cobijo en los campos. Nuestros equipos en el terreno nos han informado de que cada vez más personas se alojan con familias de acogida, en casas de familiares o en escuelas están ahora llegando a los campamentos. Las personas que llegan a los campamentos confiesan que están ejeciendo más presión sobre las familias que les acogen, que en muchos casos, cuentan con limitados recursos económicos. Otros cuentan que han estado viviendo en colegios en pueblos en los que sólo han recibido una escasa ayuda.

Los dos nuevos campos que abrieron sus puertas la semana pasada ya casi han alcanzado su capacidad máxima. Sugar Mill, en Charsadda, alberga en este momento a 2.800 personas y Larama, en Peshawar, acoge a 4.800 personas. Las nuevas llegadas están siendo dirigidas al campo de Jalozai, en Nowshera, que tiene un tamaño mayor y que en este momento alberga a cerca de 97.000 personas desplazadas, incluidas las 52.000 que han llegado desde principios de mayo. Otros están siendo dirigidos al campo de Yar Hussain, en el distrito de Swabi, que acoge a 29.000 personas. Tan sólo en Yar Hussain, ayer lunes fueron registrados 1.170 nuevos desplazados internos. Ambos campos están siendo ampliados continuamente para poder acoger a los recién llegados.

Estamos negociando con las autoridades la posible apertura de un nuevo emplazamiento en el distrito de Hazara. Acabamos de ser informados de que unas 235.000 personas se alojan en 21 campos organizados en la Provincia de la Frontera Noroeste (NWFP, por sus siglas en inglés), según datos de las autoridades locales. Esta cifra incluye a las más de 148.000 personas que han huido de sus hogares durante las últimas cinco semanas. Además, más de 100.000 personas viven en condiciones similares a los campamentos en escuelas y otros edificios estatales. Con el levantamiento del toque de queda durante el día de hoy en Chakdara, en el distrito de Malakand, es posible que lleguen más personas a las zonas seguras.

En los campamentos, estamos trabajando para mejorar las condiciones. En colaboración con nuestros socios, seguimos instalando toldos que den sombra sobre las tiendas individuales, para ofrecer a los desplazados internos una mejor protección frente al calor. También seguimos colocando vallas alrededor de los campamentos y levantando muros que den privacidad a las familias. Entretanto, fuera de los campamentos seguimos instalando toldos en los centros humanitarios de los distritos de Mardan, Nowshera, Swabi y Charssada.

ACNUR quiere ampliar su asistencia a las personas que se hospedan fuera de los campamentos, y está gestionando más material humanitario. Necesitamos de manera urgente más financiación para poder comprar más suministros. Todavía necesitamos 67 millones de dólares para nuestra operación en Pakistán hasta final de año. Puede que esta cifra experimente cambios si aumenta el número de personas desplazadas.

En colaboración con ONU-Habitat, World Vision, el Consejo Noruego para los Refugiados, Catholic Relief Services y Relief Internacional, estamos considerando la posibilidad de ofrecer material de cobijo a las personas desplazadas que se hospedan con familias de acogida. Un grupo de trabajo técnico está desarrollando un prototipo de este equipo, y se estrenará el proyecto en zonas rurales en las que las familias dispongan de más terrenos o jardines para utilizar estos materiales de cobijo. El proyecto aliviará parte de la presión y sobrepoblación que en este momento sufren las familias de acogida. Además, seguimos trabajando con ONU-Habitat para distribuir tiendas de campaña a las personas que se hospedan con familias de acogida. Hasta la fecha se han distribuido más de 3.500 tiendas.

Mañana miércoles, ACNUR y su agencia social Programa de Apoyo Rural de Sarhad (SRSP, por sus siglas en inglés) empezarán a distribuir material humanitario a las personas desplazadas que se alojan en colegios, familias de acogida y habitaciones alquiladas en los distritos de Charssada y Nowshera. Unas 84.000 personas (14.000 familias) en Charssada y 54.000 personas (9.000 familias) en Nowshera recibirán material humanitario como esteras, utensilios de cocina, lonas plásticas y bidones.

Entretanto, los propios pakistaníes siguen dando muestras de generosidad con los desplazados. Esta semana en el campo de Jalala, las autoridades distribuyeron 1.000 juegos de utensilios de cocina y 300 bombonas de gas, que formaban parte de una donación privada.

La Autoridad Nacional de Bases de Datos (NADRA, por sus siglas en inglés) hasta el momento ha confirmado el registro de casi 1,9 millones de desplazados internos (268.674 familias) en el marco del proceso actual de verificación y comprobación de todas las personas que han sido registradas en el proceso rápido inicial. Entre las personas confirmadas se incluyen desplazados internos de Swat, Buner, Bajaur y Mohmand Agency, Bajo Dir, la zona de Malakand y Shangla, procedentes tanto de los desplazamientos de 2008 como de los últimos. El proceso de verificación sigue en marcha, con miles de formularios pendientes de ser revisados.