Se reduce la llegada de refugiados somalíes a Yemen aunque continúa la violencia
Se reduce la llegada de refugiados somalíes a Yemen aunque continúa la violencia
El número de personas que cruzan el Golfo de Adén y el Mar Rojo en los flujos migratorios mixtos desde el Cuerno de África se ha reducido hasta casi la mitad durante el primer trimestre del año en comparación con el mismo período de 2009. Desde principios de año, unas 9.400 personas han alcanzado las costas de Yemen, en contraste con las casi 17.000 que llegaron entre enero y marzo de 2009.
La mayor caída se ha registrado en el número de llegadas de somalíes. Unos 3.200 refugiados somalíes llegaron a Yemen este año, lo que representa aproximadamente un tercio de los somalíes que arribaron durante los cuatro primeros meses de 2009. Hoy en día, los refugiados somalíes representan una tercera parte de las personas que llegan a Yemen. Durante el mismo período de 2009, considerado uno de los períodos relativamente más tranquilos de los últimos años en Somalia, los refugiados somalíes constituían la inmensa mayoría (más de la mitad) de todas las llegadas por mar a Yemen. Los recién llegados procedentes de Somalia son automáticamente reconocidos como refugiados en Yemen y en la actualidad el país alberga a más de 170.000 refugiados somalíes.
Sin embargo, la caída en el número de llegadas de somalíes no se debe a una mejora de las condiciones en Somalia. A diario muchos civiles somalíes se ven obligados a huir de sus hogares.
Este año comenzó con algunos de los peores y más sangrientos combates acaecidos en Somalia desde principios de 2009. Durante los tres primeros meses de este año se registraron algunas de las más altas tasas de desplazamiento desde enero de 2009, y se calcula que 169.000 personas se habrían visto obligadas a abandonar sus hogares en el sur de Somalia Central, en particular desde Mogadiscio. Sin embargo, el número de nuevas llegadas de somalíes a la región sigue siendo relativamente pequeño. Más de 20.000 refugiados somalíes huyeron hacia los países vecinos – la mayor parte a Kenia (más de 12.000) y Etiopía (más de 6.500) desde el comienzo del año.
La mayoría de los somalíes desplazados encontraron cobijo en los campamentos espontáneos en el corredor de Afgooye, situado a las afueras de Mogadiscio, o permanecen dentro de desplazados en el interior de la capital.
Los nuevos refugiados somalíes que llegan a Yemen explican que las personas que huyen de los combates cada vez tienen que enfrentarse más a dificultades para poder llegar a la ciudad portuaria de Bossaso, en el norte de Somalia. Allí esperan su oportunidad para subir a los barcos de traficantes que parten hacia Yemen. Estas personas citan la inseguridad general como la principal razón para no dirigirse hacia el norte. Además, dicen que cada vez más personas carecen de medios para poder costearse el viaje hacia Puntlandia.
Los refugiados también indicaron que las autoridades de Puntlandia están realizando esfuerzos visibles para detener la trata de seres humanos. Estos refugiados también mencionaron que gran parte de las personas que acaban de llegar a Bossaso están esperando para poder ser trasladados de manera ilegal a de Yemen. Los equipos de ACNUR en el norte de Somalia siguen prestando asistencia a la población desplazada. Además, las campañas intensivas de información advierten a aquellos que se plantean emprender la arriesgada travesía hacia Yemen sobre los peligros que implica este viaje.
Según los mismos informes, muchos somalíes desplazados evitan dirigirse hacia Kenia o Etiopía a través de los territorios que se encuentran bajo el control de las milicias, por temor a la violencia y el reclutamiento forzoso.
La población civil de Somalia sigue padeciendo una de las peores crisis humanitarias en el mundo. Se estima que hay 1,4 millones los desplazados internos en Somalia, mientras que casi 570.000 somalíes viven como refugiados en los países vecinos.