Una nueva esperanza para los pensionados que luchan por sobrevivir en Ucrania
Una nueva esperanza para los pensionados que luchan por sobrevivir en Ucrania
Como muchos pensionados, Nadiia de 87 años debe visitar una oficina en un pueblo vecino cada tres meses para probar su identidad y pasar por procesos de verificación como persona desplazada interna.
Pero después de sufrir una hemorragia cerebral hace seis años, apenas puede moverse. Como consecuencia, por meses no ha podido reclamar su muy necesaria pensión estatal.
“No puedo llevarla allá”, dice su hija Natalia, quien vive con Nadiia en la región de Lugansk al este de Ucrania. “Ella no puede sobrevivir el viaje. ¿Por qué necesitamos ese dinero a ese costo?”
Ahora la Corte Suprema de Ucrania ha adoptado una decisión histórica que se espera ayudará a centenares de miles de adultos mayores como Nadiia a devolverles el acceso a sus pensiones.
“Ella no puede sobrevivir el viaje”.
La resolución apoya las solicitudes de una persona desplazada interna cuya pensión ha sido suspendida desde abril de 2017 y confirma que los requisitos de verificación engorrosos que les han causado a centenares de miles de personas la pérdida de acceso a sus pensiones no constituyen base legal alguna para la terminación de los pagos de pensiones.
ACNUR, la Agencia de la ONU para los Refugiados, ha señalado el desarrollo luego de expresar en repetidas ocasiones la importancia de desligar el registro de desplazados internos y las pensiones. La ONG ucraniana y socia de ACNUR ‘Right to Protection’ suministró representación legal a los pensionados en el caso.
“El conflicto en Ucrania tiene demografías únicas con los adultos mayores constituyendo una proporción significativa de las personas afectadas – siendo casi 30 por ciento de los 3,4 millones de personas en necesidad de asistencia humanitaria y protección, y la mitad de los registrados como desplazados internos”, dijo Pablo Mateu, representante de ACNUR en Ucrania.
“Para muchos de ellos, sus pensiones constituyen un ingreso esencial. Es importante que el Gobierno de Ucrania siga este primer paso positivo y simplifique los procedimientos innecesarios para los desplazados internos para que sean tratados de la misma manera que los demás ciudadanos de Ucrania. Los derechos y las libertades estipuladas en los marcos legales internacionales y nacionales deben ser accesibles para todos”.
El conflicto irrumpió en la región en el 2014, dejando 3,4 millones de personas en necesidad de asistencia humanitaria y protección.
Anatoliy, de 66 años, se encuentra muy enfermo para dejar su casa. Vive en las áreas no controladas por el Gobierno del este de Ucrania y por mucho tiempo no ha podido cruzar la línea de contacto para validar su registro como desplazado interno. Recientemente, el Fondo de Pensiones suspendió el pago de su pensión y su esposa debió viajar largas distancia en búsqueda de asesoría legal, mientras él se quedó en casa sin apoyo.
Incluso aquellos que cruzan están sufriendo. “No he tenido pensión desde enero”, dice Nelia, de 70 años, quien cruzó al territorio controlado por el gobierno desde el punto de chequeo de Novotroitsk. “Solía trabajar en una cantera allá. Ahora no entiendo por qué no recibo mi dinero. He pasado dos horas esperando en este punto de chequeo”.
Ambos Anatoliy y Nelia esperan que la resolución judicial histórica de la última semana les permita acceder a sus pensiones más fácilmente.
ACNUR ha reiterado la importancia de continuar el apoyo a Ucrania, mientras el país enfrenta su quinto año de conflicto.
Natalia y su madre esperan por un futuro más radiante y seguro juntas.
“No tengas miedo, hija”, Nadiia le promete a Natalia. “Vamos a sobrevivir”.
Gracias a la Voluntaria en Línea Luz López por el apoyo ofrecido con la traducción del inglés de este texto.