ACNUR recupera el acceso a 35.000 refugiados en República del Congo

En los últimos días, los equipos de ACNUR han podido tener acceso de nuevo a unos 35.000 refugiados congoleños que permanecían aislados en la República del Congo, a orillas del río Oubangui. Este grupo forma parte de unos 114.000 refugiados que han huido de los enfrentamientos desencadenados en octubre del pasado año a raíz de las disputas por la pesca y la agricultura en la provincia de Equateur, en el noroeste de República Democrática del Congo (RDC).

Las operaciones de pacificación emprendidas por los militares de la República Democrática del Congo contra las milicias étnicas en Equateur nos habían impedido acceder a la zona durante las últimas cinco semanas. No obstante, el reciente levantamiento de las restricciones de seguridad nos ha permitido restablecer la asistencia humanitaria. Nuestros equipos también estarán pendientes de los informes sobre nuevas llegadas de refugiados de la RDC.

Los 35.000 refugiados congoleños en cuestión viven en 36 asentamientos establecidos a orillas del río Oubangui, entre Doungou y Liranga, a unos 320 kilómetros al sur. Esta zona se extiende desde nuestra principal base logística en la capital regional de Impfondo, que se encuentra a unos 700 kilómetros al norte de Brazzaville, la capital de República de Congo.

Desde mediados de la semana pasada nuestro personal ha podido reanudar el registro individualizado de los refugiados y actualmente están tratando de verificar el número de nuevas llegadas desde Equateur, donde a principios de abril se registraron más ataques mortíferos por parte de milicias Enyele en la ciudad de Mbandaka. A finales de octubre del año pasado se produjeron ataques similares que provocaron la llegada de refugiados a la República de Congo, lo que llevó a ACNUR y a otras agencias de la ONU a lanzar un llamamiento de emergencia en el mes de marzo por valor de 59 millones de dólares para alimentos, cobijo, agua, educación, atención sanitaria y otras necesidades.

La situación de los refugiados en este rincón de África es una de las operaciones más complejas en términos de logística a las que ACNUR tiene que hacer frente. Las 114.000 personas a las que estamos tratando de dar asistencia en esta zona se encuentran dispersas en más de 100 asentamientos distribuidos en una franja de 600 kilómetros a lo largo del río Oubangui, que separa la República del Congo de la República Democrática del Congo. La mayor parte de los refugiados de la República Democrática del Congo se encuentran al norte de Doungou. El acceso a estas personas, dispersas por una zona tan extensa y remota, representa un enorme reto. Todo nuestro personal, recursos y asistencia tienen que ser transportados en avión hasta Impfondo, desde donde son embarcados en lanchas y barcazas que navegan por el río Oubangi. Esta es la única manera en que nuestro personal puede acceder a estos refugiados y prestar una ayuda tan necesaria. La operación está consumiendo gran cantidad de tiempo y recursos. A modo de ejemplo, nuestros equipos tardaron más de dos días en recorrer en barco los 287 kilómetros que separan Impfondo, la capital provincial del norte de la RDC, de Liranga, en la República de Congo.

Mientras tanto, en República Democrática del Congo, tenemos previsto reforzar nuestra presencia en la provincia de Equateur, donde se calcula que más de 30.000 personas han sido desplazadas internamente.