ACNUR entrega infraestructura móvil a Costa Rica para atender la emergencia por COVID-19
ACNUR entrega infraestructura móvil a Costa Rica para atender la emergencia por COVID-19
SAN JOSÉ, Costa Rica –ACNUR, la Agencia de la ONU para los Refugiados, entregó a la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) 10 unidades de infraestructura móvil con el fin de apoyar la respuesta del país a la emergencia sanitaria por COVID-19.
El presidente ejecutivo de la CCSS, Román Macaya Hayes, agradeció al ACNUR por la donación y destacó que las unidades, conocidas como RHU por sus siglas en inglés, son muy necesarias en la prestación de servicios de salud durante una emergencia o desastre. La entrega se hizo directamente al Centro de Atención de Emergencias y Desastres (CAED) de la CCSS, el cual se encargará de desplegar las unidades según las necesidades para responder a la emergencia.
“Las características de las RHU permiten que, dependiendo del tipo de emergencia, se puedan desplegar para apoyar las diferentes necesidades que se presenten”, mencionó Mario Vílchez Madrigal, gerente administrativo del CAED. “Son especialmente adaptables para almacenamiento de insumos y equipos, ofrecen un ambiente seguro en donde están protegidos de la lluvia y el sol y otras condiciones climáticas”.
Las RHU cuentan con un espacio de 17 m², paredes divisionarias, una lámpara LED de energía solar que proporciona más de 6 horas de luz y enchufes para la carga de dispositivos electrónicos. Las unidades también se pueden ensamblar juntas para crear estructuras más grandes y usarse para recepciones, módulos adicionales de atención médica y espacios de aislamiento.
“Desde el ACNUR estamos comprometidos en apoyar a Costa Rica ante la emergencia sanitaria por COVID-19 y a aportar con nuestra experiencia en la atención de situaciones humanitarias alrededor del mundo”, declaró Milton Moreno, representante del ACNUR en Costa Rica. “El fácil montaje, desmontaje y movilización de las unidades RHU permitirán ser utilizadas a lo largo del país, incluyendo las comunidades alejadas que acogen a personas refugiadas, solicitantes de refugio y otros grupos vulnerables”.
Las unidades fueron diseñadas a través de una colaboración entre ACNUR, la empresa social Better Shelter y la Fundación IKEA para funcionar como albergues sostenibles para personas desplazadas en todo el mundo. Sin embargo, dado a sus características y facilidades, las estructuras móviles también se están utilizando en diferentes países para atender las necesidades de salud generadas por la pandemia.