La violencia en la República Centroafricana obliga a miles de personas a huir al vecino Camerún
La violencia en la República Centroafricana obliga a miles de personas a huir al vecino Camerún
Miles de personas están huyendo en busca de seguridad a Camerún para escapar de la violencia en la República Centroafricana (RCA). Sólo en los últimos diez días, 8.762 personas de varias nacionalidades cruzaron la frontera y llegaron a la ciudad de Kentzou, en el este de Camerún.
Entre estas personas, en su mayoría centroafricanos (4.764 personas), también había nacionales de Chad (3.424), Camerún (1.497), Nigeria (43) y Malí (10). Esto eleva el número de refugiados de la RCA en Camerún a más de 20.000 personas desde el inicio del conflicto.
Los recién llegados han contado al personal de ACNUR que huyeron a causa de los enfrentamientos entre antiguos miembros de Seleka y milicianos anti – Balaka en la capital, Bangui, y otras ciudades en el noroeste del país tales como Bour, Baboua, Beloko y Cantonnier. Algunos también huyeron de los intensos combates en las regiones de Berberati, Carnot, Baoro y Gambala. Otros han escapado por temor a que los milicianos anti – Balaka avancen hacia sus regiones.
La mayoría de los refugiados centroafricanos registrados por ACNUR son principalmente mujeres y niños, entre los cuales hay 43 mujeres embarazadas, 50 madres lactantes y 89 personas con discapacidad que necesitan atención especializada. La mayoría de ellos son musulmanes que dicen temer por su seguridad debido a que son percibidos como simpatizantes del grupo Seleka, mayoritariamente musulmán.
Las condiciones de vida son precarias para los recién llegados, quienes están siendo acogidos por familias locales pobres o están viviendo mezquitas, en un estadio o en las calles. ACNUR está trabajando para reconvertir un campamento cercano designado por las autoridades, donde está previsto trasladar a los refugiados a finales de la próxima semana.
ACNUR se ha puesto en contacto con varias embajadas para que se hagan cargo de los ciudadanos de otras nacionalidades.
Antes del inicio de la crisis actual, Camerún ya acogía a 92.000 refugiados de la República Centroafricana que comenzaron a llegar en 2004 para escapar de los grupos rebeldes y bandidos en el norte de su país.
Las personas que huyen de la violencia comunitaria reciente en la RCA también se están dirigiendo a la República Democrática del Congo (RDC). Desde el sábado, la República Democrática del Congo ha recibido a más de 1.500 refugiados y cada día siguen llegando más. Estas personas han venido desde zonas que aún se encuentran bajo control de grupos Seleka que, dicen, están cometiendo abusos contra la población civil.
Con estas últimas llegadas, en estos momentos hay más de 60.000 refugiados de la RCA que han buscado asilo en la República Democrática del Congo debido a las atrocidades cometidas por el Seleka durante el conflicto y, más recientemente, debido a los enfrentamientos recurrentes, así como a los ataques indiscriminados perpetrados por turbas armadas, tanto musulmanas como cristianas.
Desde el comienzo del conflicto en diciembre de 2012, cerca de 246.000 civiles centroafricanos se han convertido en refugiados en toda la región.
Asimismo, más de 838.000 personas siguen desplazadas en el interior de la RCA. Debido a la falta de perspectivas inmediatas para su regreso y al inicio de la temporada de lluvias, ACNUR teme un agravamiento de la crisis humanitaria. Los campamentos improvisados en los que están viviendo los refugiados, que se encuentran congestionados, no pueden absorber el agua y carecen de instalaciones de saneamiento adecuadas. Como consecuencia, existe un alto riesgo de cólera y otras cuestiones de salud pública, especialmente en Bangui, donde 413.094 personas aún viven en campamentos improvisados.